Capitulo 3 : Pesadillas

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Casi todos hemos experimentado un sueño que provoca ansiedad o miedo. Algunas personas sueñan con la misma pesadilla repetidas veces. Otros sufren pesadillas cuyo contenido cambia a pesar de contener el mismo mensaje. Son comunes sueños en los que la persona se cae, es perseguido, atacado, llega tarde para un examen, es incapaz de moverse o gritar, está desnudo en público... Este tipo de sueño suele reflejar la incapacidad del soñador para reconocer y resolver los conflictos en la vida real.

-no te dejaré que le pongas un solo dedo encima a Naruto.-

-refuerzos ¿eh?.-

-¡Qué estas haciendo aquí! ¡Vete por favor no eres contrincante para él.-

-lo sé…-

-…

-…

-…

-…

-¡detente!.-

-…

-…

-El amor trae sacrificios…lo cual trae odio…-

aaaaaaaahhhhhhhhhhhhh!

-¡aahhhh! ¡No!.-grite de nuevo.

Y ahí estaban de nuevo esas pesadillas.

¡maldición!

Atormentado, me llevo mis manos a mi rostro con ellas cubro mis ojos como si aquello aliviara o me protegiera de volver a revivir de nuevo todo aquel episodio, se siente tan real que asusta.

Froto cada parte de mi cara sobándome las cejas mientras rasguño mis mejillas. Me hecho de forma pesada de nuevo en el tullido colchón, envolviéndome de nuevo entre las sabanas.

-esto es horrible…- me digo a mi mismo.

-¿será que me estoy volviendo loco?- de nueva cuenta me veo cuestionándome las mismas preguntas.

-No estoy loco, claro que no; sólo son simples pesadillas….

Me siento de un solo golpe en el borde de la cama y de nuevo paso mis manos pesadamente sobre mi cabello: dejo caer mis brazos a ambos lados de mi cuerpo y enseguida los coloco sobre mis muslos e inclino mi cabeza con la vista fija en suelo y acto seguido de forma instintiva fijo mi mirada al reloj que esta sobre la mesilla de noche…la misma hora de siempre…

Sábado 12 de Abril.

03:45 A.M.

-¡demonios! Otra vez no…- me quite la camiseta blanca empapada de sudor me revolví el cabello con ambas manos mientras dejaba caer mi cuerpo sobre la cama quedando mis piernas semiflexionadaen el borde de esta mientras mis pies tocaban el frío parque.

-¿En que piensas mocoso? .-

No conteste.

-¿Cuánto tiempo llevas así? .- volvió a preguntar.

-¡joder! El que faltaba.- y ahí estaba el mamón del zorro con su mierda de siempre.

-¿Cuánto tiempo llevas así?.- me volvió a preguntar viéndose ignorado.

- no te interesa.-

-¿Cuánto ya? .- volvió a cuestionarme ¿ A caso no se da cuenta que no quiero responder?

-…¿y bien?...-

-ocho meses.- sisee entre dientes.

-¿y a que esperas? Es de madrugada nadie te dirás nada te consideran un héroe.- y ahí empezaba la maldita discusión de todas las noches, bueno madrugada.

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