Hay cinco cosas que vuelven loco a Jungkook.
1. La forma en la que el rostro inocente de Eunbi se torna carmesí cuando el le susurra cosas indebidas al oido.
2. Como Eunbi desciende la mirada cada vez que lo siente cerca.
3. Como Eunbi se resiste cu...
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- ¿Vas a salir, nena?
Jungkook observo de reojo su reloj, exhalando y rodando los ojos al darse cuenta de la hora. Mierda. Eran las tres y cuarenta minutos de la perra tarde. Se coloco sus gafas oscuras, mientras encendia un cigarrillo, aunque se detuvo cuando estuvo a punto de llevarselo a los labios, porque la puerta se habia abierto y ahora su criada se mostraba ante sus ojos.
La recorrio de pies a cabeza, conteniendo una discreta sonrisa. La menor llevaba una camiseta de colores, unos shorts algo gastados y unas sandalias, el tono lechoso de su piel ahora resaltaba mucho mas que antes. Jungkook se mordio el labio, mientras se preguntaba como luciria esa piel con marcas de sus dientes. Notó como Eunbi desviaba la mirada e intentaba mantener sus manos quietas, mientras sonreía totalmente avergonzada.
- Lo siento, Jungkook...
- ¿Por qué? ¿Te vas a echar para atrás? - el tono divertido de su voz volvió a hacerse presente.
- No tengo mas ropa en mi armario, no he traído mucha cuando vine a quedarme.
En realidad, Eunbi volvia a desear que la tierra se la tragase de nuevo. Su ropa era muy vergonzosa comparada con, la casaca de cuero negra, el polo totalmente blanco y jeans rasgados negros de Jungkook. Si, su ropa era muy infantil y estaba desgastada para terminar de hundirla; seguramente Jeon Jungkook no querría caminar ni a la esquina con alguien como ella, porque le iba a avergonzar mucho, ¿Debería solo decirle que no podia ir?Sintio como su corazón se acelero cuando elevo la mirada y se encontro con el rostro de Jungkook, teniendo esa media sonrisa de nuevo, en su rostro.
- Para mi, estas preciosa - la voz de Jungkook sono como un seguro susurro mientras elevaba una ceja sin quitarle la mirada de encima - Siempre.
Jungkook observo como la menor se enrojecia de nuevo y se quedaba tiesa, ¿Acaso no podia reaccionar de otra manera? ¿Era estupida o tonta? ¿Estaba enferma todo el tiempo?
Solto una carcajada y se movio hacia su auto deportivo, abriendo la puerta, mientras le señalaba el asiento a su criada, quien tras sentir varias veces y morderse el labio inferior, se sento de golpe sobre el asiento. Luego de que el tambien ingreso al vehiculo, se inclino repentinamente sobre el asiento de la menor hasta que su rostro quedo demasiado cerca del suyo, logrando casi sentir su respiracion. Notó como Eunbi se sobresaltaba y abria sus ojos como platos, Jungkook no pudo evitar deslizar la lengua sobre sus labios y esbozar su tipica media sonrisa, instalando su mano sobre el lado lateral del asiento.
- El cinturon de seguridad - indicó con entretenimiento, mordiendose el labio inferior.
Eunbi asintio tres veces con la cabeza, colocando una nerviosa sonrisa en su rostro, mientras el otro tomaba el cinturon con su mano izquierda y lo cruzaba sobre su cuerpo.
- Si, muchas gracias y lo siento.
Jungkook elevo ambas cejas y fruncio sus labios en algo parecido a una sonrisa.
