Craig.
Su cuero cabelludo siempre ha sido su punto débil. Que alguien le hiciera caricias en esa parte de su cuerpo era un arrullo seguro. Ahora mismo estaba tan concentrado en los dedos de Tweek frotando suavemente su cráneo que ni siquiera intentó luchar contra el sueño que se apoderaba cada vez más de él. Tweek le peinó algunos mechones que caían sobre su frente, quizá debería cortarse el cabello, comenzaba a molestarle.
Bueno, realmente sentía que le molestaba la mayoría de los días, excepto hoy. Justo en ese momento, siendo más específicos. De hecho podría admitir que estaba agradecido con sus mechones largos y estorbosos por permitirle sentir las caricias.
— ¿Por qué haces esto?- preguntó con la voz adormilada.
— ¿El contacto físico?- preguntó Tweek de vuelta.
— Sí.- murmuró. Escuchó a Tweek suspirar. Las caricias se detuvieron cuando Tweek apartó las manos de su cabeza. Craig se maldijo, era la segunda vez que provocaba que se detuviera, ¿por qué simplemente no podía dejarlo ser y ya está?
Suspiró con resignación. Se sentó recto para poder mirar mejor a Tweek, tal vez si le ponía ojos de cachorro las caricias podrían volver, pero el demonio no lo estaba mirando y él no se atrevería a pedirlas en voz alta.
— Para relajarme, creo. Repito: lo siento si te incomodo.- dijo mirando la ventana.
— No lo haces.- respondió.- Sólo... ¿Estás bien?.- se preocupó.
Tweek finalmente lo miró. Craig echó los hombros hacia atrás intentando verse más recto de forma totalmente involuntaria.
— ¿Qué es lo que quieres saber de mi, Craig?- preguntó él, ignorando la pregunta que Craig le había hecho.
— Ahora mismo no podría decirte algo en concreto. Estoy dispuesto a escuchar cualquier cosa que quieras contarme, o lo que necesites desahogar.- le respondió.
Los labios de Tweek se ocultaron dejando una línea fina.
— Ya sé que puedo obtener a cambio.- le dijo. Craig lo miró con curiosidad.- Yo te diré todo lo qe quieras saber, o lo que crea que pueda interesarte y a cambio tú me cuentas sobre ti, y me muestras tu mundo.- Craig pudo notar un ligero destello de emoción en los ojos de Tweek.
— ¿A qué te refieres con mostrarte mi mundo exactamente?- preguntó aún sabiendo que fuera lo que fuera no sería capaz de negarse. Se llevó la mano a la boca mordisqueando su pulgar con intención de relajarse, vio a Tweek resoplando con impaciencia y rodando los ojos. Odiaba cuando hacía eso porque no podía evitar sentirse tan inútil.
— ¡Pues eso! ¿Que otra explicación necesitas? Yo sé que eres tonto, pero jamás imaginé que lo fueras tanto.- reprochó.
Craig lo miró con molestia, y pensar que hace unos minutos estaba por dormirse en el regazo de tremendo imbécil. Escuchó como la música de su hermana disminuyó el volumen aún así seguía lo suficientemente alta como para que ella no los ecuchara hablar; se sintió aliviado. La voz de Tweek desde el exterior le agradaba, sonaba distinta; no podría explicar en qué pero así ocurría. Escucharlo desde el exterior era como escuchar un encantamiento de protección, podía sentir la seguridad de que nada malo le ocurriría siempre y cuando no se apartara mucho de él. Siquiera ¿eso tenía algún sentido? o ¿por qué estaba pensando en esto cuando hace un minuto estaba llamándolo imbécil?
— Necesito que me digas qué es lo que quieres saber exactamente, ¿sabes? Aquí hay un montón de cosas.- Miró sus manos mientras se tronaba los dedos.
— Podrías comenzar mostrandome que es lo que haces normalmente.- dijo Tweek. Craig lo miró con una ceja alzada.- Una vez me preguntaste qué hacía en mi tiempo libre, ¿qué haces tú?- cuestionó.

ESTÁS LEYENDO
Alma Brillante ~Creek~
FanfictionA su edad invocar a un demonio le parecía algo tan interesante, tan irreal. Sentía como hormigas recorriendo su cuerpo lleno de curiosidad, algo en su mente le decía que estaba haciendo algo malo, que se detuviera en ese mismo instante. Pero la adre...