Censura (Temporada 1) COMPLETA

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Para iniciar las chicas nuevas no son capaz de usar faldas cortas, por lo que tuve que pasar escuchando lo incómodo de sus comentarios. (Qué se les ve todo, que se sienten scorts) en fin una gran lluvia de opiniones. Más que el colegio le hace un favor y se ponen a hablar de eso.

Los chicos empezaban a hacer las listas con las vírgenes que acababan de llegar, poniendo le puntos y separándolas. ¡Qué asco, su machismo!

Un grupo fue el que llamo las atenciones. " Las tentaciones " se llamaban unos doce hombres gay que vivían libres. Usaban faldas y se tomaban fotos. Muy fem.

A mí me encantaron.

En mi salón colocaron unos diez y no se veían mal. Si no fuera porque no me llamaban la atención, no tanto como Max y su grupo. Ellos practicarían separado del equipo del colegió. Los directores convinieron que era mejor no confrontarlos. Claro que harían un evento al final de año. "Juego amistoso".

Están sentada en la mesa de química uno y nos colocaron a una chica súper tierna.

Luisa, Marta y yo, planeamos hacerla parte de nuestro grupo. En plan ayuda humanitaria.

Le hago una señal para que venga, y se siente con nosotras, muy pura.

"¡Hola! ¿cómo te llamas, querida?" le pregunta Luisa.

"María, para servirle" responde mirando hacia el suelo.

"Tranquila no te vamos a hacer nada. ¿Te quieres sentar con nosotros?" le pregunto, sacando una silla para que se sentara junto a nosotras.

María era una paloma. Tan pálida, tan delicada. Que pensé en convertirla mi proyecto personal.

El profesor hablo de orgánico y no sé qué otra cosa.

Nos corresponde explicar la oxidación. Así que propuse que fueran a nuestra casa hoy.

Mi padre y primo estarían en el trabajo, y llegarían tarde.

Así que podría divertirme con mis amigas.

Marta quería que la cubriera iría a la casa del hermano mayor de su novio. Nos mostró las fotos que le mando de su miembro. Waoo. Era bueno.

"Bueno, Marta disfruta, ya sabes dile a tu madre que llame a mi papá el responderá que estarás en mi casa. No regreses tarde por más bueno que este tu novio, deja algo para después" le comentó sonriendo.

María no sabía dónde poner la cara.

"Nunca habías visto uno" le pregunta Luisa.

"No"

"Tranquila se siente mejor de lo que se ve" le comentó, intentando hacer que se relajara.

Mi celular vibra es un mensaje de mi tío.

Aparentemente mi hermano le hablo de los juegos que tenemos.

Decía así:

(Ya sé que te gusta, espero pronto verte y jugar también, y no me canses mucho al muchacho)

Junto a una imagen de su miembro. Algo normal.

María nos presenta a su amigo Elias. Un chico geek de esos que le gusta las tecnologías y juego.

A lo que le doy un beso en la mejilla y un fuerte abrazó
Se sonrojo. Ha pasado el tiempo desde que no he tenido acción. Pensé.

"Mira Elias, tengo un problema con mi celular" le comento, sabia que no demoraba en sonar la alarma de fin del descansó.

Le hago una señal a Luisa para que se meta con María en el salón.

Elias tenía ojos verdes, y se reía algo raro. Eso no me importaba.

"Ven te lo mostraré" le digo tomándolo de la mano y llevándolo al baño de chicas.

Lo metí en uno de ellos.
Estaba nervioso y me causaba ternura.

Al bajar sus pantalones, podía ver como aumentaba el tamaño y me lo coloque en la boca. Tenía un sabor salado. Muy frecuente cuando suda. Me lo metí lo más que podía y no demoro en llegar al final.

Sorprendido me miro y dijo "Gracias"

"Gracias a ti y si te quedad en silencio puedes llegar a tener más"

Al entrar al salón el profesor de Orientación hablo de la abstinencia.

El mismo tema de siempre.

Cuando estaba por retirarnos.

Me llamo, y hice una mueca de fastidio.

"Ya no me llamas como antes, qué paso, tiene otro"

"No es solo que he estado ocupada"

"Ya, no te olvides del huracán"

Llamaba Huracán al movimiento que hacía cuando me penetraba. Me gustaba sino fuera porque se cree dueño de mí. Hay que castigarlos un poco para que su ego no crezca.

"Ok" le respondo saliendo y levantando un poco mi falda para provocarlo.

En la salida, Max y su grupo de chicos reían, mientras Luisa hablaba con él. No estaba interesada en Max por ahora.
Mi amiga y yo solemos turnarnos los chicos.

Ellas corrieron hacia mí.

"¿Puedo ir con ustedes a hacer el trabajo?"

"No, por favor, no seas un chicle. En otra ocasión sin problemas" le digo.

María parecía distante, asumí que aún no estaba lista para lo que vio. Y menos para lo que planeo hacer con ella en mi casa.

No podía creer lo queveía. Luisa Abrazaba a Max mientras le tocaba un glúteo a Luisa. Mi amiga no pierde tiempo.