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-Es la entrada principal y la otra es la casa de Bill, el jefe de los centauros, tiene una puerta trasera que conduce a la salida de la muralla, pero es mas arriesgado-.

-¿Sabes qué es lo que van a hacer después de la celebración?- preguntó Luzu.

-La mayoría de veces se duermen temprano por la celebración y tengo que quedarme limpiando todo con algunos centauros más- dijo Alexby.

-Está bien, haremos esto: cuándo la ceremonia acabe yo entraré y te ayudaré a empujar la palanca, así los dos saldremos y volveremos al pueblo- dijo Vegetta.

-Está bien, hasta eso actúa como si no pasara nada- dijo Luzu.

-Entendido- dijo Alexby y salió de la cocina con la botella de vino para aquellos seres malignos.

Mientras tanto, Vegetta y Luzu esperaban pacientemente a que las luces y los prominentes ruidos de celebración cesaran para que puedan ayudar a su amigo, sin embargo, esa celebración parecía hacerse eterna por lo cual, el de ojos lilas decidió tomar una siesta:

"-Vegetta, por favor ayúdame- decía Rubius desesperado.

-¿Ru...Rubius?- decía Vegetta sorprendido por la presencia del híbrido.

-Vegetta por favor ayúdame, sácame de aquí-

-RUBIUS- se escuchó una voz grave y prominente en ese ambiente totalmente oscuro y de color negro monótono, Vegetta reconoció esa voz, era la misma que escuchó cuándo el jefe de los centauros habló en la ceremonia.

Vegetta se puso de pie y miró a los ojos del chico, en los que solo se podía apreciar miedo y desesperación, entonces el híbrido cayó de frente fuertemente al suelo, haciendo que el chico de ojos lilas se preocupara.

-Estás bi...- las palabras de Vegetta fueron interrumpidas por Rubius, el cual estaba siendo arrastrado por algo que no se alcanzaba a distinguir gracias a la oscuridad de aquel lugar.

De pronto la oscuridad se convirtió en un enorme barranco al cual el híbrido estaba siendo arrastrado, hasta que terminó sujetado al borde del muro de tierra con una mano, la cual le empezaba a sudar:

-¡Vegetta! Por favor ayúdame, por favor ¡no me dejes caer!- decía Rubius desesperado.

El guerrero de ojos lilas corrió hacia el borde del barranco rápidamente:

-¡Dame la mano!- gritaba Vegetta desesperado -por favor, no me dejes otra vez- decía con lágrimas en los ojos.

-Vegetta, por favor sálvame, salva al pueblo- dijo el híbrido y solo se limitó a caer al vacío, perdiéndose en la oscuridad".

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Que tengan buena noche, gracias por tanto. ♥️✨

-DxMx1P-

⚫︎⚪︎ LIES ⚪︎⚫︎ RUBEGETTA ⚫︎⚬⚫︎ SEGUNDA TEMPORADA Where stories live. Discover now