未来日記 | Diario Del Futuro | 𝙺𝚒𝚕𝚕𝚞𝚐𝚘𝚗

𝙳𝚒𝚊𝚛𝚒𝚘 𝙳𝚎𝚕 𝙵𝚞𝚝𝚞𝚛𝚘 - 契約違反 2/2

Esta será la primera vez que escriba un "lemon" por eso mismo pido disculpas si es muy corto, tardé tanto en actualizar por esta razón, mi objetivo es que disfruten la escena.
Ya aclarado eso no les interrumpo la lectura.

- La autora 🍒

Luego de eso ambos entraron a la habitación, cerrando así la puerta detrás de ellos.
Ni siquiera habían llegado hasta el futón y el peliblanco ya había tomado desde su cintura al moreno algo desesperado pero sin llegar a ser agresivo, tras eso no pudo evitar tocar esos labios tan dulces y suaves, se besaban de una forma dulce que poco a poco se fue transformando en un beso apasionado en el que sus lenguas batallaban por dominar al otro, entre tantos besos al moreno se le caía un poco de  saliva de la comisura de sus labios.

Mientras se comían a besos se acercaban al futón, cuando llegaron el moreno se quedó de rodillas sobre este dando paso a una separación en sus bocas, dándole así tiempo para respirar al más pequeño.
El peliblanco recostó al moreno en el futón y este se colocó encima de él, poniendo sus brazos a la par de su cabeza.

Gon: Killua, yo sigo teniendo algo de miedo...

Killua: No te preocupes Gon-chan, solo déjate llevar. -dijo para luego ir repartiendo pequeños besos en el cuello del contrario-

Gon: Ah... Killua. -gemía por lo bajo-

El peliblanco repartía besos por todo el cuerpo del chico, descendiendo desde su cuello hasta llegar a sus pezones, antes de jugar con ellos se relamió los labios.
Acto seguido quitó todas las prendas que el chico llevase y procedió a chupar uno de ellos mientras que el faltante lo estimulaba con una de sus manos.
Estas acciones hicieron que Gon no parase de gemir en un alto tono de voz, los sonidos húmedos que causaba la lengua del peliblanco contra esa parte de cuerpo y el deleite de sensaciones que eso provocaban le estaban volviendo loco, no solo a él sino que a su pareja también.

Gon: Ah, Ah... K-Killua, eres como un bebé... -dijo entre gemidos-

El peliblanco escuchó eso y no pudo evitar besar otra vez al moreno pero en esta ocasión de una manera tierna.

El albino prosiguió con su trabajo, dejó de lado los ahora rojizos e hinchados pezones del menor para llegar hasta sus muslos en los que comenzó a dejar marcas de mordidas y subió lentamente hasta dar con la virgen entrada del moreno.

Killua: Gon, voy a prepararte, sin embargo puede que esto te duela un poco. -dijo para luego ponerse en medio de las piernas del más pequeño y separarlas- Si el dolor es muy intenso dímelo y me detendré.

Gon: Mh. -dijo como afirmación-

Recibiendo el permiso del moreno acercó su mano a la cara del pequeño, pero él no entendía a que se refería con ese gesto.

Killua: Lámelos. -dijo con cierto tono autoritario- 

 Gon simplemente fue sumiso ante esas ordenes, haciendo lo que se le pidió. Lamía de una forma obscena y viciosa los largos dedos del albino, cubriéndolos de saliva en su totalidad. El peliblanco solo se concentró en disfrutar la maravillosa vista que tenía en frente, hasta que no sintió sus dedos realmente húmedos no los sacó de la cavidad bucal del moreno, cuando sucedió retiró sus dedos e introdujo de forma lenta uno de ellos en el recto del pequeño causando así que este arqueara su espalda y pegase un pequeño gemido de dolor.

Killua: ¿Duele mucho? si quieres me puedo detener. -decía preocupado-

Gon: N-No... duele per-ro... no tanto, por favor no te detengas. -demandaba el menor jadeante y con unas cuantas lágrimas acumuladas en sus ojos-