- Entonces es aquí donde nos despedimos, ¿Sabes cuándo volverás? -
- Creo que estaré allá un buen tiempo – dijo sonrojado – pero si me necesitas volveré cuando lo pidas.
- Lo sé, ya vete y se feliz, dile a Gaara de mi parte que si no te cuida sentirá la furia Uzumaki -
- Jajaja si no me trata bien yo mismo lo golpearé, no te preocupes... Sasuke cuida de él -
- Y así fue como se despidieron de Lee quien iba rumbo a su misión más emocionante ¿Cuándo volverá? Quien sabe... -
- Ahora que ya nos despedimos deberíamos ir a entrenar -
- Hoy quiero que entrenemos juntos -
- ¿Estás seguro Sasuke? -
- Quiero pelear contigo -
- ¿Estás molesto o qué? -
- Jajaja no, pero quiero medir tu fuerza (y la mía) -
- Bien, prepárate gatito porque te haré zumbar -
Hace mucho tiempo que la pareja no se enfrentaba la una a la otra, ahora todo era distinto, sus poderes eran totalmente descomunales, y el ambiente erótico lo hacía mucho más interesante.
El lugar donde Naruto había estado entrenando junto a Kakashi y Yamato era el escogido, una banca ya no era suficiente, Yamato se encargó de hacer otra más ya que tenían público.
Kakashi y Yamato habían apostado contra Sakura e Itachi, el primer grupo apostó a que Naruto ganaría y el segundo grupo obviamente a Sasuke.
La batalla dio comienzo y el ambiente se estaba tensando, no había nervios, no había enojo, solo motivación y amor, pero este no contaba en este momento.
Se acercaron e hicieron un movimiento demostrando que estaban peleando bajo las condiciones de un ninja.
Un Sasuke calculador y estratégico esperaba que el rubio diera el primer golpe, mientras tenía en la mira unos cuantos movimientos que este haría, si algo tenía Sasuke es que era muy observado y analizaba la situación antes de enfrentarse.
Aquel rubio dominado por el deseo de vencer a su amado avanzó sin miedo siendo veloz e implacable, el primer golpe se vio, pero no se sintió, el azabache esquivaba cualquier aproximación a su cuerpo.
Todos los años que le había tomado volver donde el rubio no habían pasado en vano, y Naruto había adquirido ciertos trucos que ponía en marcha una vez que se veía amenazado.
- ¡Uzumaki ráfaga! – escuchó Sasuke cuando recibió una fuerte patada proveniente de los cielos.
Con la mirada gacha escupió sangre de la boca, el rubio era fuerte, y ahora ¡Se prendió esta mierda!
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El amor de mi vida siempre has sido tu
RomanceYa son 6 años desde que dejé la aldea, últimamente me estoy sintiendo más ansioso que de costumbre y no puedo ignorarlo más, siento como el pecho me va a estallar, yo... lo necesito. Fragmento de la historia: Sus ojos buscaban con anhelo la presenci...