-No me jodas. ¿Otra vez aquí, Yoongi?
-¿Qué?- Se gira a mirarlo y levanta los hombros.- La primera vez que vinimos tú mismo dijiste que estaba exquisito y si tenías la oportunidad vendrías todos los días... te estoy cumpliendo el deseo.
-Ay Dios... cuando dije eso no lo decía literalmente. Hasta el hambre se me quitó.
-Pero bien que aceptas, Jin Hyung. Cuando se trata de comida nunca te niegas.
-Obviamente si tú pagas. ¿Cómo desperdiciaría comida gratis?
-Ajá sí. Mejor ve ordenando.
No podía decirle que la verdadera razón por la que ambos se encontraban una vez más en aquél comedor. No podía decirle que la razón estaba a unos metros de distancia. Ni bien Jin comenzó a hojear la carta, los ojos del pelirrubio fueron directos a aquél mesero que lo había encantado por completo. Esa sonrisa única y preciosa, su cabello negro con un corte que solo se le veía perfecto a él, sus ojitos expresivos. ¿Y la mejor parte?
Sus preciosas pecas que levemente contrastaban con su piel. Podrían parecerle común a cualquiera, pero para él le daban una razón más para creer que es precioso.
Yoongi solo ha podido intercambiar palabras con él unas 3 o 5 veces, pero lo trastornaba por completo. Era algo poco común ver chicos con leves pecas en Corea, pero él.
Él era hermoso.
Para Yoongi, parecía que llevaba estrellas marcadas en su rostro, y podía afirmar con seguridad que existían las más preciosas constelaciones.
Estaba tan perdido en un trance observando cada movimiento que el mesero hacía, que no notaba que Jin le estaba hablando.
-Yoongi, préstame atención.- A juzgar por su tono molesto, podía decir que le estuvo hablando durante bastante tiempo.
-Ah, ah sí perdón. No te estaba escuchando.- Dijo sin mirarlo.
-¿Cómo me vas a escuchar si estás bastante concentrado mirando...- Dirige su mirada donde Yoongi miraba.-... al mesero?- Dejó una pausa y volteó a mirar a su amigo, confundido.- ¿Por qué miras tanto al mesero?
-¿Acaso no lo has visto bien? Es muy hermoso. Es difícil quitarle la mirada.
-Sí, es lindo, pero, ¿no crees que te estás pareciendo a un acosador mirándolo todo el tiempo?
-Jin no podía tener más razón. Se veía como un idiota acosándolo cunado podría hablarle.
-Lo sé, pero me conoces. Sabes que cuando me pongo nervioso digo estupideces, y seguro me sentiré así si le hablo.
El mayor claramente estaba sorprendido. Estaba apreciando una faceta que nunca había visto en Yoongi. Eran pocas las oportunidades que mostraba importancia a lo que sentía, y según él, era muy probable que esté en una fase cercana a enamorarse. Cuando observó a Yoongi bajar la cabeza, soltó un suspiro. De alguna forma figuró sus verdaderas intenciones al llevarlo ahí.
-Ay Yoon. ¿Por qué no lo invitas a salir?
-No lo sé.- Levantó la mirada.- No creo que quiera.
-Bueno, ¿y qué tal si lo intentamos?- Le da una sonrisa y vuelve a darse vuelta.- ¡Mesero!- Levanta la mano moviendo levemente de lado a lado.
-No, no, no.- Repetía Yoongi bajando la cabeza con la cara tapada.- Te voy a matar un día de estos, hyung.
Taehyung estaba recogiendo los platos de una mesa cercana, cuando escucha un leve grito de un cliente llamándolo. Se dio vuelta y era el amigo de aquel chico lindo que siempre lo miraba. Tae no era ningún idiota, notaba cada mirada, aunque no es muy discreto. Pero eso no le quitaba el atractivo y la atracción. Sin embargo, Taehyung dudaba mucho de sus sentimientos: no tenía muy en claro si realmente se había enamorado o era una simple atracción. Si han hablado pocas veces, eso no quita el hecho de que le pueda gustar, ¿no?
-Oye Hoseok. ¿Podrías atender la mesa de allá?- Movió su cabeza hacia la mesa.- Es que estoy ocupado ahora.
-Lo lamento Tae, pero esa otra mesa ya me había llamado antes.- Contesta apenado señalando la mesa con la cabeza.- Pero ve tú a atenderlos y después yo junto los platos. ¿Quieres?
Asintió como respuesta. Dejó la bandeja con los platos sobre la barra, tomó su anotador con otra bandeja y se dirigió a la mesa de los chicos.
-Buenas tardes.- Sonrió educado.- ¿Qué es lo que van a ordenar?- Tae preparó el bolígrafo y el anotador sobre la bandeja.
- Queremos dos platos de kimchi, por favor.- Contesta Jin amablemente.
Taehyung apuntó lo que ordenaron.- ¿Sólo eso?- Ambos asintieron.- Perfecto. En seguida se los traigo.
Les dio una leve venía y cuando se había dado vuelta para la ventana de la cocina, una voz lo había llamado.
-Oye...
Tae se volvió para encontrarse con la familiar mirada de ese guapo extraño.
-Dígame.- Solicitó sonriente.
Yoongi le dirige una mirada a Jin cargada de duda, pero se la devuelve para que continúe. No había marcha atrás.
-T-tú... ¿quieres salir conmigo?- El pobre Yoongi había dejado al descubierto sus nervios ni bien habló, y le pareció lo más tierno que Tae había visto. Soltó una leve risita y ladeó su cabeza. No tenía que pensar mucho su respuesta.
-Claro. Me gustaría salir contigo.
-¡¿En serio?!- Exclamaron sorprendidos.
Taehyung volvió a reír.- Sí, pero antes dime tu nombre.
-Y-yoongi. Min Yoongi.- Sonríe.
-Bueno Yoongi, yo soy Taehyung. Aquí está mi número.- Provechó a usar una hoja limpia de su anotador y lo dejó en la mesa.- Nos vemos mañana a las dos.- Sonríe.
-Se-seguro.- Todo había pasado muy rápido. Le costó procesar que aquella belleza que le había guiñado el ojo accedió a salir con él. Ahora lo miraba irse, y soltó un suspiro que inconscientemente había estado reteniendo.
Ya quería que fuese mañana.
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Freckles -taegi-
FanfictionCon solo unas visitas al comedor, con solo unas miradas. Era claro que fue amor a primera vista. Pareja principal: Taegi. Mini fanfic. Comienzo: 28/07/2020 Finalización: 28/07/2020 Estado actual: terminada.