~UNA "LINDA" KAKAROTO~ESTA NO ES LA ORIGINAL

Parte 4

Tenia un chichón en la cabeza que le generaba molestia, creanme que cuando tu esposa se enoja lo mejor es discutir en un lugar alejado de la cocina para que esta no te golpee con un amasador de carne al estar enfadada.

Frotaba su cabeza tratando de calmar esa molestia pero otras cosas ahora le dolia aparte de su cabeza, estaba recostado en su cama mirando el techo de su habitación, aun recordaba todo lo sucedido en esa tarde

-Yo solo fui para hablar y luego....

Se sonrojo cerrando los ojos, sostuvo la almohada en la cual estaba apoyada y se cubrio el rostro con ella como una adolescente a la cual le dieron una noticia muy embarazosa y ahora tratase de asfixiar sus vergüenzas si fuese posible.

A pesar de haberse bañado y limpiado lo mejor posible de sus actos con el mayor al llegar a su casa, claro, otra vez después de haberlo ya hecho en la casa de Vegeta, aun sentía el aroma a almizcle de este sobre su piel y las marcas en su cuerpo, aun seguia algo confundido de como habia logrado esquivar a su esposa hasta llegar allí con una marca de mordida claramente hecha a propósito en su cuello, un último recuerdito de Vegeta para verse mañana en la noche, no le gustaba esa marca pero en ese momento no le puso mucha atención, se perdería antes de mañana al no ser tan profunda y por su metabolismo tan rápido de curarse.

-Maldito, tenia que marcarme como a un animal? -quito la almohada de su cara y paso sus dedos por esa mordida claramente enojado, bueno, o eso trataba de parecer ya que sus labios formaban un puchero, pero lentamente quito su gesto por uno mas relajado- Fue un animal.... Aaaa No¡¡

Y otra vez sus orejas se tiñeron de rojo ante ese pensamiento para nada inocente, pero ahora sólo una cosa cruzaba su mente una y otra vez.

Que pasa si no va mañana?, el no queria, no otra vez pero....la verdad si se era sincero, le habia gustado lo que habia pasado esa tarde y eso lo ponia confundido y nervioso, solto un bufido frunciendo el ceño, estaba casi seguro de que si el no iba el otro lo obligaria como en esa tarde con lo de los vestidos o tal vez vendría por él, aunque esa idea probablemente sea lo último que aquel peliflama llegase a pensar, rodo sobre su cama pero sin darse cuenta cayo al suelo de su habitación, no le importo y se quedo allí un momento pensándolo mejor. El sabia que estaba mal lo que habian hecho esa tarde, técnicamente era infidelidad por ambos hacia sus esposas y eso lo hacia sentir culpable y molesto ya que al parecer el otro no se lo habia puesto a pensar mucho en sus actos

-Esta bien, ire mañana pero esta vez hablare con él -se sento en el suelo sonriente y decidido

Esta vez no se dejaria chantajear y le diría lo que quería decirle esa tarde mañana al peliflama, eso y que necesitaba decirle al mayor que lo de esa tarde nunca habia ocurrido para ambos, eso era lo mejor, no comprendia mucho el término infidelidad pero sabia que al solo pronunciar esa palabra frente a su esposa esta se enojaba, y no queria recibir mas objetos lanzados hacia él de parte de esta.

.....

-NO VOY A USAR ESO VEGETA¡¡

-Deja de gritar, estoy frente a ti idiota¡¡

Su charla amehua de esa tarde no habia resultado tan bien como él pelipalmera lo habia querido.

El tema era charlar lo de ayer y ambos llegar a una conclusión, pero no esto.

Desde que habia llegado a Corporación Cápsula, la insistente mirada del peliflama no lo dejaba en paz, lo cual se le hizo raro ya que era él generalmente era el que lo veía, por suerte para el menor, habia sido casi un milagro que la familia del peliflama no se encontrase, claro, un hijo adolescente en cita con alguien, su hija de compras con sus amigas, su esposa en otra convención de ingeniería con su padre, quien estaría allí presente para ver la ecena casi cómica de ambos Saiyajins