Taehyung V Del odio al amor

23 El pasado de Danielle

Cuando llegó el día de la cita Taehyung pasó por Danielle a su casa, fueron al cine, tal como habían quedado, vieron una película cómica, ambos reían todo el tiempo. Después de que terminara la función salieron del lugar bromeando, Taehyung llevaba a la chica tomada de la mano, al salir al estacionamiento descubrieron que estaba lloviendo.

- Acércate a mí para que no te mojes - dijo Taehyung quitándose la chamarra y cubriéndose con ella, Danielle se acercó un poco – acércate más, abrázame no tengas miedo

Danielle lo abrazo y le sonrió, Taehyung se sonrojo y le dio un beso en la frente mientras cubría a ambos con la chamarra. Caminaron abrazados hasta el automóvil, llegaron un poco mojados. Taehyung dejo atrás la chamarra y esperaron a que bajara la lluvia. Platicaban sobre cosas divertidas y de repente Taehyung pensó en invitarla a la fiesta de Jimin, no estaba seguro de que fuera lo mejor, pero se animó.

-Gracias por venir conmigo hoy ¿tienes planes para el siguiente fin?- le preguntó a la chica

-Aún no, ¿por qué?

-Será cumpleaños de Jimin, es un amigo mío y ex alumno.

-creo que si lo recuerdo

-Estoy invitado y quería saber si ¿te gustaría acompañarme?

-Una fiesta ¿Durara mucho?

-Lo mas probable es que si

-Taeh- hizo una pausa y lo miro con seriedad- antes de contestarte, creo que llego el momento de que te cuente algo

-Te escucho

-Hace 5 años mi familia y yo veníamos por carretera desde Florida, fue un viaje por carretera muy largo. Estábamos cerca de llegar a San Diego a las 3 de la mañana aproximadamente. Unos tipos venían en otro coche enfiestados y drogados, chocaron con nuestro auto y – se aclaró la garganta para que no se quebrara su voz - fue fatal, el auto se estampó en el lado donde venia mi hermano menor, y perdió la vida al instante, sus huesos me hirieron la pierna del lado derecho. Quedamos prensados, y es una pérdida que nadie de la familia logra superar- sus ojos se tornaron rojos

-Lo lamento mucho - jamás hizo notar que ya sabía su secreto

-La policía llegó pronto, también la ambulancia, pero mi hermano ya no tenía signos vitales y yo estaba inconsciente. – Taehyung le acaricio la mejilla - no me pude despedir de él, mi hermano mayor Tom, se sintió culpable por qué decidió no irse de ese lado del auto porque decía que le calaba el sol. Mis padres tuvieron que ir a terapias, pero, el dolor nadie lo puede quitar. – Taehyung le dio un abrazo

-Me imagino que debió ser muy duro para todos, y más para ellos

-Si, demasiado – se separaron, pero se tomaron de las manos- Desde ese día no hay permisos para salir tan noche de casa, créeme que como afectada no me voy a oponer a esa regla, estoy a favor, hay demasiada gente borracha a esas horas

-Entiendo, no voy a insistir si no quieres ir. Y si quieres ir y tengo que regresarte temprano a casa, lo haré

-Gracias por entenderlo. Esto solo lo sabe Susan, no es algo que me guste contar, es algo que marco mucho mi vida, decidí sacrificar el baile, al inicio por recuperarme de la rodilla, después porque me afectaba mucho recordar a mi hermanito sentado en el publico viéndome. Se que jamás volverá a estar entre la gente para verme y aplaudirme

-Gracias por abrirte conmigo, me has dejado en claro algunas dudas que tenía. Se nota que aun te duele demasiado.

-Si, él era el más pequeño, no entiendo por qué tenía que morir así, ni siquiera pudo vivir cosas maravillosas que el resto de nosotros sí. – se limpió una lagrima que caía y Taehyung le ofreció un pañuelo - Lo mejor sería esperar a que te pueda responder, pediré permiso y te confirmare después que sucederá

-¿Por eso dicen que fuiste a la fiesta de Jungkook con tu hermano?

-Si, Tom era el que me cuidaba, pero ya está casado, esta sería la primera vez en salir de casa sin él

-¿Y tu otro hermano? ¿El que te llevo al acuario?

-¿Edward? – bufo – él jamás se desvelaría por una fiesta, mucho menos para cuidarme sabiendo que voy con un chico – Taehyung se sonrojo

-No hay problema entonces, esperare tu respuesta- y le dio un beso en la mejilla – gracias por confiar en mi – ella le sonrió - ya está bajando la lluvia, vamos a casa