¿Eres Tú?

Capítulo 6:

* Alex Hoffman

¿Qué me pasa? , agh  he conocido a muchas , pero ella, ella si que era hermosa, su todo, aunque no le vi bien el rostro sé que es hermosa, sus labios, sus ojos color ámbar, su cabello, ¡oh dios! Su cabello, hermoso una melena castaña que le caía hasta por los hombros rosando la suavidad de su piel que por cierto tuve el honor de provar.
¿Qué me has hecho Misteriosa Dama del Antifaz?

-¡He Alex!, deja de estar en las nubes hermano- dice Samuel interrumpiendo mis pensamientos- No me digas que apareció una bruja que te dominó- dice en tono de burla.

Le golpeo la cabeza con el balón y ríe.

-¡Jamás!- le digo riendome- no seré como el caido de mi hermano.- digo y él rie- auch eso dolió, después no hablarás así- me dice Sam riendose

A quién quiero engañar, si me gustaria teber a una chica especial y la chica del antifaz, me dejó sin aliento.

Sabía que era especial cuando la ví en esa fiesta con los ojos cerrados escuchando la banda en vivo, y cuando paso por mi lado sentí su aroma, el mas dulce que he olido,  la seguí y me sorprendí cuando la ví alejandose sola caminando por la playa, se veía muy hermosa con ese vestido azúl largo con la espalda descubierta, y la seguí. Después de entablar una conversación con ella ,bailamos, la cercanía de su cuerpo con el mío provocaba vibraciones y sentimientos que núnca había experimentado, y ahora ella llega como una desconocida y me siento perdido, me sorprendí aún mas cuando me dijo que nada de nombres, ¡esta chica si que es única!. Me gritó mi subconsciente. Sin duda fue la mejor noche de mi vida. Pero a la mañana siguiente no la encontré en la cama y ni en ningún lado del cuarto del hotel. Me maldije, núnca me habían dejado plantado a  mi, siempre era yo las que la dejaba desnudas en la cama y desaparecía, pero ella. Ella me dejó y lo único que dejó fue una nota en el velador que decía.

"Fue una noche perfecta, gracias por todo Principe del Antifaz"

             Tu Dama del Antifaz.

Al leer la nota, me senté frustrado en la cama, ¿cómo es posible que, quizás anoche conocí a la mujer de mi vida y la deje escapar así como si nada? Debería haber arrancado ese antifaz de su rostro y besarle con dulsura el rostro que se encondía detrás el. Pero no, ya era tarde, se fué y no le vi el rostro ni me dejó su número, nada. Ahora he vuelto mi oficina en Córdoba, mi hogar y no sé si me la volveré a encontrar.

Samuel mi hermano me ofrece una botella de agua después de jugar baloncesto los dos solos como lo hacemos todos los sábados.

-Mamá esta muy preocupada por tí Alex- me dice y lo miro con confusión- Estas adicto al trabajo y y no tienes ninguna relación seria, núnca le has presentado ni una chica a mamá y ya tienes 27 años, si yo no te conociera diría que eres gay-rie, lo fulmino con la mirada- No molestes- le digo. Mi familia siempre me dicen que nunca me tomo un tiempo para pasarla bien, ya que siempre estoy trabajando, pero no sé que me pasa, creo que me he vuelto adicto al trabajo y con respecto a las chicas, solo  son por una noche, habeces me tomo el tiempo de ir a bares y ligarme a chicas, pero no es nada serio, aunque una vez traté de tener una relación pero era una loca, su nombre era Susana y no, no funcionó era una loca celosa psicópata y la dejé, después de eso nada serio .Esa noche de año nuevo seguí a la chica porque me sentía solo y además porque era muy hermosa.

-Samuel sabes que las relaciones no son lo mío, ¿te acuerdas lo que pasó con Susana?- le digo, mi hermano frunce el ceño en desaprovación- Pero no todas las mujeres son unas brujas locas- me dice- mira a Miranda, es una princesa- dice refiriendose a su esposa- Si tienes razón ya es tiempo de centar cabeza,y darme una oportunidad-digo y  la verdad es que me siento solo y no es mentira- Es un gusto escucharte hablar así- me dice dandome una fuerte palmada en la espalda- y ahora me retiro porque  si no Miranda me castra por no ayudarla a cambiar pañales- me río- ¿Donde quedó lo de princesa?- me burlo- Ten un poco de respeto hacia tu hermano Alex que lo voy a castrar- me interrumpe Miranda mi cuñada entregandome al pequeño Joe de apenas unos meses, y ella se dirije a Samuel y le da un beso en los labios con ternura, ojalàs yo tuviera algo parecido, Me digo a mi mismo, y persivo el olor a mierda que viene del bebé.

-Umm..papis creo que su hijo se pudrió- les digo al par de tortolos y rien, Sam me quita al niño y  le dice- Mas vale que te cambie Joe porque si no el tío Alex se va a poner verde del olor- y es verdad, no sé como pueden aguantar el olor, ambos se ríen por mi expresion y me invitan a entrar a la casa.

Después de la tarde que pasé en casa de Sam y Miranda me dirijo en mi auto a mi departamento. Al llegar veo solo el departamento, esta en silencio total, prendo la tele, me desvisto y me ducho. Me acuesto y otra vez viene a mis pensamientos la chica del antifaz, ya ha pasado un mes y aún sigo soñando con ella. Pero mejor me dejo de tonteras y trato de sacarla de mi mente, pero no puedo y me quedo dormido.