Look At Me- CH

🔞II " Dulce crema con cerezos "

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Susana distancia cabrones

" Dulce crema con cerezos "
Disfruten de la lectura.

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Le dedico una sonrisa sin amabilidad.

No caería tan fácil en las trampas del soviético, buscaba ir un paso mas adelante que el mayor. Lo había logrado, con una buena planeación y cantidad de tropas en la frontera rodeando al soviético dejándole sin escapatoria alguna.

Urss no se dejaría tan fácil, igual mano tropas bien equipadas.

Cara a cara se encontraban mientras que sus soldados peleaban para proteger y resguardar la seguridad del territorio y pobladores.

— Tu maldito — gruño apuntando con su arma al frente del alemán, quito el pequeño seguro; un movimiento que le parezca peligros y apretaría el gatillo.

— Perdiste~ —tenia una sonrisa despectiva mostrando su afilada malévola sonrisa. -vamos, ríndete, arrodíllate ante mi- burlo.

— Nunca — negó, no se dejaría vencer tan fácil por ese bastardo. Era ahora o nunca en acabar esa guerra, solo era jalar aquel gatillo.

Jalo el gatillo, pero solo fue un pequeño sonido en seco; nada, el arma no portaba ninguna bala. Posiblemente hubo algún espía, una razón lógica del porque ahora tenia a ese idiota al frente suya. El alemán rio, claramente había ganado — ¿Listo para rendirte, Urss? —

Apretó sus dientes con molestia, no se dejaría vencer tan fácil; si no podía con el arma entonces a puño limpio.

Se lanzo contra el de esvástica tumbando de inmediato, había una clara diferencia de alturas dándole ventaja al soviético.

El alemán interponía sus piernas buscando alejarlo mientras forcejeaba, el soviético igual.

Se daban golpes mutuamente despeinando y desacomodando sus prendas. Mientras el soviético se dedicaba a ahorcar al nazi y este buscaba impedir que lo hiciera, le pateo la entre pierna obligando a Urss soltar su agarre. Sonrió con victoria mientras el otro se quejaba.

— Ahora si estúpida mierda — se levantó con brusquedad dirigiéndose al incado urss, saco su navaja de su estuche del cinturón. Posó su mano con fuerza en el hombro del soviético para luego clavar sin piedad el arma en el espalda del soviético, no quería matarlo al instante, solo fue una herida alejado de sus órganos u partes vitales. Urss soltó un claro quejido de dolor acompañado de un grito.

— Ahora harás todo lo que yo diga — dijo con superioridad el nazi.

— Sobre mi cadáver! — se encontraba cuervado sin realizar algún movimiento, si se moviera sería un claro martirio y más por la forma en que estaba clavada la navaja. — No ganarás tan fácil — con la fuerza que quedaba en su brazo derecho golpeó con su puño al de la esvástica.

— Ja! Crees poder vencerme ahora?! Ahora TU territorio es mío, al igual que tus hijos — eso último.. tomo impulso con sus rodillas para ir contra al menor de estatura.

Si el estaba ahí con el nazi.. ¿Dónde estarían sus hijos? Lo único que recordaba era haberlos dejado en la sala conviviendo entre si tranquilamente.

— ¡Nun..CA! — la herida en su espalda ardía con fuerza, el nazi mantenía su sonrisa ¿Por qué?..

Sintió un ligero dolor pulsante en su vientre, dejó de moverse para voltear a ver el arma clavada.

— Tu.. eres un.. bastardo! — grito con furia.

Clavaba más y más a más no poder.

Con esas condiciones era ahora más difícil pelear, si cuerpo se debilitaba más tras la perdida de sangre masiva.