JinLing esta resignado a casarse con la virgen de los Lan.
Seria su primer y único matrimonio más aburrido y soso que le toco en esta vida.
La noche brilla y la fiesta esta en su máximo punto, el alcohol hace efecto en todos, las hormonas juveniles...
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JinLing tenía la mente un lío los recuerdos de ayer eran tan exactos y precisos que deseaba sufrir de amnesia y olvidarse de lo sucedido.
Se levantó de la cama, tenía mas dudas que respuestas.
Fue al baño y lo primero que hizo fue mirarse al espejo, en sus hombros había pequeñas marcas de uñas, no es difícil saber de quienes eran, la curiosidad lo hizo voltearse y vio que no solo eran sus hombros su espalda estaba llena de caminos morados y ligeros raspones nada profundos.
Sus ojos se abrieron de golpe y su cara se puso roja.
¨ Acaso no conoce la regla de no tocar?!¨pensó.
Se lavó la cara con agua fría para despejarse, esto era absurdo!
Miró la ducha y no lo dudo, se metió un buen baño de agua fría, debía de pensar en que hacer porque hace un día estaba seguro de no querer involucrarse con ¨La pequeña María¨ en el ámbito ¨intimo¨.
La ducha fue fría, al terminar de lavarse el sudor tiró la cabeza atrás y dejó que todas las gotas golpearan todo su abdomen.
Al abrir los ojos cerró la regadera se colocó una bata y salió del baño, se acercó a la mesa de noche y revisó su celular, levantó una ceja sorprendido, aún era temprano, faltaba un minuto y medio para las seis de la mañana.
No podía llevarlo a su casa así como si nada, eso sería extraño.
¨Qué dijo SiZhui para escaparse?¨ pensó.
No entendía como alguien como él pudo haberse salido de su casa e irse a una fiesta como si nada.
Su celular vibro en sus manos era la alarma de las seis de la mañana, supuestamente a esta hora debería irse a correr.
Su mente y todo su cuerpo dieron un ligero brinco de sorpresa al ver como el joven que dormía profundamente hace unos momentos se levantó de golpe y arrojó las sábanas al piso, el rostro de SiZhui parecía neutral solo que un poco adormilado.
No lo diría de manera publica pero debía de admitir que ¨La pequeña María¨ se veía increíblemente bien.
Y en la habitación el joven Lan no era el único en verse bien, el joven Jin con esa pose altanera de brazos cruzados, mirada sería aparentemente fría y el ceño fruncido solo lo hacía ver atractivo.
Bajo la atenta mirada de JinLing, ¨La pequeña María¨ se estiró mientras estaba completamente descubierto sobre la cama.
- Tu y yo tenemos que hablar.
Solo al hablar consiguió la tención de la inocente mirada gris.
Cómo hacía para verse tan inocente de manera natural?
