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En mi habitación las sabanas ya deben ser cambiadas. Mis pechos libres y sin nada de bajo como me encanta dormir, pues, así siento más cómodo sin tanta ropa y me es más fácil tocarme.

Cambio las sabanas por unas nuevas con olor a lavanda, es mi olor preferido, me recuerda a las caminatas por el parque donde el aroma de las flores me transporta a un lugar de calma.

Mi celular empieza a sonar, me ha llegado mi charla.

Hoy es la presentación del trabajo grupal a el que no asistí a la reunión en la casa de mis compañeros. Le di unos dólares a los que lo hicieron y me acaban de mandar mi charla. Solo una hora para aprendérmela. ¡Maldición! ¿Por qué soy tan irresponsables? Como si saber las fechas de la historia me ayudara a ganar dinero y ser feliz.

Al salir de mi habitación me percato que la de Tom mi primo esta media abierta. Mi curiosidad mi amada curiosidad me hace asomarme por esa línea abierta de oportunidades. Tom estaba cambiándose estaba desnudo. Pude ver ese glorioso cuerpo de hombre, ese pecho, esos abdominales.

¡Maldigo al destino y al karma del que tanto habla Luisa!

Gloriosa línea de vellos que baja hasta su ombligo a esa área que tanto deseo.

Desde que llego suele pasearse por la casa casi en boxer y pude apreciar el movimiento de un lado al otro de toda esa longitud. No se compara mi imaginación a lo que estoy viendo.

Es su culpa estoy en el pasillo sino quería que viera su pene en toda gloria. No debió dejar la puerta abierta. Colgado como estaba, parecía saludarme con vida propia. Perfectamente suave y blanco.

Camino aumentando mis paso corriendo de mis deseos y no querer regresar y montar a mi primo. Cabalgarlo cómo a un caballo pura sangre.

"Kalila" me llama mi padre.

"Come algo y ten dinero para que comas en el colegio, no quiero que te desnutras estas en crecimiento" dice mi padre.

"Te ves algo roja, te sientes bien"

"Si papá"

Vale cuídate, tienes la llave hoy volveremos temprano hare cordero con papas para comer.

Salí prontamente de mi casa. Si antes quería hacerlo con Tom ahora con más razón quiero sentir su pene en llenarme por completo.

Ya en clase trato de encontrar una forma de leer sin qu la profesora se diera cuenta. Asi que Elias sostenía pancartas con mi charla mientras leía. Suerte que la profesora se sentó de espalda a mis compañeros. A Elias le prometí divertirme con él. Desde que vi a Tom no dejo de desear hacerlo con alguien.

Sacamos casi una nota excelente, sino fuera por ciertas fallas ortográficas en el trabajo escrito.

"Necesito saber que es esto"

"Por que necesitas darle etiquetas a todo. ¿Te sientes inseguro? Sino lo haces tu muchos otras complacidos desearían estar en tu lugar" le digo algo molesta.

"Comprendo , es solo diversión"

"Así es"

"Aceptas"

"Claro"

Ya en el baño de chicas.

La textura de su pena a medio erectar. Sus testículos grandes con pocos vellos y lentamente se hace en todo su nivel.

Saco un condón y se lo colocó.

"¿Es la primera vez?" le pregunto.

Hace un gesto afirmativo con la cabeza.

El condón tiene lubricante más lo húmedo que estoy hace fácil que entre. Miro hacia afuera del baño vigilando que ningún inspector miro entre. Me ha pasado antes.

Empujo mis glúteos hacia su sexo, Elias gime, le hago un señal que no haga ruido. Empujo con más fuera su pene en mí.

Termina pronto, y siento como tiembla con cada corrida. Apenas estaba iniciando a sentir.

Su mirada me pide perdón.

"Tranquilo" le digo dándole un beso en la boca.

Me llevó el preservativo para arrojarlo lejos y que nadie sospeche menos la asesoras.

Insatisfecha recuerdo el porque me gustan mayores.

Toco el collar nuevo que llevo en el cuello y digo para mi "Martín" presionando con fuerza hasta que se me marca en la mano.

Recordando los momentos que compartí con mi profesor. Si solo no fuera padre de tres niñas y su mujer una psicóloga del colegio.

Censura (Temporada 1) COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora