SEDUCIDO POR EL DEMONIO ⚜[국민 - O.S]⚜

⚜"黑標"⚜

16 AÑOS ANTES.

Estaban en la primera semana de Noviembre del 2008, el clima era un poco más frío desde entonces, el sol ya no era tan cálido.
Se escucharon pasos firmes en dirección a su habitación y el pequeño rubio lo que hizo fue cubrirse instantáneamente con el gran cobertor hasta la cabeza, asustado y temblando.
Park Jimin con 12 años de edad, cabellos rubios dorados, ojos de un azul claro y la piel blanca como la leche. La presa perfecta de los seres sobrenaturales...

Jimin sintió que pronto las lágrimas escaparían de sus ojos y se rompería en llanto, tenía mucho miedo desde aquel día. El día en el que un ente maligno lo visitó en su habitación mientras dormía, tenía los ojos rojos como la sangre, una silueta extremadamente delgada, donde los huesos podían verse salir de la carne y tenía grandes manos que rasguñaron su pierna derecha, dejando cicatrices y una mordida en su cuello que con el tiempo, se tornó negra.

La marca negra...

Se decía que los entes malignos eran creados por un Rey demonio y estos tenían elegidos, humanos con habilidades que otros no poseían y estos serían marcados o mordidos. Dejando una marca negra, que significaba "Possession".
La cuál podía hacerte completamente vulnerable ante cualquier ente o demonio existente, e incluso, podía doblegarte a su antojo.

Y Jimin, estaba marcado.

Esa era la razón de su miedo y de su insomnio.

La puerta de su habitación se abrió, ocasionando que ésta rechinase.

—¿Jimin, estás despierto?

Escuchó decir, lo cuál hizo que el nombrado saltara de la cama y corriera a los brazos de su querido hermano.

Era su único protector...

—Tranquilo, ya estoy aquí...

Park Namjoon, un chico que tan sólo a sus 22 años, ya estaba en boca de todo el mundo. Algunos lo consideraron un lunático, pues su trabajo no era del todo normal.
Tal vez tenían razón, por qué la organización que habían formado los Park, no era normal.
La OIED (organización de investigaciones de entes y demonios) no era para nada normal. Y todos los que trabajaban ahí, no siempre salían vivos.

Era considerado el hogar de los entes y de experimentos descabellados. El lugar tenía energías fuertes y presencias que de cierto modo; podían ser bien utilizadas con el avance de las tecnologías.

Un infierno disfrazado de laboratorio...

Namjoon era el director heredero, sus padres habían fallecido al intentar entrar en una dimensión demonia.

Una dimensión al inframundo que Namjoon había logrado abrir ese mismo día.

—No me dejes dormir solo... T-tengo mucho miedo, Nam —habló el rubio escondiéndose entre su grande ropa.

—Hoy no puedo cuidarte —respondió triste—. Pero, llamé a Jin para que te cuide, tengo que regresar al trabajo —acarició su pequeña cabeza—. Te prometo que en cuanto solucione esto, estaré contigo. —sonrió.

"Aunque no sé si volveré", Pensó Namjoon, podía tener el mismo destino que sus padres, pero daría todo de sí, porque no podía dejar a Jimin solo. Aún tenía que protegerlo de todos los espíritus y entes malignos.

Jimin se secó las lágrimas que caían por su lindo rostro y asintió con una sonrisa, Namjoon era un ángel protector y era el único familiar que le quedaba.