Capítulo 14

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Aunque JunMyeon aún no fuera un residente en el hospital al cual SunHee fue, era demasiado bueno. Tenía demasiado cuidado, y revisaba muy bien las partes afectadas. No como los anteriores médicos que había visto, diciendo que su dolor fuerte de cabeza se debía al estres del embarazo. 

JunMyeon la había visto caminar mientras se tambaleaba en la sala de urgencias del hospital, e inmediatamente la ayudó.

-¿Crees que puedas quedarte en el hospital? No puedo darte una habitación, ya que no es algo que necesite hospitalización, pero si es importante que pueda vigilarte durante las próximas dos horas. -JunMyeon ojeó los rayos x. -No pareces tener alguna contución, o hemorragia. Pero necesito que estés cerca, así poder ver si algo te pasa.

-Claro, pero, no me quedaré aquí, tienes pacientes que atender. Estaré rondando por ahí.

-Está bien, mira, -JunMyeon le extiró un papel con su número de celular. -si algo sucede, llamame. -SunHee asintió con su cabeza, "gracias" mutó y sonrió. Dio media vuelta y salió de la sala de emergencias.

***

Las naúseas la llevaron de nuevo al baño, era la tercera vez que debía salir corriendo para no vomitar en los pasillos. 

Entre pasillo y pasillo llegó a la sala de maternidad. Era un pasillo poco concurrido, que después de un momento se vació completamente. A excepción de una enfermera que se encontraba cuidando de los bebés dentro en la habitación.

Todos esos bebés sonriendo o durmiendo. Era algo hermoso. Ella luego tendría a su hijo o hija en brazos.

Varios bebés moviendo sus pequeños brazos a un compás imaginario. Y SunHee comenzó a pensar.¿Qué le diría a su bebé cuándo preguntara por su padre?...Ah, luego se preocuparía por eso. Pero, ahora, que quiere despejar su mente, ¿cómo lo llamará? Ponerle alguno de sus nombres sería raro, bueno, si fuera una niña. Sería raro llamarla por su propio nombre. Y si fuera niño y le pusiera JongIn, lo más probable era que llorará cada que vez que lo llamara.

Estaba tan ensimismada en sus pensamientos que no notó la presencia de alguien detrás suyo. Ese alguien jaló la manga de su suéter y SunHee reaccionó.

-No grites. -Susurró fuertemente contra el oído de SunHee. Ella con miedo, giró un poco su cabeza para ver quien era la persona que rodeaba su cuello. Sin lugar a dudas no reconocía esa voz, ese brazo musculoso, que si, hacía un poco de presión sin duda la ahorcaría. Y si, sin duda no conocía a ésta persona. -No grites. -Repitió, esta vez un poco más alto.

SunHee respiró fuertemente, JunMyeon le había dicho que no era bueno para su condición estresarse o peor aún, entrar en pánico, así que respiró. El hombre comenzó a avanzar por el pasillo lentamente. En un principio a SunHee le había gustado quedar sola en aquel pasillo, pero ahora rogaba que alguien, un doctor, un niño... JongIn. Sin darse cuenta comenzó a llorar. El hombre apretó su agarre. SunHee gritaba el nombre de JongIn entre silenciosas palabras. La voz de JongIn resonaba en su cabeza.

Rogaba que aquel hombre no la llevara a un lugar demasiado solo, como la azotea. 

El hombre dejó de caminar, y llevó su mano, con la que sostenía un pañuelo blanco a la boca de SunHee, cubriendo a la vez su nariz. Era una sustancia demasiado fuerte, por lo que SunHee trataba de respirar poco.

Allí estaba JongIn. No, ésto... ésto no es una ilusión. Sin duda aquel chico que muestra tanta preocupación en su cara en JongIn, y otras personas.

-No te acerques. -Dijo aquel hombre a JongIn, quien dio un paso.

-¿Qué es lo que quieres? Deja a la chica en paz. -Dijo un doctor al lado de JongIn.

-No, ella me dejó. GyuRi me dejó. Me rompió el corazón. Yo... yo no puedo vivir sin ella... La llevaré conmigo.

-¡Sueltala, ella no es GyuRi! -Gritó JongIn.

-Ustedes me llevarán a la cárcel. Pero nosotros no podemos estar separados. La llevaré conmigo. -Continuó aquel hombre, sacando un arma.

-¡SUELTALA! -Gritó de nuevo. Dio dos pasos más cerca, y el hombre apretó su agarre contra el cuello de SunHee y contra su boca y nariz. 

-¡Que no te acerques te dije! -Repitió aquel hombre. -Tu vendrás conmigo, ¿verdad GyuRi? Nosotros no podemos estar separados.

JongIn dio un paso más largo, el hombre retrocedió. SunHee llevó su mano izquierda a su vientre y su derecha al brazo que el hombre tenía alrededor de su cuello. JongIn miró su mano izquierda y soltó una cuantas lágrimas. Dio otro paso, el hombre retrocedió de nuevo y apretó a SunHee contra su cuerpo. SunHee negó con su cabeza hacia JongIn, su vista nublada por las lágrimas. Logró apartar el pañuelo de su boca y mutó un "Gracias, JongIn".

JongIn corrió hacia SunHee. Un clic sonó, apretando el gatillo de un arma, seguido de un bang hizo eco contra las blancas paredes del hospital. SunHee y JongIn abrieron sus ojos. El hombre al lado de SunHee soltó su agarre y cayó al suelo. JongIn y SunHee sonrieron.

Sentía que sus piernas se desmoronaban, era como si se derritieran. Vio la sangre. Uno frente al otro. Abrio sus ojos al ver la sangre en el brazo del otro gritando un "¡No!". Y finalmente cayó fuertemente contra el suelo.

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NOTA: ¡Adivinen quien muere! Jajaja, mentiras... o quizá no... ಥ_ಥ

Como sea. Ya saben que hacer.

祝你有美好的一天。

Cold Whispers → k.j.iDonde viven las historias. Descúbrelo ahora