prólogo

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Aquí comienzan los recordatorios que me hacen bien leer.
Escribo este mini libro (si se puede llamar así) porque siempre me caigo, insisto, SIEMPRE, pero es algo completamente normal, a todos nos pasa una y mil veces, pero podemos aprender de cada mega caída, de no ser por esto viviríamos todos los días tristes, sentados (o en cualquier lado) esperando la innecesaria desgracia monumental.
¿No es mejor ignorar las weás feas y comenzar a vivir? Después de todo, la vida pasa igual. ¿Qué tanto lo que piensen los demás? Es nuestra vida y nosotros hacemos lo que queramos con ella, el único objetivo es sacarle el mayor provecho.
Si ya estamos aquí, hagámoslo no más!.

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