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Al llegar al lugar donde quería ir aparcó, después de diez minutos buscando parking, y se bajó para ir a la tumba de su padre.

Se sentó al lado de él dejando el ramo de flores encima, le salió una lágrima que rápidamente seco.

-Feliz cumpleaños -Le felicitó su hija tratando de sonriendo- Habría venido más pronto pero he estado con Addi, ya sabes, la que te dije que era mi esposa de mentiras. Y perdón por esta mierda de regalo pero es que no veo otra cosa para traerte, total, lamentablemente no lo podrás disfrutar -Una mirada triste se formó en su rostro- Te extraño, extraño a ese señor que me celaba con mis amigos, ¡aunque tuviera 3 años! -Exclamo algo divertida- Aunque todo hay que decirlo, estaba hecha una conquistadora, tenía novios por toda la guardería y escuela -Rió ante lo ridícula que sonaba- ¡Mira papi! -Dijo señalando su pelo como si de una niña pequeña se tratara- Me he teñido a rubia, dicen que las rubias son malas pero no han dicho nada de las teñidas así que no soy mala, soy un pan de Dios -Dijo burlándose un poco de aquella frase- Aunque no por ser rubia eres mala, he tenido y tengo amigas rubias que no son malas, aunque no faltan las rubias que se creen lo mejor y siempre te pretenden humillar -Rodó los ojos recordando películas o series que pasaba eso- En fin, que me he teñido, ¿te gusta como me queda? A Addi le gusta -Sonrió posando un poco- Si, a ti también. ¿Mama ha venido? Bueno, supongo que no, te lo vuelvo a repetir, ese marido que tiene ahora me cae MUY mal -Dijo fingiendo una arcada- Papi, ¿te acuerdas de Jaden? Bueno pues él hace un tiempo me empezó a gustar, ¡pero ahora se ha besado con su ex novia! ¡¿Te lo puedes creer?! Eso es increíble, yo pensaba que teníamos una conexión o algo, bueno ahí debo admitir que me he flipado un poquito demasiado, pero pensaba que él si sentía algo por mi, ¿sabes? -Dijo haciendo una mueca de indignación- A veces me pongo a pensar en porque a ti, porque debieron de matarte, te alejaron de mi sin algún sentido, sin explicaciones ni despedidas, una pistola nerf decías... -Dijo sonriendo mientras millones de lágrimas recorrían sus mejillas- ¡Y SOY TAN TONTA QUE ENTRE A CASA CREYENDO QUE ERA UNA NERF! -Gritó esta vez golpeando al suelo- Dios, me odio, me odio por eso, fue mi puta culpa que tú ahora estés bajo tierra, si no fuera una niña obediente me habría quedado allí, contigo, quizás de esa manera no habrías muerto, estoy tan segura de que no hubieras muerto si yo hubiera estado allí. Mamá se pregunta porque cambie tanto, en la forma de obedecer y tal, por ser muy obediente puedes perder familiares, lo que me paso a mi (ojo a esto, no estoy incitando a nadie a que no sea obediente, que os conozco eh) Ahora odio las armas nerf -Intento bromear con una sonrisa, pero las lágrimas que le seguían cayendo la delataban de que no era una broma del todo- Te amo papi, te amo, te amare, y así hasta mis últimos días, hasta que por fin me pueda reunir contigo en el más allá -Señalo al cielo con cierta nostalgia- Trata bien a Luigi, estoy más que segura de que esta contigo y aunque no te haya conocido te ama, sabe lo mucho que he sufrido por tu muerte, ha estado conmigo todas y cada una de las noches que me levantaba llorando por pesadillas de cuando el disparo te... -No pudo seguir ya que rompió en llanto- No puedo, no puedo hablar, no puedo seguir con esto, te extraño demasiado y no creo poder seguir aquí sin tener ganas de suicidarme aquí mismo con lo que encuentre -Dijo levantándose para secarse las lágrimas con la camisa, pero rápidamente se le volvió a mojar la cara de lágrimas- Tengo dos grandes heridas que jamás se van a curar, la tuya y la de Luigi. Te quiero papi -Se volvió a agachar un poco para darle un tierno beso a la tumba- Adiós

Lilly dio media vuelta para irse mientras apretaba sus puños y ojos, con rabia, impotencia, pero sobretodo, tristeza.

Volvió al coche para ir a su lugar secreto, el cual ahora conocía Chase, pero confiaba tanto en él que sabía que no se lo iba a contar a nadie.

Entro y se sentó delante de la tumba de Luigi, dejó encima de él un anillo demasiado bonito, era algo que ella quería hacer desde hace tiempo.

