(In)tranquilidad

Historias de la soledad

Vacío

Vacío me siento,
Vacío vuelvo,
Vacío me voy,

Vacío intento,
Vacío miento,
Al decir que me siento diferente el día de hoy.

Vacío vivo,
Vacío muero,
Vacío pienso,

Vacío sigo,
Vacío nuestro,
Vacío desde el comienzo,

Vacío seré,
Vacío no siempre fui,
Vacío soñé,
Que algún día volvería a ser feliz.

Vacío pensé que te tenía,
Vacío miré el fin,
Vacío recordé aquella sonrisa,
Vacío me olvidé de mí,

Vacío todo se convierte en melancolía...

Dolor

Mejor amigo,
Compañero fiel,
No medimos las riendas del peligro,
Ni tus besos sabor miel.

El dolor, la soledad y yo,
La tristeza, la angustia y la falta de inspiración,
Un gran vacío por dentro.
La felicidad termina siendo subjetiva.

El futuro se define como algo incierto,
La felicidad en la vida...
Solo un momento,

Dejándonos llevar por los sentimientos,
Yo encontrándote y perdiéndote,
Sin saber seguir el guion, ni el argumento,
Los días, las noches pasan rápido y lento,
Un segundo de tristeza, como costumbre, se vuelve eterno.

Pensándote entre lamentos,
Mirándote sin descontentos,
Llamándote con arrepentimiento,
Porque en algún momento gris, fuiste en blanco mi mejor (feliz) momento.

Teniendo al arcoíris como la tristeza del día,
Al cuarto menguante como la felicidad de la noche,
Si ya está predilecto que la tristeza reine en mi vida,
Aunque sea, déjame bajar a descansar del agobiante coche.

Bendito dolor, ¡me enseñaste tanto!
Maldita felicidad, me distrajiste e hiciste débil,
Amiga soledad, me encontraste y tapaste con tu manto,
Oscura sonrisa, tan falsa que me hiciste extrañar al llanto,
Hermosa tristeza, tras tu abandono, de ti me dejaste febril,

Tu significas dolor, para mi cabeza,
Dentro de mí, significas pasión,
Tú significas princesa sin realeza,
Tú significas lo exacto de mi corazón.

Cuarentena

Pasan los días devastados,
Yo cada vez más roto por dentro,
Pasó los días encerrado,
Sabiendo que el futuro se vuelve cada vez más incierto, con el paso del tiempo.

La vida encontrando siempre nuevas maneras de hacerme daño,
¿Encerrado en casa con mi familia
O solo encerrado con extraños?
Queriendo llamarlo melancolía
Pero ¿hasta que grado?

Si mi "yo" del pasado,
Se viera al espejo,
Resultaría decepcionado,
Sin reconocer su reflejo,

Ni yo mismo me reconozco
Y yo no sé que esperar de mí,
Si siempre cambio cuando la soledad me embiste,

Solo veo lágrimas en mi rostro,
Ahora pienso que no existe el concepto de ser feliz,
Solo, el estar un poco menos triste.

Cuarentena o cuarenta días sin ella,
Pensando como te fuiste,
Que solo me acompaña aquella estrella,
Ayudándome a recordar los versos que un día me escribiste.

Sentir el que será

Sentir que los amores caen,
Pero no terminan de caer por este vacío inmenso,
Sentir a las mañanas traen
Un sinfín de pretextos de un nuevo comienzo.

Será que ahora duermo poco
Porque ya no creo que los sueños

Y las pesadillas las vivo a diario,
Sin saber soñar despierto,

Será que el no sé,
Se convirtió en un no puedo
Y ahora al fallo se le llama progreso,

Será que ya no puedo ver un lado bueno,
Será que no puedo ni verme en el espejo,

Será que tan solo me siento solo,
Por no saber cómo me siento.

Cambio

Loco, tonto, nefasto...
No sabes ni quién eres
Y quieres salir extraordinario.

Aburrido de lo monótono,
Que cada día hace más daño,
Un cambio de nosotros dos
A un viejo y pobre ermitaño.

Sin profundidad
Y sin abuso,
Todo es plano literal,
Todo, menos el mundo.

Como lanzar el corcho de un champán,
Como una flor que en el aire busco,
¿Cuando dejo de importar el opinar?
Cuando los colores se volvieron "bruscos".

Eres como un niño,
En el fondo de un cuarto e infame,
Que sube al cuarto a llorar.

Eres el plato roto, con el quiño,
Por el cual no lavé,
Pensé que no se iba a ensuciar más.

El Niño volvió a llorar,
Esta vez hasta el anochecer,
Todo por un plato que no se podía cambiar.

Pero ¿en qué momento cambié?