Back Room

| El Cuarto Fantasma |

—... pero que demonios?!—

me sente a mirar mi alrededor, sintiendome mareada por el rápido movimiento, permanecí en la posición el tiempo suficiente para acomodar mi vista

"¿dónde me encuentro? ¿Qué especie de lugar es este?"

pregunte para mis adentros mientras me levantaba con dificultad del suelo; sacudiendome el polvo. Lo único que podía ver era una habitación de tapiz amarillo, y un foco emitiendoo luz del mismo color; irritando mis ojos. pestañeé unas cuantas veces para acostumbrarme a ésta, notando una puerta oscura en el proceso.

Muchas preguntas rondaban en mi cabeza en ese momento, ¿cómo había llegado allí?

 No lo recordaba

"¿Qué se supone que haría?"

un sentimiento de angustia me invadió. Por más que intentara hallarle sentido no lo encontraba, era simplemente imposible intentar decifrar mi razón de estar allí.

Volteé hacia los lados, sacudiendo mi cabeza con algo de dolor, parecía el comienzo de alguna película de terror, de esas que te atrapan de solo pensar en lo que seguira.

La puerta. caminé hacia ella, me creaba desconfianza aunque esta no se veía fuera de lo normal, a excepción por la cantidad de óxido que la cubría, era como si hace años estuviera allí, dejando que ese ambiente la degradara.

Ciertamente el lugar daba la impresión de haber permanecido intacto hasta mi aparición

intenté dejar de sobre pensarlo y titubie antes de tomar el picaporte entre mi mano sintiendo el tacto frío, primero traté de girarlo suavemente; fallando al notar que el óxido había hecho mas forzoso su funcionamiento, insistí nuevamente, esta vez con más fuerza, logrando abrirla con algo de dificultad haciendo chirriar las bisagras de una forma escandalosa.

—carajo—

solté al sentir una helada brisa pasar por mi piel, obligandome a cubrirme con mis manos en un torpe intento por conseguir algo de calor. presté mas atención a lugar mientras frotaba las manos contra mis costados, estaba casi totalmente sumido en la obscuridad. tanta que podrías perderte en unos solos segundos y sentir ser engullido por esta.

di el primer paso esperando lo peor mientras atravesaba la penumbra, era como si esta me arrastrara inevitablemente al interior como algún tipo de sensación envolvente.

avancé lentamente a través del lugar con cautela aún cuando mi vista estuvo casi totalmente nublada por la lobreguez del sitio. Repentinamente oí crujir algo bajo mis pies, haciendome frenar mi lento caminar.

me quedé casi estática, asimilando el peligro. miré hacia atrás, viendo distante una luz amarillenta, proveniente de la puerta de aquella habitación, "aún puedo volver" pensé mirando a lo que se supone era "adelante", de todos modos no sabía a donde me dirigía, no tenía donde ir, era incierto si seguir caminando me llevaría a un lugar mejor...

Aunque si volvía solo era cuestión de tiempo para morir de inanición o simplemente de pena moral, podía sonar mal, pero si seguia, un escenario donde caminaba y lograba en entrar la salida no se veia muy rentables

Suspiré antes de fijar mi vista nuevamente a mis espaldas sintiendo mi alma irse por el hecho de notar la ausencia de aquella luz, sentí  mi estómago contraerse y un sudor frío bajar por mi sien. eso debía ser imposible, ¡hacía solo unos segundos estaba ahí!

tanto aturdimiento me habia hecho caer sentada, cerré mis ojos queriendo imaginar que todo ésto era un sueño, que no estaba en aquel lugar, que nunca había visto una habitación así de peculiar, que tal vez solo era mi cabeza haciéndome una mala pasada, pero al abrir los ojos me encontraba con la cruel oscuridad, sentía la desesperación por no saber qué hacer carcomerme.