Capítulo 36

1K 98 25
                                    

Al día siguiente.

Me había despertado, sentí un gran peso encima mio al darme cuenta era Segismundo abrazandome, estaba dormido y se veia demasiado tierno yo me acomodé bien y empecé acariciar su cabello y jugar con el entre mis dedos mientras lo miraba dormir, realmente lo extrañe mucho. Me levanté de a poco para no despertarlo y salí de mi habitación dirigiéndome al baño, me di un buen baño por que de verdad lo necesitaba, luego me cambie de ropa y baje a la cocina casualmente mi padre estaba allí con su café.

Te encuentras mejor? -pregunto al verme-

No lo se...-contesté y me senté a su lado-

Tranquila todo va a salir bien, ya lo veras -dijo animandome-

Cuando eso pase sera demasiado tarde -dije-

No lo creo, eh vuelto al cni -dijo en voz baja- además Gustabo y Horacio nos ayudaran más Segismundo dijo que su jefe tononino puede darme información que pueda interesarme así que podemos trabajar ahora.

Bien me parece perfecto, ahora solo espero que no estén siguiendo nuestros pasos por que si se enteran de que Gustabo y Horacio son maderos los van a matar....-dije-

Eso no pasará tranquila, si llegara a pasarles algo hago de esta ciudad un puto infierno, llamare a los putos militares si hace falta -decía- tenemos que mantenernos fuertes.

-sonreí un poco- como te importan tanto, te entiendo tambien pienso igual.

Y dime como esta tu novio? -pregunto-

Pues...durmiendo...-conteste sirviendome un poco de café-

Vaya sigue durmiendo mientras tu estas aquí, que espera? el desayuno en la cama? dile que despierte y que se vaya a tomar por culo a su casa -dijo-

Oye papá no seas así joder, dejalo descansar el pobre debe de estar muy mal como yo...después de mucho tiempo nos volvemos a ver.

Joder -se quejo y se levantó- creo que ya puedes venir a trabajar o como tu quieras.

Bueno esta bien papá no te preocupes -contesté-

Mi padre se fue a su trabajo mientras yo preparé el desayuno para Segismundo y para mi pero mientras lo preparaba sentí como unos brazos rodearon mi cintura y me abrazaban por detrás.

Buenos días -dijo con esa voz acabado de despertar eso me mato por dentro-

Buenos días pequeño dormilón -sonreí- lavate la cara el desayuno está casi listo.

No tenías por qué a verte molestado te hubiera ayudado -contesto-

Tranquilo estás en mi casa eres mi invitado y yo debo de tratarte como tal -dije-

Solo un invitado?...-dijo con esa voz triste-

-reí- oye es la segunda vez que vienes a mi casa pero sabes que eres más que eso -conteste-

esta bien -dio un beso en mi cuello- vuelvo ahora.

Mientras Segismundo fue al baño a lavarse la cara y demás, serví el desayuno para los dos, me senté en la mesa y lo esperé pero mientras me puse a pensar que podría hacer hoy, los chicos por su parte nos están ayudando pero yo por otro lado no sé que hacer...tal vez pueda ayudar a Gustabo y Horacio, o ayudar a Segismundo no lo sé.

Vaya cocinas muy bien, creo que vendré cada mañana para verte y comer junto a ti -decía sonriéndome-

-me sonroje un poco- bueno si quieres por mi no hay problema -sonreí-

Y tambien nos acostumbramos para en un futuro vivir juntos -me guiño un ojo-

-me atragante un poco- como!?

Mi nueva vida en los Santos (Gta v Roleplay) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora