Memento Mori(Alejandro)

6 1 0
                                    

Bien si el primero era pichón o podía ser, sería mejor hablar con él. Era jueves y le pregunte,¿qué le había pasado?. No me gustaría que hubiese tenido razón sabiendo que fuese él, porque en el sueño su mayor temor era perder un ser querido. Le pregunté porque tenía faz más seria de lo normal y ojos cansados y tristes.
Me dijo que me lo contaría más tarde, pero no en ese momento. Espere al recreo, al parecer habían confundido a su padre con un animal mientras cazaba y le dispararon matándolo en el acto, eso dijo la policía, pero obviamente era mentira, no sé era como si la policía estuviese comprada, podría haber sido un accidente, pero al lado del cuerpo en un árbol había una sonrisa hecha con sangre. Pero ya daba igual su cuerpo blanquecino, pálido dejo de contener su aliento.
No sé sabía quién había sido, pero era más que obvio que era el de la llamada eso pensé yo. La policía parecía una panda de incompetentes, inútiles ante lo que tenían delante de sus ojos. Mire las pistas, nadie había visto nada ni sabía nada, claro tampoco nadie sabía que se fue a cazar. Los únicos que lo podían haber sabido eran pichón y su madre. ¿Le habría seguido algún coche?.
Eso no lo sabría nunca, pues nadie estaba dispuesto a ayudar ni hacer nada, nisiquiera pichón que estaba en una situación complicada y obviamente lo entiendo. Debías seguir con las preguntas. ¿Tendría alguna mala relación últimamente en el trabajo?. Pasaron un par de días y recibí una llamada del que se ocultaba tras el teléfono.
"¿Qué tal, te gusta mi obra?".
"¿Has sido tú?".
"Quizá y quizá este loco o quizá no, quizá estés tú mal y te lo estás imaginando todo, o igual no. Eres como tú amigo, buscas la razón y la verdad, gran error, quieres saber porque hago todo y tú vendrás a intentar hacer que cambie para bien".
Afirmó con voz segura.
"Te acabaré encontrando".
"¿Y cuando lo hagas que me harás?".
"¿Quién eres?".
"Un pequeño admirador que te conoce como la palma de su mano.
Sigue reuniendo pistas... Pasku".
Y colgó.
Nadie me llamaba pasku desde hace tiempo, pero eso me da esperanzas, sólo hay dos personas que me llaman así y son Costi y Dina.
Así que decidí quedar con ambos obviamente no a la vez, ni mencionando el tema nada más quedar. Después de unas tres horas intentando convencerle de que quedase. Quedamos más y empecé a hablar con él cuando el resto se fue.
Le enseñé una foto de la sonrisa unos media hora después de empezarle a hablar y le pregunté. "¿Sabes qué es?".
"Hace unos días asesinaron al padre de pichón".
Costi es una persona risueña y que suele vacilar aunque su humor a veces no es aceptado, pero él es feliz.
"No sé nada".
Dijo seriamente
No me hizo falta nada más para saber qué decía la verdad. Nunca había visto a Costi así de serio.
Un rato después le dejé y llegando a casa, otra llamada.
"Le he dejado un regalo a pichón".
"¿Qué has hecho?".
"Nada, simplemente de advertencia, eso es, es un mensaje de advertencia, por dios no soy Constantin el no tiene tanta puntería como yo jamás llegaría a darle en la cabeza. Claro que no lo hice al lado sino entre a unos 300 o 400 metros".
"Por dios porque ¿Por qué haces esto?
No te han hecho nada. ¿Verdad?".
"No es nada personal es una ruleta de la suerte hoy le ha tocado a pichón, quizá mañana te toque a tí".
Y colgó.
Inmediatamente fui a visitar a pichón para ver lo que había hecho, le llamé varias veces antes de llegar, pero no cogía el móvil. Cuando llegue me lo encontré al lado del "regalo".
"¿Por qué me hace esto? ¿Quién me lo está haciendo?".
Le conté todo sobre lo de las llamadas que no iba a ser el único y que yo estaba trabajando en esto.
"Sí lo pillo yo antes que tú acabaré como sea con él"
Después miré el regalo, era la cabeza de la mascota de pichón un conejo y una carta con su sonrisa, su marca y dentro ponía "a por ellos detective".

El Cuento De Las Mentiras: Condenados Los MaldecidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora