HADES & PERSERONE: UN AMOR A TRAVES DEL TIEMPO

16. HADES

Mi señor

Si minos?

Aquí le traigo el informe de almas que han entrado al inframundo

Son demasiadas no?

Para haber estado tanto tiempo lejos de aquí, creo que es una cifra normal mi señor.

Ya lo creo,
¿Ya esta lista la cifra de almas que yacen en cada lugar del inframundo?

Radamantys la dejo en su escritorio señor.

Muy bien entonces iré a checar que todo en el tartaro vaya bien, avisa a tanatos que esta noche saldremos a buscar a esos malditos demonios.

Si mi señor

El dios de las riquezas camino por sus dominios, observaba cada minimo detalle de aquel lugar, escucho el perturbador lamento de las almas  que se encontraban dentro  del río estigia; y sin tomar tanta importancia siguió su camino.
Llego hasta las imponentes puertas que separaban al inframundo del tártaro.

Hades, que haces aquí?

Hecate, como va todo por acá?

Lo mismo de siempre ya sabes,  titanes furiosos, hecatonquiros planeando escapes; nada fuera de lo normal

Ya veo.
Hecate sabes tu cortar el cabello?

  POR  TODOS  LOS  DIOSES
QUIEN ES LA CHICA?
lograste recordar algo???¿¿

QUEEE! relája tu emoción bruja, no es lo que piensas!

Entonces?
Te escucho

Esta noche partire junto a tanatos al mundo de los humanos, y realmente no tengo ganas de usar el casco de la invisibilidad

Si y?
Porque te quieres cortar el cabello?

Porque?¿?¿ acaso no es obvio,
Es demasiado largo y me gustaría pasar desapercibido..

A aja? Y tu crees que con solo cortarte el cabello lograrás eso?

Pues si, sabes o no cortar el cabello???

Si hades si se cortar el cabello

Entonces te espero antes del anochecer en mi cuarto

A caso es esto una propuesta indecente?

NOOOO SOLO ME CORTARAS EL CABELLO!!!

ja ja ja ya lo sé, además no eres mi tipo gruñón

Como sea,  te veo al rato

○○○○○○○○○○

Era bastante bien conocido por todos en el inframundo que hades y hecate compartían una buena y muy vieja amistad, ella llegó años después al inframundo;justo después de que zeus y poseidón traicionaran al mayor de los olímpicos encadenandolo así a vivir para siempre en aquel submundo.
Ella se había convertido en la mano derecha del dios y en su más grande amiga de confianza, aunque la mayoría de las veces su manera pesada de llevarse con el lograba enfadarlo demasiado.