El Soldado Fantasma (AnaObi) [Traducción]

Capítulo 8/10

Él estaba allí, esperándolos.

Anakin estaba de pie en la boca de la entrada de la base, mirándolo fijamente. Estaba vestido con el atuendo completo del Soddo Fantasma, completo con su capucha y sable de luz roja. Debajo del capó, sus brillantes ojos rojos quemaban a Obi-Wan con su mirada.

Cuando Obi-Wan salió de la nave de transporte, se sintió como un puñetazo en el estómago.

- Aquí vamos - dijo Mace. Obi-Wan no podría estar más de acuerdo.

Los tres Generales Jedi se formaron y avanzaron como una unidad, Obi-Wan al frente con Korin y Mace flanqueándolo. Todos eran maestros en los caminos de los Jedi, pero esta pelea fue indudablemente más desafiante de lo que estaban acostumbrados. Estaban frente a un Lord Sith y su comodín asesino Jedi convertido en Sith. Este era un territorio desconocido para todos ellos.

Obi-Wan se adelantó, apretando con fuerza su sable láser azul. Sus ojos todavía estaban fijos en los de Anakin, buscando cualquier asomo de vacilación o reconocimiento en sus ojos que había visto en su última pelea. Lamentablemente, no hubo ninguno. Lo único que Obi-Wan podía ver en los ojos del otro hombre era furia no disimulada.

- Sidious está aquí. Detrás de Skywalker. Acechando como la serpiente que es - murmuró Korin pesadamente.

Obi-Wan desvió la mirada de Anakin para buscar a Darth Sidious en las sombras. Korin tenía razón, el Lord Sith estaba a unos diez pasos detrás de su amigo perdido hace mucho tiempo, sus propios ojos rojos y piel blanca visibles a través de la oscuridad de la entrada de la base. A diferencia de la cara en blanco de Anakin, Sidious estaba sonriendo. Parece que él sabía que vendrían y decidió luchar contra ellos, reflexionó Obi-Wan.

- Nuestra misión sigue siendo la misma. Rescatar a Anakin, arruinar la base. Ahora, quizás también podamos dañar a Sidious - dijo Obi-Wan.

Mace se rio brevemente -. Es más fácil decirlo que hacerlo, Kenobi.

Obi-Wan no dijo nada a eso. Todos sabían que iba a ser difícil, casi imposible incluso. Aún así, los tres se habían ofrecido como voluntarios para esta misión. Sabían a lo que se enfrentaban.

Los tres Jedi continuaron su camino hacia la boca de la base, sus movimientos lentos pero decididos. Obi-Wan se sintió como un león, acechando a su presa. Excepto que su presa lo miraba fijamente, consciente de cada movimiento que hacía.

Sin tener que decir nada, los tres maestros Jedi sabían instintivamente cómo atacar. De repente, los tres se movieron al mismo tiempo. Mace y Korin volaron para golpear a Anakin a cada lado, y Obi-Wan levantó su sable láser para encontrarse con Anakin de frente.

El Soldado Fantasma respondió levantando su propio sable láser y girando en un círculo rápido, parando así los tres ataques por separado al mismo tiempo. Se movió tan rápido como el Jedi, lo que Obi-Wan supuso que se esperaba en función de con quién luchaban.

Los tres maestros luego comenzaron a moverse en secuencia, enfocándose en ataques bien dirigidos diseñados para desorientar a su enemigo con su rápida sucesión. Sin embargo, Anakin enfrentó cada ataque con un bloqueo igualmente rápido.

Obi-Wan frunció un poco el ceño ante eso. Anakin simplemente estaba bloqueando sus ataques y no estaba haciendo ninguno propio. No era característico del Soldado centrarse solo en la defensa en lugar de la ofensiva.

Parecía que Darth Sidious tenía el mismo pensamiento. Su sonrisa desapareció hace mucho tiempo, reemplazada por un gruñido.

- ¡Atacalos! - Él ordenó -. ¡No te detengas!