No more drama || BNHA

7. Día cero

-Los malditos héroes- susurro Dabi jalando a Toga- ¡Genten!-

Se disponía marcharse con una densa capa de hielo que los dividiera, el muro se alzó en segundos dejándolos divididos.

-Esto apenas comienza- Lemilion se encontraba a un lado de Dabi mientas de fondo se escuchaban golpes y explosiones contra el hielo- No tiene sentido huir, se encuentran rodeados-

-Tenemos un rehén- dijo confiado Dabi retrocediendo

-Lemilion-senpai- escucho  a Uraraka correr cerca de el

-Vinimos a res…-no pudo terminar cuando noto el ardor a un costado, tenía un cuchillo pequeño clavado

-Te descuidaste senpai~- sonrió Himiko con la apariencia de Uraraka

Después una llamarada los envolvió y poco a poco el hielo se rompió causando una explosión.

-Lemilion- Deku se acercó entre todo el humo

Una sombra paso a su lado y al verlo bien Bakugo había entrado casi volando sosteniendo con fuerza la cara de Dabi.

-¡Te encontré bastardo!-

Una fracción de segundo le basto para causar una explosión tan grande que inundo el lugar de humo negro.

-Bakugo- escucho la voz de Uraraka

El rubio se levantó, no se midió pero no hacía falta quería descargar toda su ira contra algo, miro al castaño entre todo el humo pero noto que algo estaba mal así que levanto su brazo amenazante.

-No eres Uraraka- miro la sangre en su costado y claramente no era el

-Que perceptivo- Himiko se pasó el cuchillo por la boca desvaneciendo su transformación

Algo jalo a la Himiko entre la penumbra.

-Nos vemos luego estúpidos héroes- la voz de Toga resonó en todo el lugar

Al parecer se había marchado.

-Uraraka- Bakugo encontró la silla aun con poca visibilidad

-Bakugo-kun- Uraraka le sonrió al verlo

-¿Eres tú, cierto?- le apuntó con su granada

-Sí, soy yo- pero no creyó que eso convenciera al chico- Recuerdo todo lo que paso ese día-

Esa era una conversación que solo él podía saber, así que se relajó un poco- ¿De verdad?-

-…Si, las cosas están un poco dispersas aun, pero sé que paso-

-Bien, vamos a que te revisen esa cortada- vio la herida en su brazo- después podremos hablar de lo que paso- dijo demasiado tranquilo

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El “día cero” como Uraraka lo había llamado, era muy diferente de acuerdo a la persona que lo interpretara. El que peor lo había visto era Iida.

Versión de Iida

Ese día se encontraba regresando con Yaoyorozu de la sala de profesores, habían ido a conseguir un permiso para la clase para un salida en el próximo festival de verano, hablando banalmente como siempre con la chica noto algo afuera que le llamo la atención, Uraraka se dirigía a la parte trasera del edificio y por su caminar podía notar que se encontraba muy nerviosa. Así que se despido de su compañera y se apresuró llegar a donde se dirigía su compañera aunque tomando una ruta diferente solo para observarla y en caso de ser necesario ofrecer su ayuda ya que no sabía bien que haría, miro por el ventanal, poco antes de llegar a su destino para ver a la castaña llorando como si no hubiera un mañana mientras se limpiaba las lágrimas a Bakugo que le daba la espalda no podía ver que le decía, pero supuso que no era nada bueno si su amiga estaba llorando así.

El mismo hubiera saltado por la ventana para decirle unas cuantas cosas al chico explosivo, pero como delegado de la clase no podría hacer eso ¿Qué ejemplo podría dar si hacia eso? Así que se apresuro a bajar por las escaleras que le faltaban encontrándose con Midoriya mirando atentamente la puerta.

-Midoriya ¿qué haces aquí?- vio al peliverde brincar

-Iida-kun- me asustaste- Bueno…estoy esperando-

-¿A quién?-

-A Uraraka-kun-

-¿Cómo puedes estar esperando cuando él le está diciendo quien sabe que tantas cosas?- hablo molesto

-Bueno, no deberíamos intervenir, es asunto de ellos-

-Claro que no, hacer a un chica llorar así no es algo que puedas permitir- se acomodó los lentes- yo si voy a ir- se dispuso a salir

-Claro que no- Midoriya lo jalo

-No entiendo por qué te estas quedando tan quieto-

-Porque son sus cosas-

Estaban forcejeando en la entrada de la puerta con Midoriya impidiéndole a su amigo cruzar la puerta con toda la fuerza que tenía. La puerta se abrió sola dejando ver a la chica castaña.

-¿Qué hacen los dos aquí?- pregunto limpiándose el rostro

Los chicos se congelaron y se pararon firmes.

-Uraraka-kun voy a decirle unas cosas a Bakugo por lo que te hizo-

-¿Lo que me hizo? No es necesario Iida-kun- dijo alegre en su tono habitual- No pasó nada, yo exagere las cosas- hizo un gesto con la mano

- Son tonterías Uraraka-kun ¿Por qué lo estas justificando?- hablo molesto

Ambos se sorprendieron por que no sabían porque su amigo estaba tan molesto.

-Iida-kun ¿Pasa algo?- pregunto Midoriya

-No- entendió que él estaba muy lejos de lo que ellos decían- No los entiendo- dijo y se marcho

Porque parecía que no estaban en la misma sintonía que él, simplemente no perdonaría que Bakugo hiciera lo que quisiera con las personas importándole poco los sentimientos de los demás, conseguiría decirle unas cuantas cosas sin miedo.

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Versión de Deku

Ese era un día importante para su amiga, después de muchas platicas, de tantos consejos y demasiados intentos, Uraraka se declararía a Bakugo ¿Cómo habían conseguido llegar a esa conclusión? Bueno, el peliverde lo había notado luego de escuchar a la chica expresarse de Bakugo, podía notarlo cuando lo miraba, cuando le hablaba, se habían sincerado hace un tiempo, el con ella contándole sus más profundos secretos respecto a su persona y ella ahora que comenzaba a sentirse así por alguien más, fue a él para decírselo antes que a nadie.

El espero paciente porque sabía que ella podía hacerlo sola, pero estaría ahí de apoyo por si lo peor ocurría, la actitud de Iida no le pareció apropiada, o mejor dicho no entendía por qué estaba tan molesto por lo que Uraraka hacía, confesarse era una decisión suya en todo momento y por el lado de Bakugo, sabía que era un mecha corta que explotaba por muchas cosas, sin embargo sabía que no lastimaría a la chica o la menospreciaría por sus sentimientos así que estaba relativamente tranquilo.

-Iida-kun estaba muy molesto- menciono Uraraka viéndolo marchar

-Si pero no entiendo por qué ¿Paso algo de lo que no entere?-

-Muchas cosas- le respondió la chica emocionada- Debo regresar con Bakugo, solo hablaremos por un rato, luego vendré y te contare todo- salió por donde había venido

La forma de actuar de su amiga había dejado claras las cosas, se sentía muy feliz por ella, se sentó en las escaleras a esperar su vuelta. Espero unos treinta minutos sentados, pero se le había pasado mas rápido de lo que pensaba.

-Deku-kun que bueno que sigas aquí-

-Me dijiste que esperara-

-Cierto, cierto- se sentó a su lado- Me dijo que si- se llevó las manos al rostro intentando ocultar su sonrojo

-Wow debo admitir que no lo esperaba- se sincero

-Yo tampoco-

-Una cosa… ¿Por qué Bakugo? Lo pregunto de buena forma-

-¿Nunca te lo dije?- ladeó la cabeza y su amigo negó- Bueno… hay muchas cosas, como- pensó un poco- ¿has visto sus brazos o sus pectorales? Fueron esculpidos por ángeles- simulaba agarra con sus manos- eso es algo que quisieras tocar porque sin tan increíbles-

-Jajaja es un buen motivo- rio a la par de la chica

-Ya hablando enserio, tiene cosas buenas debajo de su carácter rebelde, es alguien en quien puedes confiar sin importar que tan dura se ponga la situación, se toma las cosas enserio aunque parezca que le vale y pasa de todo, siempre está superando para convertirse en un mejor héroe, sabe cuál es su meta y está yendo por ella con todo lo que tiene- mantenía la miraba en la puerta pero no es como si estuviera viendo algo-

-En eso tienes razón-

-Además sabe cocinar y hace muy bien los deberes del hogar, sería una buena esposa- la cara seria de la chica le hizo soltar una carcajada

-que no te escuche decir eso o volaremos en pedazos-

-Deku-kun…todo seguirá normal ¿verdad?-

-Está bien-sostuvo sus manos- aún podemos ser amigos, Kacchan no creo que sea celoso…- lo pensó- …Tal vez-

-¿Qué respuesta es esa?

Entre las risas volvieron a los dormitorios

Versión de Uraraka

Explicar cómo se sentía ese día era algo demasiado complicado, eran nervios, con nauseas, ansias y algo extraño muy parecido a estar feliz, tal vez… muy parecido a la sensación de cuando usaba su quirk pero esto era causado por una persona, más en concreto por lo que había decidido hacer ese día, confesarse ¿pero por qué específicamente ese día? se dio cuenta de sus sentimientos y estuvo dudando por mucho tiempo, no era para nada sencillo animarse a confesarse a alguien con el temperamento de Bakugo pero algo lo cambio, en una tarde vio a una chica de otro grado se le declaro, claro la rechazo sin embargo entendió que podía perderlo, así que era claro que preferiría intentarlo a quedarse con las ganas de decirlo.

Se preparó junto a Midoriya haciendo un plan, más que un plan era decirlo todo y esperar la respuesta, pero claro, mentalizarse era parte importante, prepararse para lo peor una respuesta negativa. Si también tenía un plan para eso, pasar con Izuku toda la tarde comiendo helado mientras veían películas románticas como la relación que nunca podría tener. Un gran plan.

Se levantó intentando ser optimista, se sentía confiada y a la vez los nervios la devoraban viva, arreglo a la perfección su ropa, ese día uso maquillaje, algo natural, añadió brillo labial y un ligero delineador, había pensado en un poco de rubor para sus mejillas, pero su lindas chapitas ya la hacían verse hermosa así que no se lo puso y salió de su cuarto a las clases. No pudo concentrarse en ninguna de sus materias porque sus ojos se desviaban al chico rubio. A la hora del almuerzo dejo su nota en el asiento del chico.

“Te veo detrás del aula después de clases
                                       -Uraraka Ochako”

Y al terminar las clases se apresuró a marcharse junto a Midoriya para que su amigo calmara sus nervios, a esperar unos momentos a que Bakugo llegara.

-¿Lista, Uraraka?- le dijo Midoriya con mirada firme

-¡Sí!- asintió decidida y en segundos su expresión cambio- No- respondió nerviosa

-Está bien recuerda el plan-

-Sí, voy, me confieso y regreso, voy, me confieso y regreso- se decía convencida- ¡voy, me confieso y regreso!- casi grito y salió en dirección al rubio

Caminaba decidida pero conforme se acercaba su ánimo se iba, pero ya no podía retractarse, no se echaría para atrás, hasta que vio a Bakugo sentado en un jardinera.

-Tengo cosas que hacer así que date prisa y termina con esta broma- dijo en su tono habitual

-Esto no es una broma Bakugo-kun- dijo ya estando frente al chico

El solo la miro sin ninguna expresión aparente. Uraraka respiro profundo y se sacó los nervios, lo miro decidida.

-MegustasBakugo- lo dijo tan rápido que ni ella se entendió. Lo miro y el seguía sin ninguna expresión, como si no hubiera dicho nada -¿Bakugo-kun?-

-¿Alguien te mando a hacer esto?- miro a su alrededor- ¿El idiota pelos de mierda o ese estúpido para rayos? ¡Salgan idiotas!-

-…No- comenzaba a dudar si fue buena idea hacerlo- Estoy hablando enserio- pero por más que lo decía parecía no creerle, la garganta se le hizo un nudo y el pecho se le oprimió

-Estoy cansado de estas bromas, la semana pasada con esa chica y ahora contigo, ahora sí o haré volar por los aires- dijo irritado

-¿Tan poca confianza te doy…como para que digas algo así?- su voz estaba frágil, sentía que no la trataba enserio y sin quererlo sus lágrimas brotaron solas

-oy- se acercó- No es por ti- dijo rápidamente notando su error- Esos idiotas tiene la culpa- no supo que hacer, él no era alguien que supiera tratar con personas que lloran

-…es que…parase que no te importo…- se limpiaba las lágrimas

-Aagh creí que estaban jugando conmigo, ellos saben que me gustas y digas esto no me parece real…- dijo lo primero que se le venía a la mente

-¿Qué dijiste?- Uraraka lo miro sorprendida- No es cierto ¿o sí?- dejo de llorar por que el asombro la congelo

Analizo lo que dijo - Yo no miento- respondió mirándola a los ojos

-¿Entonces… yo también… te gusto?- lo vio asentir

Podría saltar de felicidad pero las piernas no le estaban respondiendo, había tan pocas posibilidades de recibir esa respuestas e iba tan decidida a que la rechazaran que ahora no sabía qué hacer.

-¿Ya no dirás nada?-  pregunto él

Negó con la cabeza y su cuerpo reacciono para acortar la poca distancia que los separaba, lo sostuvo firme del cuello de la camisa y se impulsó para llegar a sus labios, juntándolos en un contacto estático que a primera impresión los tomo desprevenidos. El reacciono y el abrazo sosteniéndole la cintura para acercarla más, el calor los envolvía mientras sus cuerpos se congelaban sin mucha reacción por la felicidad. Se separaron poco a poco, su primer y torpe beso no había salido para nada mal y la necesidad de seguir los invadía.

-Bakugo-kun… no…Katsu..ki- dijo nerviosa- ¿Esperarías un momento?-

Se encontraba embobado algo que nunca le había pasado-…Si-

Dijo más por reacción y ella se marchó dentro del edificio.

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Gracias por leer ;3

Una disculpa por tardar tanto en actualizar, tenía otra historia que terminó y queria enfocarme en su final, ya no habrá otro retraso tan largo (espero)

Nos vemos la siguiente semana 😘