Habitación blanca con arcos y gruesos muros. A la derecha y a la izquierda escaleras blancas. Gran arco al fondo y pared del mismo color. El suelo será también de un blanco reluciente. Esta habitación simple tendrá un sentido monumental de iglesia. No habrá ni un gris, ni una sombra, ni siquiera lo preciso para la perspectiva.
(Dos MUCHACHAS vestidas de azul oscuro están devanando una madeja roja).
MUCHACHA 1ª
Madeja, madeja,
¿qué quieres hacer?
MUCHACHA 2ª
Jazmín de vestido,
cristal de papel.
Nacer a las cuatro,
morir a las diez.
Ser hilo de lana,
cadena a tus pies
y nudo que apriete
amargo laurel.
NIÑA (Cantando).
¿Fuisteis a la boda?
MUCHACHA 1ª
No.
NIÑA
¡Tampoco fui yo!
¿Qué pasaría
por los tallos de las viñas?
¿Qué pasaría
por el ramo de la oliva?
¿Qué pasó
que nadie volvió?
¿Fuisteis a la boda?
MUCHACHA 2ª
Hemos dicho que no.
NIÑA (Yéndose).
¡Tampoco fui yo!
MUCHACHA 2ª
Madeja, madeja,
¿qué quieres cantar?
MUCHACHA 1ª
Heridas de cera,
dolor de arrayán.
Dormir la mañana,
de noche velar.
NIÑA (En la puerta).
El hilo tropieza
con el pedernal.
Los montes azules
lo dejan pasar.
Corre, corre, corre,
y al fin llegará
a poner cuchillo
y a quitar el pan.
(Se va).
MUCHACHA 2ª
Madeja, madeja,
¿qué quieres decir?
MUCHACHA 1ª
Amante sin habla.
Novio carmesí.
Por la orilla muda
tendidos los vi.
(Se detiene mirando la madeja).
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Bodas de sangre
PoetryEn esta tragedia en tres actos, el autor vuelca prosa, verso y música para vestir a unos personajes con las ropas del amor, los celos, el odio y la violencia. Una historia pasional que tiene lugar en un innominado pueblo andaluz y que constituye un...