Shines in the night for you

IV

Me levanté siendo arropada por unos brazos fuertes, bueno hoy era mi día libre, así que iba a dormir un poco más.

— Buenos días

me dijo Jack, entonces me empezó a dolerme la cabeza y recordar todo, ay no, yo con resaca y el todo fresco.

— ¿Que tomamos ayer?

le dije confundida, yo no toleraba bien el alcohol, mi cuerpo no estaba acostumbrado a ingerirlo, pero nunca era tan fuerte, en definitiva estaba de un humor de perros.

— Tomamos Vodka, Clark

me dijo sonriente, maldito desgraciado, sabía que yo me emborrachaba rápido con el Vodka, okey dos podrían jugar al juego de aprovecharse, total estábamos desnudos, confianza sobraba.

— ¿Que hicimos ayer?

le dije con expresión inocente y acercándome más a él.

— Me puedes decir o hacer recordar.

le dije batiendo mis pestañas, en un microsegundo, me puso encima suyo, con sus manos en mis caderas.

— No juegues con fuego que te puedes quemar

me dijo con tono de advertencia.

— ¿Ves que tengo miedo?.

le dije apretando nuestros cuerpos a juntarse más, sintiendo a su amiguito despertar, ese es la señal que necesitaba.

— Creo que se me refresco la memoria.

dije parandome para ir al baño y dándole una buena vista desde la cama.

— ¡Maldición, Clarkson!

me dijo frustrado, yo solo continué mi camino sin voltear, ten un poco de tu propia medicina, aparte el sabia que era vengativa, no sé qué esperaba. Entre al baño, hice mis necesidades y antes de meterme a la ducha le dije.

— Te espero solo cinco minutos, si no, no entras.

en menos de un minuto los dos estábamos bajo la lluvia artificial.

Después de cambiarme, el con traje y yo con ropa de verano de él, me dirigí a las escaleras para bajar a desayunar, encontrándome a Benjamín, a punto de bajar las escaleras solo, este niño es muy independiente, pero hay un límite para un niño de tres años.

— Ey, pequeñín, no te adelantes.

le dije alzando en brazos su cuerpecito, mientras él se reía; bajamos las escaleras, al llegar a la cocina lo deje en el suelo, empecé a hacer panqueques, estaba mezclando la masa, cuando sentí unos brazos rodear mi cintura.

— Gracias por bajar a Benjamín.

me dijo Jack, dándome un beso en la frente.

— Si no lo hacia yo, el lo hacía solito, es muy curioso e independiente.

le dije con una sonrisa.

— Si, eso a veces causa problemas.

me dijo viendo al peque venir con un carrito en las manos, agarró la mano de su padre y lo empeso a jalar.

—Oye, no se hace eso, tienes que pedir por favor y hablar para saber que quieres y si es posible.

le dijo agachándose a la altura del pequeñín, y tratando de explicarle el porqué del regaño.

— Okey.

dijo alargando la e, este niño hasta caprichoso, es tierno.

— ¿Puedes venir a ver Barni conmigo, por favor?

Benjamín dijo poniendo ojitos de yo no rompo ni un plato.

— Pero vamos a dejar a Diane sola y si la dejamos sola no va a querer volver.

le respondió al niño, Benjamín hizo un puchero, lloro a moco tendido y entre balbuceos empezó a decir:

— ¿Me va, me va a dejar, como Mami?

dijo entre tristes sollozos, yo no sabia que decir, le diría que me quedaría, pero si le dijese eso ¿Jack se lo tomaría mal? nos habíamos acostado pero ¿podria tomarlo como algo de ua sola noche? no estabamos en una relación, ¿o sí? pero algo era seguro, Jack la rego.

— Claro que no bebe, te vendré a ver unas 5 veces.

le dije intentando calmarlo.

— ¿Cinco es mucho?

le dijo el peque a su Padre, él negó con la cabeza, el maldito se aprovechaba, lo fulmine con la mirada, Benjamin me miró y negó.

— ¿Que tal unas diez veces?

le dije, Benjamín volvió a mirar a su padre y él volvió a negar, haciendo que Benjamin me dijiera un rotundo 'no'.

— ¿Quince?

le dije un poco cansada, él miró a su padre y el maldito por fin asintió, en definitiva me vengaria de esto. Benjamín me miró con sus ojitos rojos por lo que yo no resistí el impulso de cargarlo y apapacharlo.