-Hola mi rey -Saludó ella sonriendo mientras acariciaba su tumba- A veces odio que cumpláis el mismo día, pero aún así, ¡feliz cumpleaños rey! -Dijo sonriendo un poco, pero las lágrimas no habían dejado de caer en ningún momento- Hoy a sido un día movidito, y mira -Volvió a señalar su pelo con una sonrisa- Me he teñido, admítelo, me queda estupendamente -Poso con una sonrisa- Hoy al llegar a la Sway me recibió Buddy, por un momento me recordó a ti, cuando me recibías lamiéndome toda la cara y arañándome las piernas -Mas lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas- Estoy, segura de que Buddy te habría caído bien, aunque a veces no me gusta estar con él por el simple hecho de que me recuerda a ti, no por parecerse ni nada por el estilo, no os parecéis en absolutamente nada aparte de recibirme, en eso un poco. Pero ha llegado un punto de que cualquier perro que vea por ahí me recuerda a ti, tus paseos conmigo, tus ladridos cuando alguien tocaba a la puerta, cuando a veces me despertabas porque me había caído de la cama, eso se que te encantaba porque cuando no despertaba cogías una manta para ponérmela encima y dormir conmigo -Sonrió para llorar más, si es que eso era posible- Esto es muy duro, perderte lo es, siempre he pensado en el hecho de que no estuvieras conmigo, de que me abandonaras, pero jamas me imaginé de que fuera tan duro. Esto no es una simple muerte, no es la muerte de cualquiera, es la muerte de un perro increíble que debía ser eterno o que debería haber estado conmigo toda mi vida. Suena un poco egoísta, lo sé, pero preferiría haber muerto yo a verte morir a ti. Ahora no es solo imaginarme una vida sin ti, sin tu amor, ahora es una puta realidad, una que desearía que fuera un sueño, y si lo es, ¡quiero despertar de una puta vez, quiero ser feliz, quiero viajar por el mundo! Pero todo eso lo quiero hacer contigo, quiero una vida entera contigo, solos tú y yo contra el mundo, envejecer juntitos, yo quería casarme contigo y no pude, no pude hacerlo. Mi plan era hacer una cena romántica, con rosas y todo eso de románticos, pedirte matrimonio de la manera más especial posible y aunque nadie asistiera a nuestra boda sería la mejor del mundo. Ya sabes, era uno de mis mayores sueños, y odio que mis sueños no se cumplan, y menos si tú formabas parte de ellos -Se intento secar las lágrimas sin logro alguno- Te voy a repetir las veces que haga falta que te necesito, te necesito ahora mismo, necesito un abrazo tuyo en mis momentos tristes, por ejemplo ahora -Ella abrió los brazos esperando un abrazo, aunque no había nadie, un pequeño airecito golpeó contra en cuerpo y cara de Lilly. Luigi le había intentado dar un abrazo. Ella soltó una pequeña risita de nervios para volver a llorar sin control alguno- Necesitaba eso, pero también te necesito aquí conmigo -Dijo mientras se le quebraba la voz- ¡VUELVE POR FAVOR! Vuelve... -Gritó para abrazar la lápida como si se tratara de Luigi- Quiero un puto deseo, quiero algo esa cosa que la acaricias y salía alguien para concederte tres deseos -A estas alturas de tristeza ya no recordaba ni como se llamaba- Te quiero a ti, quiero volver a tenerte en mi vida como antes, como cuando realmente era feliz... -Levantó un poco la cabeza mirando al frente, ahí mismo se encontraba Luigi mirándole, era un poco transparente, pero ella no dudó en levantarse e irle a abrazar, mala idea, pues casi se come el suelo- También odio a mi mente -Dijo levantándose del suelo con la mirada triste- Supongo que ahora estás conmigo, aunque sea dentro de mi cabeza siempre sentiré que estás conmigo, espero que nunca te vayas de mi lado -Dijo sonriéndole a Luigi, de una muy nostálgica manera-

Lilly se sentó en medio de la tumba de Luigi y Luigi, suena demasiado raro pero básicamente era lo que ella estaba viendo en estos momentos.

Se quedaron un rato mirando a la nada mientras Lilly pensaba mil cosas hasta que decidió volver a casa, ya era demasiado tarde.

Luigi subió con ella, raramente no traspasó el coche, y se fueron rumbo a la Sway House donde al entrar Lilly se pegó una ducha rápida para ponerse el pijama y intentar dormirse mientras veía a Luigi.

Esto no podía estar pasando.

Pensó ella mientras miraba a Luigi sin conciliar el sueño.

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Hola cocodrilas

Estas sad? Yo estoy sad

Llore haciendo escribiendo esto, son las 2:02am no muy tarde pero como es por la madrugada pues estoy sensible, un poco más de lo que ya estoy por el día.

Tres capítulos en un día, wow, nuevo récord para Samantha ;)

Bueno me callo ya y me voy, arios <3

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⏰ Última actualización: Jul 23, 2020 ⏰

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𝙼𝚢 𝙻𝚊𝚍𝚢 - 𝙹𝚊𝚍𝚎𝚗 𝙷𝚘𝚜𝚜𝚕𝚎𝚛 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora