Diez

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Lisa se quedó congelada por unos segundos mientras las lagrimas comenzaban a caer por su rostro.

No podía creer que se había ido, el amor de su vida se había ido. Jennie tenía razón; el destino era cruel.

Algunos jadeos se escaparon de sus labios mientras el llanto no cesaba, se abrazó a si misma en un rincón del sillón tratando de calmarse.

Tragó en seco luego de unos minutos, se le habían acabado las lagrimas.

Se puso de pie y caminó hasta el baño, miró su reflejo; se veía devastada.

—Dios, Lisa —Se murmuró para si misma.

Abrió el lavamanos y lavó su rostro; despejándose.

Mañana presentaría su examen final y decidiría prácticamente toda su vida; si seguía en Corea o conseguía la beca en Francia.

Soltó un suspiro mientras caminaba a su habitación, sacó papel y lápiz para luego escribir.

"Querida Jennie

Me estoy estremeciendo por dentro; por cada beso, por cada momento, por cada momento.

Aunque el destino es cruel, volvería a elegirte mil veces de nuevo.

Te prometo que esta historia no terminará aquí, la seguiremos escribiendo por nuestro lado.

Incluso si besas a alguien más, si amas a alguien más; te seguiré amando por el resto de mis días, porque esta historia aún no termina.

— Lisa."

Y guardó la carta.

( . . . )

El día había llegado y Lisa estaba sumamente nerviosa.

Se levantó y camino hacia el baño, su reflejo se veía cansado y ojeroso de tanto llorar, pero nad que el maquillaje no pudiera tapar.

Se dirigió la sala de estar en dónde tenía su obra maestra plasmada de un lienzo.

Sacó el atril junto a la pintura, y los metió en la parte trasera del auto para luego partir a su destino.

Una vez ahí, se topó con Rosé, sonrió con desgano y esta lo notó.

Mientras bajaban las cosas, la castaña preguntó.

—¿Qué pasó?

—Jennie se fue —respondió mirándola y sintiendo como sus ojos se humedecían lentamente.

Lisa se acercó a sus brazos y en un cálido encuentro, sollozó.

—¿Cuándo? —preguntó mientras Lisa se alejaba.

—Ayer, me dejó una carta.

Rosé soltó un suspiro y acarició el hombro de la contraria.

—El destino es cruel ¿no lo crees? —preguntó mirándola.

La mayor decidió omitir comentarios.

Esperó a que bajara su atril junto a la pintura.

Una vez adentro, lo acomodó en la sala.

( . . . )

—Lisa — Una suave voz llamó a Lisa; Chaeyoung.

Estaban solas en una sala, Irene había llamado a cada uno de los estudiantes junto a sus obras.

La sala de paredes blancas y piso de madera estaba solo, a excepción de las dos chicas y el atril.

Irene se tomó unos segundos para observar la obra y hacer observaciones en su libreta.

—¿Qué te inspiró de tu musa?

Se tomó unos segundos para contestar.

—Me inspiró su cuerpo; sus finos labios, sus ojos mil, sus delicadas manos, su hermosa alma. Me inspiró completamente. Fue una de las mejores experiencias trabajar con su cuerpo tallado, no solo por la belleza física. Sentí una conexión especial y única que decidí plasmarla en mi lienzo.

Irene asintió mientras escribía en su pequeño cuaderno.

—Explícame tu técnica.

—Es óleo sobre lienzo, ocupé trazos finos dándole énfasis en los colores más claros, sin embargo, las sombras no se quedan atrás. A pesar de ser en cantidad menor, le da dramatismo a la escena.

—Gracias, más tarde te llamaré, Lisa.

Hizo una leve reverencia antes de salir de la sala.

( . . . )

— ¿Qué tal te fue, Lili? — preguntó su mejor amiga con una sonrisa en el rostro.

—Creo que bien, aunque sabes que Irene es muy exigente con este tipo de exámenes.

Rosé soltó un suspiro.

( . . . )

—Lisa, pasa, por favor.

Lisa asintió y le dedicó una sonrisa tímida a su amiga.

Una vez adentro, miró a Irene a los ojos, esta tenía su semblante serio; tenía miedo.

—Pensé en tu obra, y me transmite mucho amor— sonrió— fue un amor efímero pero sumamente bello y artístico.— carraspeó su voz— te ganaste la beca a Francia, Lisa; les gustó tu obra.

Lisa sonrió y no pudo evitar emocionarse.

"Te dedico esta obra, Jennie, te dedico mis sonrisas, mis amores, mis desamores, te dedico mi cuerpo y alma. "

F i n

Paint me - JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora