El Cuento De Las Mentiras: Condenados Los Maldecidos

Acertijos en la oscuridad(Andrea)

Alejandro me llamo desde el hospital porque dijo que me necesitaba para algo, el qué, no lo sabía. Cuando llegue simplemente me miró y tuvimos una larga conversación sobre lo que quería que hiciese dijo que confiaba en mí, yo me estaba dando cuenta de lo que pasaba, pero no lo suficiente.
El plan se basaba en una localización que el propio asesino le envió, obviamente una trampa pero él me dijo que me aprovechará para saber más sobre él, sobre quien era realmente el asesino.
El plan era parar el tráfico durante unos minutos en la zona, ya que la localización eran unas fábricas abandonadas por donde la policía solía rondar y parar el tráfico servía para darme unos minutos más, en vez de sólo cinco entre patrulla y patrulla.
Los que le ayudarían serían pichón y Ana, la incógnita era si el realmente estaría allí o no.
Eran las seis y veinte o algo así, Ana y pichón ya estaban en los semáforos y yo esperé a que me llamasen o enviasen una señal. Fueron porque ambos tenían razones para parar a  ese cabrón.
Espere a que pasase la patrulla y ellos pulsasen los botones para cruzar.
Tardé menos de un minuto en llegar a las fábricas, todo estaba a oscuras y no veía nada así que use la linterna del móvil.
Entre el silencio y la oscuridad una voz dijo:
"Vaya sabía que enviaría a alguien, pero no supuse que fueras a ser tú".
Después de eso sonó un pitido chirriante y apareció una luz cegadora, aunque duró tres segundos, fue muy molesto.
Tras lo ocurrido mi móvil dejó de funcionar, a lo que añadió:
"P.E.M señorita es un pulso electromagnético, tecnología punta, no vas a usar en un ratito el móvil así que sólo estamos los dos.
¿Qué te parece jugar a un juego?
Sí ganas me entrego, sino te detienen.
Fácil sólo acierto los tres acertijos, recuerda sólo tienes un intento".
Le respondí:
"Está bien, pregunta"
"Este lo saqué de un libro, conoces el hobbit, no seguramente sólo las películas, igualmente sale en la primera, cuarenta caballos comen hierba, mastican, desgarran, clavan y desmenuzan ¿Y bien?".
"Este ya me lo conocía, son los dientes".
"Bien, vale, era fácil ahora serán más personales, por la mañana te hace estar feliz, te acompaña y te hace confiar en alguien, él la tiene en tí además de confianza".
"Sí te refieres a Alejandro es esperanza, sino no me hubiese mandado aquí".
"Ahora entiendo porque te envió a tí y no a otro, vamos con el último, la oscuridad lo inunda, se esconde en ella y te pregunta".
"Entegate ya que tú eres la respuesta".
Aplaudió lentamente de forma burlona y termino diciendo:
"Soy la respuesta y también un mentiroso el P.E.M ha hecho que no te enteres de que la policía está entrando en el lugar, gracias por jugar conmigo nos vemos".
Y se marchó entre risas.
El móvil volvió a funcionar y Ana me llamo para decirme que la policía estaba allí y que saliese pitando.
Empecé a correr para escapar por los pelos cuando ya estaba lejos vi al coche de la policía con la sirena puesta fuera del edificio.
Después de aquello un número de un sólo uso me envió una marca con un mensaje que decía que todo acabará donde empezó.
Volví con Alejandro para contarle lo ocurrido.
"Y ahora que simplemente nos quedamos de brazos cruzados o vamos a por él".
"Tienes que esperar el asesino sin nombre suele hacerme llamadas, porque sino no se entretiene, le gusta que le busqué".
Dijo Alejandro con toda la tranquilidad del mundo.
Pasaron cinco, diez, quince, veinte minutos y así hasta una hora en la que no hubo ni una llamada.
"No te ha llamado, no hay pistas, entiendes que no podemos hacer nada sin pistas".
"Sí que hay pistas todo empezó en el instituto, pero yo creo que está más cercana la fiesta de dentro de un mes en abril, el dijo que todo acabaría donde empezó".
"Así que hay que estar atento en esa fiesta y ahí que ir, vale, pero mientras tanto ¿Qué hacemos?".
"Seguir con nuestras vidas, él no va a hacer nada del otro mundo, no otra vez, en su modus operandi no entra la parte de llamar mucho la atención, ya lo hizo una y dudo que lo vuelva a hacer así que hay que andar con mil ojos".
Añadió algo antes de irse, tuvo un plan.
"Le gustan las grandes concentraciones , porque hacer algo pequeño en ellas es invisible, nadie ve ni olle nada, así que podrías reunir a más gente para el chupinazo de mi pueblo, queda mucho, lo sé pero vas a estar bastante tiempo con eso y así te entretienes".
"Vale, pero a quién reúno, si no sé quiénes quieres que vallan, obviamente no me gusta la idea porque los pones de cebo y eso, pero espero que haya algo más detrás de todo, algo que digas, guau es un buen plan, no una chapuza, eso es lo que espero de tí".
No contesto nada simplemente se dio la media vuelta y se fue ya que le habían dado el alta y era su último día en el hospital.