Capitulo V

59 3 2
                                    

Vi aquel escrito, una leve sonrisa se marco en mi rostro, me di cuenta que el asesino no era cualquier persona, era alguien esciente, le gusta llamar la atención e incluso es algo poético, tal vez un poeta de la muerte; quien sabe, pero para mi so...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Vi aquel escrito, una leve sonrisa se marco en mi rostro, me di cuenta que el asesino no era cualquier persona, era alguien esciente, le gusta llamar la atención e incluso es algo poético, tal vez un poeta de la muerte; quien sabe, pero para mi solo era una persona que necesitaba un psiquiatra, rápido.
De asesino a poeta era el titular en casi todos los noticieros de esta ciudad, de algo estaba seguro, la policía no ponía en riesgo la investigación, porque no tenían ni idea de lo que significaba, o de lo que podía ser. Esperaban que alguien tenga una leve idea y pueda aportar a la investigación.
Como aún no encontraban al asesino, tome un libro y lo empecé a leer en el balcón del departamento aprovechando el día que estaba cálido y se podía escuchar cantar a los pájaros, resultaba relajante para mi ser, pasaron las horas y me cansé de leer, eran las 11 de la mañana, decidí salir a caminar por el bosque e indagar más en la zona del crimen, así que me cambié de ropa rápidamente y salí del departamento, estaba a punto de llegar al bosque, pero el ambiente se notaba desolado tal vez no había nadie allí, una vez dentro del bosque no vi a nadie hasta que estaba cerca de la zona del crimen, entonces caminé despacio y tratando de hacer el menor ruido posible, para que no notaran mi presencia, me hinqué y oculté detrás de un árbol, los policías parecían no sospechar que alguien estaba cerca, lo cual me tranquilizó.
-¿Qué estamos viendo?
-Aún no lo sé.
-Aaa, ok entonces esperemos.
Espera...me dije en mi cabeza, regresé a ver y me encontré con la sorpresa que detrás de mí se encontraba Dan.
-¡¿Qué haces aquí?!-acote un poco nervioso.
-Pues le acompañe a mi padre y ¿tú?
-Nada, solo sentí curiosidad por la investigación que se lleva a cabo.
Eso explicaría porque Dan recibió un mejor trato cuando lo interrogaron.
-¿Cómo me encontraste?-pregunté.
-Te vi pasar, cuando estaba en el auto de mi padre y decidí seguirte, parecías un poco asustado.
Solté una carcajada un poco sarcástica y le pregunté qué sabía.
-La verdad no mucho, de hecho tengo mucha curiosidad en esto, y tengo un par de hipótesis-dijo Dan un poco pensativo.
-¿Enserio?
-Si, las quieres escuchar.
Entonces asentí, y salimos del bosque, nos dirigimos hacia una cafetería para hablar sobre el asesinato, todo el camino fue silencioso, no quise preguntar nada porque a Dan se le notaba un poco preocupado.
Llegamos a la cafetería, yo me pedí un capuchino y de igual manera Dan.
-¿Estás bien Dan?
-Si, si, lo qué pasa es que Jessica sigue un poco mal.
-Bueno, tiene sus razones, vivió algo espantoso al ver ese cadaver.
-La conocía Kevin, su nombre era Victoria, era una muchacha dulce, y muy inteligente, educada, amable, casi todo el pueblo la conocía por su empatía con todos, quien lo hizo es un ser que aborrece.
Brotó una lágrima en sus ojos y él las reprimió con un golpe en la mesa fuerte, la gente dirigió sus miradas hacia nosotros, donde las fijaron y empezaron a susurrar. Dan se calmó, había llegado el pedido de habíamos hecho.
-Dan, ¿que crees que significa el mensaje?- pregunté, sabía que hice mal, pero habíamos venido hablar de eso y eso era lo que teníamos que hacer.
-Aún no lo sé.
Se notaba que Dan era una persona que se dejaba llevar por las emociones, y no digo que esté mal, pero no es bueno acudir al extremo de algo.
Iba a decir algo pero Dan me interrumpió.
-Kevin, no quiero hablar de esto.
-Como quieras, creo que sería mejor que lo medites tú solo en casa.
Con un mano, tope su hombre en señal de amistad y deje efectivo para que pague los capuchinos y salí de la cafetería.
No era muy bueno al consolar personas y tal vez podría empeorar la situación, así que camine con destino hacia mi departamento, llegue abrí el congelador, vi un par de carnes y decidí cocinar, hacer una cena para Dan, Jessica y Nicol, quizás les vendría bien pensé yo, entonces puse manos a la obra, no es que quiera presumir pero en la cocina soy un chef innato, un maestro en el arte culinario, una vez preparado casi todo, escribí y los invité a la cena a todos los nombrados anteriormente, por suerte todos ellos aceptaron venir, quedamos a las 19:00, había pasado mucho tiempo cocinando, pues era perfeccionista en casi todos los aspectos de mi vida, y requería tiempo preparar el plato que iba a servir como cena esta noche.
El reloj marco las 18:00, tome una ducha y me vestí de una forma semiformal, me gustaba vestirme así, una vez finalizado esto, alguien golpeó la puerta, vi mi reloj de muñeca era las 18:20, ¿quién podría ser?, me dije, entonces salí atender, era Nicole, se veía asombrosa como siempre, y tenía una flagrancia exquisita.
-Pase usted my lady, exclamé un poco coqueto.
Movió sus brazos, con delicadeza, hizo una mini reverencia y pasó. Nos reímos por hacer algo tan formal y antiguo.
-¿Te puedo ayudar en algo?, preguntó Nicole.
-No como crees, la invitada eres tú.
Ella sonrío, y yo me perdí en su sonrisa, divague en su mirada.
-Te ves hermosa- acote perdido aún en ella.
-Gracias, pensé que no lo ibas a decir.
Enserio ella era una diosa vestida de mujer.
Solté una carcajada y dije:
- Y perderme la oportunidad de besarte, exclamé un poco coqueto, por cierto ella portaba un vestido rojo, lo cual en mi despertaba una pasión inmensurable.
-Sigue soñando-dijo ella mientras sus dedos acariciaban sus labios.
Me acerqué a ella con el afán de besarla, no logré resistir a sus encantos, cuando alguien llamó a la puerta, y me despisto de mi objetivo.
-Salvada por la campana, dijo ella, y después se mordió los labios coquetamente.
No me podía resistir, pero tampoco podía dejar afuera a mi invitado o invitada.
Abrí la puerta y noté que era Jessica y Dan, ella llevaba puesto un vestido de un color morado oscuro, que era muy hermoso y denotaba calidad en cada pliegue, Dan llevaba puesto un smoking negro; al parecer a ellos también les gustaba vestirse de una buena manera, tenían buenos gustos.
-Hola Jessica y Dan.
Me saludo Jessica con un beso en la mejilla y Dan con un apretón y de manos. Pasaron y vieron a Nicole, se saludaron.
Los invité a que tomaran asiento, parecían que estaban bien, nadie mencionaba sobre Victoria, tal vez lo hacían para que nadie se pusiera mal, entonces los deje en el comedor, me dirigí hacia la cocina para hacer la entrega del plato que había preparado, no me había dado cuenta de que Nicole me siguió, juntos ya en la cocina ella me acarició el rostro y llevo mis labios a los suyos, perdido en un trance de completa dopamina, ella me empujó de una manera sensual y agresiva, mas no pasó nada, porque no podía dejar a mis invitados esperando, entonces me aleje de Nicole y empecé a servir en los platos cuidando meticulosamente la presentación, Nicole al ver esto se acercó a mí y con un suave movimiento me besó en la oreja izquierda despertando en mí los deseos más oscuros, sin embargo salió de la cocina y me dejo en lo que tenía que hacer, entonces llevé plato por plato a cada uno de mis invitados, en las copas ya colocadas con antelación y les serví vino.

Solo escucha mis Ver S.O.S y entenderás cada TE EXTRAÑO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora