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Para ser mediados de octubre en Beijing hacia un clima demasiado agradable, Sook se levantó cansada a pesar de haber dormido casi 14 horas, sus teorías la atormentaban.
Y ¿A quién no en su lugar? Después de todo la reconforto asegurarse que la Yuqi que creció en Beijing no murió, ahora solo estaba estar segura de que aquella Yuqi que vivía en Corea del Sur fuera su hija.
Pero ahora no podía volver, más bien no quería.
Se aseguraría de encontrar el rastro de aquellos que pudieron tener la oportunidad de darle un verdadero hogar a su hija y no hicieron más que venderla.
Los encontraría.
Los quería muertos.
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Al mismo tiempo, pero una hora adelantados se encontraba Cielo removiéndose en la cama de Yuqi.
La mañana estaba fría y se resentía en la habitación, pero quien más lo resentía era Cielo con sus ganas de ir al baño, había tomado demasiada agua antes de dormir y aparte quería marcar a alguien.
Siguió andando por encima de las sábanas sin ser notado por Yuqi y menos por Yoongi, quien estaba algo destapado.
Cielo se acercó a Yoongi y levantó la patita.
Este por su parte estaba descansando de lo mejor cuando sintió que algo caliente le mojaba la playera, abrió los ojos cansado para encontrarse la imagen de Cielo meandosele encima.
Sus ojos se abrieron a más no poder, se levantó de la cama de golpe, asustando a Cielo, quien despertó a Yuqi.
- AH! ¡Que Puto asco! - exclamó Min a la vez que quitaba la playera y veía con asco está.
Cielo busco refugio con Yuqi ya que había percibido el enojo de Min.
Yuqi por su parte estaba muerta de la risa.
Yoongi la miro mal y le dedicó una mirada de enojo al perro quien se asomaba de entre los brazos de Yuqi.
- Me las pagarás enano – aseguro a la vez que lo señalaba con el dedo índice.
- No lo amenaces Yoongi – le regaño a la vez que acariciaba a Cielo – él te quiere ¿Veda que shi Cielo?
Cielo ladro bajito lo cual hizo que Yuqi asintiera hacia Min.
- Tu no me quieres Pulgoso, no mientas, cuando quieres a alguien no vas y le meas encima – recriminó Yoongi a la vez que se dirigía al baño dispuesto a darse una ducha – ahora por lo que hizo cielo me voy a tener que bañar aquí ... ¿Me puedes traer ropa de mi alcoba?
Yuqi asintió y se empezó a levantar de la cama.
- Un momento ¿No que estaba en reparación o algo así? – cuestionó Yuqi algo curiosa
