De compras

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La cuarentena, sin duda, fue horrible para muchos desde el inicio. 40 días en casa, sin poder salir, es un reto que no cualquiera lo cumple.

Catarina es una persona que se preocupa antes por sus amigos que por ella misma. Una persona muy amable, dirían muchos.

Aunque todos digan que Catarina es la bebé del grupo, es la única que puede controlar a un grupo de adolescentes en un supermercado.

—¡Keith, no seas idiota y agarra 6 paquetes de papel higiénico!— le gritó Gerald.

—¿Acaso quieres que muchas familias se queden sin papel?

—¡Yo no quiero estar en el baño y ver qué no papel! Así que agarra más.

—¡Agárralo tú! Yo no soy tu sirvienta.

Gerald agarró un paquete más de papel higiénico pero se dió cuenta de algo.

—Keith...

—¿Si?

—¿DÓNDE DEJASTE EL CARRITO?

—¡MIERDA!

Con Mary y Sofía.

—¿Crees que debamos llevar muchas cosas?— preguntó Sofía, viendo como Mary tomaba muchas latas de comida.

—Claro, Sofía. Vamos a morir de hambre si no nos abastecemos.

—Pero no es un apocalipsis...— susurró Sofía. La peliblanca iba a tomar una lata de atún pero una señora la empujó, tomó la lata y lo hecho a su carrito.

—¡Oiga, señora! Mi amiga iba a tomar esa lata.— le dijo Mary a la señora.

—Mary... No es bueno pelear, deja que la señora se lleve la lata.— dijo Sofía, tratando de calmar a su amiga.

—¡Pero es la única lata que queda!— Mary volteó a mirar a la señora y, con agilidad, le robó la lata.

—¡Mocosa, eso es mío!

—¡Es de nosotras, anciana!

—¡Yo lo tome primero!

—¡Mi amiga lo vio primero!

La señora intentó quitarle la lata a Mary pero ésta fue más veloz, así que movió su mano hacia arriba, de modo que no pudiera alcanzarla. La señora, como es más pequeña de estatura que Mary, empezó a saltar pero aún así no podía alcanzar dicha lata.

—¡Eres muy malcriada, niña!— gritó la señora.

—¡Usted es muy infantil!

La señora tomó un mechón del pelo de Mary y lo jaló. Mary, enojada, hizo lo mismo. Ambas empezaron a jalarse el pelo mientras Sofía intentaba separarlas.

Con Nicole y Alan.

—El helado de chocolate sabe mejor.— dijo Alan para después tomar dos botes de dicho helado y ponerlos en el carrito.

Iba a empujar el carrito pero Nicole se lo impidió. El pelinegro sacó de la nevera dos botes de helado de vainilla y los puso en el carrito.

—¿Qué es esto?

—Helado.— respondió Nicole, sin preocupación.

Alan suspiró.— Sé que es helado, pero me refiero a que por qué lo pones en el carrito.

—El helado de vainilla es delicioso.

—Solo podemos llevar dos botes de helado.

—Entonces llevemos el helado de vainilla.— respondió Nicole.

Solo serán 40 días [Hamefura/Bakarina] [Historia transferida]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora