-¿Qué... Qué pasa Steven?- intenté disimular.
-No, nada, que me paso a ver como sigues y me encuentro aquí a la chica más guapa de instituto diciendo que no le gusto, imagínate como me quedo yo ahora...- Nos dijo totalmente serio.
-Bueno, tampoco estés echándole piropos a Michi porque tienes novia Steff...- Le respondí.
-Que tenga novia no significa que no pueda decir que Michi es realmente guapa... ¿Tu que opinas Michelle?- Dijo con tono sensual.
-Eh...nada...yo...creo que...eh...no...sino...eh...- A Michi le saltaban los colores y ya no sabía ni que decir, me preocupaba que le estuviera dando un ataque de shock o algo así
-Shh Michi no digas nada, mejor te traigo agua- Le dijo Steff.
-Te lo agra...agradecería...- Apenas respondió ella y Steven ya había salido del cuarto.
Las dos estábamos en un estado de que no sabíamos si era real o ficticio pero que algo raro había sucedido en la habitación <240>.
•••
Todavía tratábamos de asimilar lo que estaba pasando allí, yo entre la muñeca y esto no sabía que más podría llegar a pasar, pero esto era muy fuerte y si yo estaba en estado de shock me imagino como estaría la pobre Michi de asustada.
-Tía- Le dije en bajito. -¿Estás bien?
Asintió.
-No he entendido nada Kat... P...pero ¿no tenía novia?
-Al parecer no esta colado por ella, la tendrá porque si, por pasar un rato, como te llevo diciendo estos seis meses que han pasado.
-Lo dudo Kat, ¿Estar con una persona sin que te guste? Es una tontería...
-Pues es lo que parece tía, te tira más palique que nunca... Verás como le gustas a todas estas.- Le dejé la conversación ahí ya que venía en ese mismo instante Steff con un vaso de agua para Michi.
-Ten Michelle.- Le dijo.
-Steven sabes perfectamente que odio que me llamen de ese modo.- Dijo ella incomoda.
-Lo se, por eso lo hago...bueno chicas, os dejo solas para que sigáis hablando.- Cuando estaba a punto de irse se volteó y me dijo -Ah y Kat, siento mucho que te hayas partido el brazo, ojalá te recuperes pronto. Adiós Michi.-Le tiró un beso y pronuncio el nombre "Michi" con risita, a mi solo me hizo un gesto de adiós con la mano.
Tres minutos después reaccionamos y nos dimos cuenta de que era ya hora de irnos. Fuimos directamente andando ya que mi casa quedaba a unos quince minutos, no hablamos sobre el tema de Steven en todo el camino, y Michi se encargó de comprarme las medicinas para el dolor de muñeca que el médico me había recetado.
Cuando llegue a casa mi madre me recibió muy asustada.
-Kate Harpett, ¿¡que demonios te ha pasado?! -corrió hacía a mi preocupada.
-Mamá, sólo es una fractura, nada más, tampoco se ha hundido el instituto, aunque no estaría mal...
-En fin Kate, no te castigaré porque no es culpa tuya pero promete que no volverá a ocurrir.
Me extendió el meñique y yo lo junte junto al de ella.
-Prometido.
-Bien, y donde esta Michi? Creí que venía contigo.
-Fue a comprarme las medicinas para el dolor, supongo que estará aquí en... Ala mira, ahí esta -sonreí al verla llegar.
-Buenas tardes señora Harpett
