-Tengo hambre...-hablo T/N con un tono de aburrimiento. Ella era una chica de cabellos c/c y ojos c/o, actualmente estudiaba t/c [tu carrera].
-Yo también -hablo con el mismo tono Yao. Un joven de ojos ámbar y cabello castaño un tanto largo; era un poco mayor que ella y actualmente estudiaba una maestría en historia.
Hacia ya seis meses que eran roomies, su relación era tranquila y casi se podría descubrir cómo una relación de hermano mayor-hermana mejor si no fuera por ciertos sentimientos que había entre ellos.
-¿Qué podemos comer?-preguntó ella mientras lo miraba.
-No lo sé...-.
-¿Qué tal un platillo de tu país?-.
-Ahora que lo dices...-se puedo pensativo -Hace mucho tiempo que no cocino algo de mi país -la miro con una sonrisa -¿Me ayudarías?-.
-¡Claro!-contesto ella entusiasmada -Pero si quemó la cocina no me culpes...-.
-Vamos T/N, no eres tan mala en la cocina -dijo él mientras reía por su comentario.
-Uno nunca sabe lo que puede pasar -alzo los hombros mientras sonreía.
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-¿Lista para hacer dumpligs?-preguntó entusiasmado Yao. Luego de reunir todos los ingredientes ya estaban listos para cocinar.
-En mi vida e hecho dumpligs pero bueno -.
-Bueno, yo preparé la masa y tú me ayudarás con el relleno-.
-Bueno -asintió felizmente.
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Los dos estaban concentrados en lo que hacían: ella cortando los ingredientes mientras que él se esforzaba en que la masa quedará perfecta. Sin embargo, la chica de cabellos c/c lo miraba de reojo; era atractivo y tierno, además de caballeroso, de hecho ya se había hecho la idea de que ella sentía algo por él, pero no sabía como decírtelo sin arruinar su relación.
-¿Ya terminaste con eso?-preguntó sonriente el castaño.
-¿Ah?-rapidamente desvío su mirada, tal vez él no había notado que T/N lo estaba observando -Ya casi...-.
-Bien, esto ya está, sólo falta eso -apunto los vegetales que la contraria estaba cortado. Mientras terminaba, él la observaba con cierto cariño, se había enamorado de esa chica sin saber exactamente como y cuando.
-Listo -hablo ella -Sólo falta freírlos, sazanarlos y listo, ¿verdad?-preguntó T/N, Yao en respuesta asintió suavemente.
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-Y entonces, lo doblas así y ya está -explico él asiático.
-Lo haces ver fácil...-bufó ella, quien intentaba envolver el relleno de verduras con la masa.
-Dejame ayudarte -sin que T/N pudiera negarse, Yao puso sus manos encima de las de ella y las fue guiando para ayudarle a envolver el dumplig -Listo -la miro lo a los ojos mientras le sonreían.
Sin planearlo sus miradas estaban conectadas, sentían que sus corazones latían rápidamente y como sus caras estaban calientes a causa de un sonrojo.
-Uhm... gracias Yao-le sonrió tímidamente.
-No es nada T/N-le sonreía con cariño.
Luego cocinar al vapor los dumpligs y hacer un pequeña aderezo de salsa de soya los dos se dispusieron a probarlos.
-¡Estan deliciosos!-exclamo felizmente la chica.
-¡Concuerdo totalmente contigo!-hablo felizmente el castaño. Ambos comían felizmente mientras estaban sentados uno al lado del otro.
-Oh, Yao, tienes algo cerca de tus labios -comento la chica.
-¿En serio?-se limpio con la servilleta, sin embargo no lo logró completamente.
-Espera -con su pulgar la chica limpio aquella pequeña mancha, quedando muy cerca de él -Listo -dijo tiernamente.
-Tú también tienes algo en tus labios...-.
-Oh...¿en serio?, ¿qué tengo?-antes de tomar una servilleta sintió la respiración del contrario cerca de ella.
-Mis labios -sin tiempo a reaccionar el mayor unió sus labios con las de ella, creando un beso tierno entre ambos. -Listo -fue lo que dijo él cuando el beso acabo y sin más siguió comiendo. Tenía un leve sonrojo en su rostro y sonreía felizmente, no sólo por que la comida estaba buena, sino también fue por el beso. Esperaba que ella entendiera esa indirecta.
-Ah...gracias -dijo algo tímida T/N, pero también estaba feliz. Tal vez eso le daría fuerza para confesarle sus sentimientos al mayor.
Pero por ahora, seguiría comiendo tranquilamente al lado de él.
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