Capitulo 15: Admitir

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Atravesé el bosque con rapidez donde tantas veces había ido en mi niñez a entrenar.

Al llegar al pequeño parque me escondí detrás de un árbol , junto a el se encontraba piedra grande y más allá unos bancos; sólo unos metros de distancia de ella esperándola a que saliera del bosque me hallaba.

Sentía que el corazón me iba a explotar y que indudablemente escaparía por mi boca. Respiraba como si hubiera corrido una maratón, dándome cuenta a su vez, que temblaba.

Temblaba de rabia y de la peor culpa que había experimentado jamás. No sólo le había dicho un montón de cosas horribles, sino que la lastimé.

¡Dios!

¡Había sido todo un capullo con ella!

¿Qué coño me pasaba?

¿Qué cojones conmigo?

¿Por qué le había dicho todas esa cosas sin ni siquiera sentirlas?

Yo no pensaba que fuese débil ni una inútil, ¡Jamás osaría a pensar eso de ella!

Sin embargo, esas sucias palabra habían escapado de mi boca por puro miedo , desesperación , y demás cosas que ni yo mismo entiendo.

Ni siquiera me había dado cuenta la fuerza que con la que la había agarrado. Ella no merecía que ni yo ni nadie la tratase así. Por qué para mí Hinata era delicada , dulce, buena, tierna, comprensiva, noble, valiente mujer con la que me había encontrado jamás. A pesar de ese aspecto frágil yo la admiraba, admiraba su fortaleza y valentía.

Hinata era una mujer que valía la pena tener en la vida, una que yo no debía dejar escapar jamás.

Entonces

¿Qué había hecho?

Por qué si sigo por esta línea la iba a perder, pero a perder para siempre y eso, ese pensamiento me mortificaba y me asustaba.

-Dios mío… -susurré cerrando los puños con fuerza, así como mis ojos.

-Dios...tú sabes que yo no soy así...- sentía repulsión y rabia contra mí, ¡Joder me sentía despreciable, miserable! odiándome aún más por este repugnante comportamiento.

¡Sí! . Por qué me odiaba. Me odiaba por ser así...por ser así con ella...

¿Pero por que con ella tenía este comportamiento?

Ni con Sakura sentía ni siento lo que Hinata provoca en mí.

Ese deseo de ser su mundo , de controlar sus pasos, de saber con quien esta, a donde va...

Joder...

Agache mi cabeza sintiendo que lo único que me aliviaría en esos momentos mi dolor sería un abrazo.

Un abrazo de ella. De Hinata.

Deseaba que ella saliera me encontrase, se acercará a mí extendiendo sus brazos hacia mi cuerpo para abrazarme con fuerza mientras acariciaba mi cabello y yo aferrarme a ella como un niño indefenso. Pidiéndole perdón de todas las formas posibles que conozco.

Sólo la quería a ella en esos momentos, ya esta,¿Acaso pedía demasiado?.

Sí. Claro que sí.

Pero...siendo consecuente y realista ella no querría ni verme por toda esa patraña que había soltado en un momento de miedo y desesperación.

Yo en su lugar no querría ni verme, sino todo lo contrario me querría a mil kilómetros de distancia.

Entonces...

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