Había pasado un mes desde la primera vez que Minho había caminado dentro del café, para Chan se sentía como una eternidad, pero no iba a decir que todo era malo.
Minho pasaba a visitarlo cada vez que podía, a Chan al principio le parecía algo extraño, pero con el tiempo se dio cuenta de que el castaño era realmente agradable, hablaban de muchas cosas, y habían pasado de ser desconocidos a algo así como amigos, se había dado cuenta de que más que tierno, Minho era muy dulce, también muy inteligente, a veces él trabajaba mientras Minho se sentaba a hacer sus trabajos, de hecho, hace poco se dieron cuenta de que estudian en la misma universidad, pero debido a la lejanía de sus facultades nunca se habían topado.
Como en ese momento, Minho acababa de llegar al lugar, no traía ropa deportiva, pero si la mochila en donde suele cargar esta, lo que significa que el chico viene de la universidad y más tarde tendrá ensayo de baile. Eran esa clase de detalles los que Chan había descubierto en ese mes con la compañía de Minho, Jisung le decía que estaba loco, loco por el castaño, Chan le daba un golpe y le decía que sólo se comportaba como un amigo, pero a veces se preguntaba si era eso en realidad, o la emoción abrasadora que sentía cada día esperando al castaño reflejaba algo más.
- Chan - saludó Minho sentándose frente a él y sonriéndole brillantemente - hoy quiero un Iced shaken lemon tea.
Chan suspiró, por lo menos ya le había servido esa bebida al castaño varias veces, por lo que no se le dificultaría tanto, a veces le daba la impresión de que Minho buscaba las bebidas más difíciles sólo para ponerlo en aprietos, pero su dulce Minho no haría eso ¿acababa de decir "su"? El punto es que pasaba horas extraordinarias con Minho, pero cuando el castaño abría la boca para hacer algún pedido, la magia se esfumaba y Chan se estresaba, algunas veces tenía suerte y eran pedidos fáciles, pero la mayoría del tiempo lo que pedía el chico era más complicado que los experimentos que debía hacer Chan en clase, sin exagerar.
-Aquí tienes- dejó el pedido frente al chico que le agradeció, el local estaba casi vacío pues era casi medio día y las personas iban más en las tardes, por lo que se permitió hablar un poco con el chico, hasta que se dio cuenta de algo inusual- ¿no vas a pedir nada de comer?
-Oh, no, acabo de almorzar- respondió simplemente el chico encogiéndose de hombros.
-Pero tú nunca almuerzas tan temprano ¿tienes prisa por algo? - al terminar la frase los ojos de Minho se abrieron mucho, y para sorpresa de Chan, el castaño se dio una palmada muy fuerte, hasta Jisung que estaba tomando el pedido del único cliente en el café los volteo a mirar.
- ¡Eso era lo que olvidaba! Tengo que estar toda la tarde en la academia ultimando detalles. Verás, no tienes que hacerlo, pero es decir, quiero que lo hagas, pero si no puedes está bien- balbuceaba nerviosamente Minho, Chan pocas veces lo había visto nervioso, por lo que tomó una de las manos de Minho entre las suyas y le dio un ligero apretón que pretendía ser reconfortante pero terminó haciéndolos sentir más nerviosos a ambos, le indicó que siguiera hablando, sintiendo sus mejillas sonrojarse pero sin soltar la mano de Minho- Esta noche tendremos un busking, una presentación frente a la academia, no es algo serio ni nada, pero yo voy a bailar y me preguntaba si quisieras pasarte por ahí, es tipo ocho de la noche.
El corazón de Chan empezó a latir muy rápido, nunca había visto bailar a Minho, pero por lo que decía Jeongin, el castaño era muy bueno, y que el chico lo invitara a verlo, su corazón no podía resistir tanta emoción.
-Claro que sí, me encantaría, a esa hora cerramos, pero lo haré antes así no me pierdo nada- Minho sonrió brillantemente y Chan inconscientemente entrelazo sus manos sobre la mesa, vería a Minho haciendo lo que más ama en el mundo, sería un momento espectacular.