Capitulo 29

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Tras varios días de espera e impaciente por tenerlo en sus brazos, al fin se irá a casa con él, vivirán una vida estable, sencilla y humilde tendrá la mejor vida que podrá ofrecerle.

Se acerca a la ventana de los cuneros y ahí se encontraba su bebé jugando con sus manos, le saluda con la mano sonriendo, la enfermera pelirroja toma al pequeño con mucho cuidado entre sus brazos y camina hacia él para entregárselo.

-Señor Morgan- Se aleja de la ventana para acercarse a ella- Le entrego a su pequeño bebé, sano y fuerte.

Lo observa unos segundos con aquellos ojos azules que tiene, ángel estaba más grande desde la última vez que lo veo, suspira.

-Hola cariño, papá está aquí.

Extiende los brazos para cargarlo con mucho cuidado la enfermera lo deja entre sus brazos, tiene miedo de cargarlo y si... ¿Lo deja caer? Es tan frágil, puede sentir a Elizabeth cerca de él, aquel pequeño era su reflejo era idéntico a ella es como si jamás se hubiera ido.

-Felicidades Señor Morgan.

Asiente, la enfermera le da la última sonrisa y entra a los cuneros una vez más, los deja solos.

-Bueno pequeño- Aquel bebé lo mira con aquellos ojos color de miel que heredo de su madre- ahora estamos solo tú y yo recorriendo este camino, no te preocupes, hare todo lo posible para que nada te haga falta porque ahora en adelante somos una familia, yo soy tu papá.

Ni idea en qué momento comenzó a llorar lleva su bebe esta su regazo.

-Estaremos bien, te lo prometo- Intenta calmarse, extraña a Elizabeth, debe ser fuerte por ángel además su pequeño es idéntico a ella que la hará recordar siempre

Solloza e intenta tranquilizarse, sabe que no será fácil pero no está solo su familia lo apoya, suspira antes de volver hablar, lo aleja de su regazo para verlo.

-Tus tíos nos están esperando, y en la casa están desesperados por conocerte- Su pequeño solo mueve sus manos, le sonrió y caminan hasta la sala de espera.

En cambo en la sala de espera los chicos han comenzado a desesperarse hace varios minutos que Jacob se había ido, no pueden esperar por conocer a ángel.

-¿Cuánto más se tardara?- Pregunta Thomas quien pasa sus manos por su nuca.

Brayan encoge los hombros.

-No lo sé, Thomas.

Suspira, volteo a hasta la ventana ahora la nieve es un poco más densa deben irse lo más pronto, antes que la nieve los detenga ya que las llantas del auto pueden quedarse atascadas.

-Ahí viene- Volteo hacia donde Thomas le indicaba, en efecto ahí venia su hermano con su pequeño bebe en brazos.

Jamás imagino ver a su hermano de esa manera

-Oh por dios- Es lo único que puede decir en ese momento, realmente no sabe que decirle a su hermano menor- es tan pequeño y hermoso.

Jacob llega a su lado, les sonríe.

-Chicos les quiero, presentar ángel, a mi pequeño Hijo.

-No puedo creerlo Jacob, ya eres papá- Thomas pasa su brazo atrás de su espalda, Jacob le sonríe- es hermoso.

-¿Lo puedo abrazar?- Jacob asiente, con cuidado lo coloca en los brazos de su hermano mayor- tengo miedo de tumbarlo- Le arregla la pequeña manta azul.

-No lo harás.

Aquel pequeño de ojos de miel lo mira, juega con sus pequeñas manos Brayan le sonrió.

-Eres tan hermoso, yo soy tu tío Brayan pequeño- Le sonrió, le deja un beso en la frente- ahora eres parte de nuestra familia.

-Y yo tío Thomas- Se asoma por detrás de su hombro, provocando que hiciera una mueca.

-Thomas con tu cara fea, casi llora.

-Por favor, Jacob, las chicas dicen que soy hermoso.

-Solo tu madre dice eso.

-¡Oye!

Le fulmina con la mirada, Jacob rió, hubo unos minutos de silencio.

-Chicos debemos irnos- HablaBrayan dándole el bebé a Jacob- la nieve está algo densa y puede ser peligroso.

- Además hace un poco de frío no deseo que se enferme Ángel.

Los chicos asienten.

-Eso sonó como un padre.

-Thomas si no lo recuerdas, soy papá-Dice, cubre un poco más ángel con su manta intentando mantenerlo caliente.

-Bien vámonos.

Caminan hasta la salida del hospital, Thomas se quita su chamarra para ofrecérsela a Jacob.

-Pero...

-Vamos, cubre al pequeño del frío.

Asiente, la toma y con ayuda de su amigo se la colocan encima, camina lo más rápido posible hasta donde se encuentra estacionado el auto su hermano le abre la puerta del copiloto, le sonrío como agradecimiento y entra al auto.

-Pero madre mía que frio hace- Dice Thomas entrado al auto, Jacob lo mira por el retrovisor- ¿No me quiere dar un abrazo cariño?- Thomas le ofrece una sonrisa coqueta, el de ojos azules negó riendo.

-Chicos por favor compórtense- Se escucha cerrarse del conductor, los volteo a ver- hay un niño presente, lo que sea que piensen háganlo después- Dice en tono divertido.

-¡Brayan!

Su hermano solo encoge los hombros divertido, salen del estacionamiento del hospital directo a casa.

AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora