"Después de la batalla con Caos una nueva amenaza aparece, la vida tranquila se acaba para nuestras Sailor Scouts y el regreso de unas estrellas fugaces sorprenden a todos. Sin embargo, algo atormenta a Serena Tsukino en sus sueños ¿Qué será? ¿Deseo...
La noche era cálida y más estrellada que nunca, Serena yacía durmiendo en su cama, su cabello estaba enredado suavemente entre sus dedos y Luna la acompañaba acurrucada a la altura de sus pies. Una exquisita fragancia hizo que Serena poco a poco abriera sus ojos; aún con la vista algo borrosa, visualizó una mariposa con un leve resplandor rojizo q iba revoloteando en dirección a su ventana, desapareciendo al instante al tener roce con las cortinas. Serena se enderezó
-"Esa fragancia es de…” - pensó aún somnolienta y sus ojos contemplaron la silueta de una mujer en la alcoba, de una sailor a la cual conocía bien.
-Sailor Star Fighter... - dijo apenas audible, dirigiéndose a su ventana, apartando la cortina para tener mayor visibilidad. Pero no había nadie: ”¿Seiya?"- pensó llevando sus manos a su pecho, mientras que una serie de sentimientos la invadía, cerró sus ojos recordando con nostalgia a aquel amigo que no veía hace tiempo, pues habían pasado meses desde que la princesa Kakyuu y las Starlight volvieron a Kinmoku a reconstruir su planeta.
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⭐🌙
Amaneció y Serena empezó su rutina como le era costumbre.
-¡Serena levántate! - Le gritaba mamá Ikkuko desde el otro lado de la puerta. - ¡Llegarás tarde al colegio!-
-¡Ay no! ¡Me quedé dormida! - exclamó mientras se enderezaba de golpe al observar a Luna estirarse junto a ella. Recordó la escena de anoche confundida.
- ¿Fue real? -
-Vamos Serena, levántate - Le dijo Luna lamiendo su pata.
Llegando al colegio se topó con Mina, Lita y Amy en la entrada:
-Buenos días Serena, veo que te quedaste dormida - La saludó Mina con entusiasmo.
-Si, lo siento, es q no dormí muy bien anoche - dijo Serena avergonzada.
- Habíamos quedado en repasar para la prueba pero acaban de tocar el timbre para ingresar a clases, ni modo- le recordó Amy, caminando hacía el interior de la escuela.
- Aunque no lo crean estudié hasta tarde, pues prometí a Darién subir mis calificaciones - les dijo Serena alzando un poco la voz confiadamente.
- Es verdad este año te ha ido mejor en tus estudios y hablando de Darién, ¿Cómo está él? - Preguntó Lita.
- Pues, últimamente no hemos hablado, está muy ocupado con la universidad. - Serena bajó su mirada y recordó que después de la batalla que tuvieron con Sailor Galaxia y regresar a sus vidas normales, Darién había vuelto a retomar el viaje a Estados Unidos para continuar sus estudios y desde entonces su relación se complicó un poco, se veían y hablaban de vez en cuando. A pesar de eso, Serena seguía con sus sentimientos intactos, pero por alguna razón extrañaba mucho a Seiya, su amistad marcó un antes y un después en su vida. Sus amigas no siguieron preguntando, pues ya sabían cómo se ponía Serena cuando su novio estaba lejos. Mina le dio ánimos al ingresar a la sala. Las clases transcurrieron normales, hasta que llegó la hora del examen, fue cuando Serena sintió que le había faltado estudiar.
