Hacía un mes que salíamos los viernes, nuestros encuentros estaban llenos de preguntas sin sentido y risas escandalosas. Para este punto yo ya sabia que había caído por ella, que su risa escandalosa y sus ojos perdidos era todo lo que quería. Siempre supuse que ella me trataba como una distracción, aunque ella no lo supiera, siempre ví los moretones en sus brazos. No sabia que hacer, era prácticamente un adolescente. Jamás me voy a perdonar no haberla ayudado, pero tenía miedo al rechazo y no era una persona que peleara por las cosas. Lo más cerca que estuve de hablar de sus problemas fue ese dia. Viernes, como siempre, llovía levemente y me pidió que vaya a su casa. No era de usar su celular, supongo que era difícil para ella, asique cuando me hablaba por ahí sabía que algo había pasado.
Bajó sola, siempre bajaba con Dylan. Algo habia pasado, tenia una leve cojera en la pierna, estaba con un jean azul liso y una sudadera roja.
-Hola, ¿Estás bien?-
-Hola, Tad- fue y siempre será la única que me dice así- ¿Podemos ir al cine?-
Luego de tantos meses me dí cuenta que evadir preguntas para contestarlas más tarde era su especialidad.
- Claro, como quieras - pensé en porque una ciega querría ir al cine y pareció leer mi mente.
- Nunca fuí al cine. Es decir, no que recuerde. Puedo... Escuchar lo que dicen, de todas formas -
-Claro, está bien ¿Qué quieres ver?-
- No lo se, que no sea de acción. Nunca las entiendo-
Luego de salir del cine, mientras yo le estaba dando mi opinión respondió mi pregunta
-...ella lo debería haber llamado, o sea. Porque estuvo dos horas lamentan...-
-No se si estoy bien. Dylan murió, pero no estoy triste-
-Oh, lo siento-
- No lo sientas, el no lo hizo. Estaba durmiendo. ¿Le tienes miedo a la muerte? -
-No lo se, nunca me lo plantee. Cuando era niño tenía miedo de que mis padres murieran, pero creo que eso es normal. Dudo que haya vida después de la muerte, es solo... Nada y no le tengo miedo a la nada-
- Tienes razón, yo vivo en la nada. Dylan está mejor y no sirve de nada lamentarse. Tal vez tendríamos que tenerle miedo a la vida, no a la muerte-
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No me di cuenta.
Romance- Mi madre me decía que las estrellas eran como la risa de quien amas. Como un poco de esperanza entre el dolor, eso sentí cuando ella reía cuando se estaba yendo. Pero no creo sentir lo mismo contigo. - - ¿Por qué? - - No eres un poco de esperanz...
