《01》

78 10 5
                                    

Reino de Liones

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Reino de Liones.

  Una pequeña mujer de cabellera negra recogida en dos coletas iba caminando, y en sus brazos se encontraba un niño, de aproximadamente uno o dos años de edad, ambos con ropas muy llamativas. La mujer caminaba con tranquilidad sobre el desastre, a lo lejos se podía ver cómo una batalla feroz se llevaba a cabo.

—¡¡¡Por favor, detenga esto Gran Caballero Sagrado Hendrickson!!! –Ese grito llamó la atención de la mujer. Se dirigió a dónde se escuchó la voz, al irse acercando podía escuchar la voces claramente. —¡Es sospechoso de conspirar para derrocar el reino! ¡Si continúa resistiéndose, no tendremos más opción que tomar represalias y matarlo como Caballeros Sagrados que protegen al reino!.

   En la orilla del gran hoyo, alejada del caos, se encontraba la misma mujer junto a su pequeño hijo. Entre los brazos de la mujer el niño se movió para poder ver mejor el lugar.

—¿Oh~?, Por fin te despiertas Eber –Mostró una cálida sonrisa al pequeño. —, mira ya hemos llegado a Liones. El camino no fue tan largo, ¿verdad?.

   El niño era albino, cabello blanco como la nieve y la piel de porcelana, lo más llamativo eran sus grandes ojos grises, su cara no mostraba emoción alguna pero de lejos se notaba el apego a la fémina. El pequeño miró a su madre y puso su vista de nuevo en la batalla.

—Oh vaya... –Dice la mujer con decepción. —Creí que era un Demonio Gris, pero parece que es solo un humano que bebió su sangre... Bueno es lo más cercano a un Demonio, ¿que te parece, cariño? –Miró a su bebé, quién estaba inexpresivo. —Oh~ te veo muy emocionado Eber. Sabes... mamá perteneció a una orden de caballeros, se hacían llamar ¡Los Ocho Pecados Capitales! –Exclama, agitando uno de sus brazos de arriba hacia abajo. De repente se escuchó una explosión. —¿Deberíamos ayudarles?... Nah.

   Se quedaron un rato en silencio mirando la batalla, los ataques iban y venían. Un espectáculo ante sus ojos. Pero por más que lo intentaron, los caballeros no podían hacerle daño alguno a Hendrickson.

—Aww~, Meliodas protegió a esa chica –Dijo enternecida viendo tal escena para después ver a su hijo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—Aww~, Meliodas protegió a esa chica –Dijo enternecida viendo tal escena para después ver a su hijo. —, me recuerda a tu padre en nuestra juventud. Era tan lindo y muy caballeroso, siempre me protegía y me cantaba, aún lo hace.

INSANITY  | Nanatsu No Taizai |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora