Epifanía

capitulo 2

No podía creer todo lo que estaba pasando. No podía creer que esto este pasandome.

Me sentía vacía, sin ningún tipo de vida. No recordaba nada de mi, ni de mi vida pasada.

Lo peor? Que tenía a un licantropo justo enfrente de mi. Si, un licantropo.

Yo, que creí que esas cosas no existían... O tal vez pensaba lo contrario antes de perder la memoria...? No lo sé, no podía saberlo pero escuchaba atentamente al chico de los ojos ámbar.

No paraba de repetirme que esto era un mal sueño, pero todas las veces que me pellizque dolieron.

Tenía que encontrar la forma de encontrarme. De poder saber que es lo que me llevo a ese bosque, por que no recuerdo nada y saber de mi pasado. No podía pensar siquiera en si tenía una madre, un padre o hermanos. Nada me venía a la mente.

Tenía que haber una forma de solucionar esto...

-Antes de que te vuelvas loca, tienes que saber que no voy a hacerte daño. Si te salve fue por que no quiero lastimarte- sus ojos se veían sinceros. Seguíamos en la cocina, yo sentada en un banquito y el apoyado en la encimera. Su postura revelaba que estaba relajado, índice de que no tenía intenciones de lastimarme.

-Como es que los lobos existen...? Yo...no entiendo. No logró entender. Abro los ojos y lo primero que ven mis ojos es un enorme lobo negro y ahora vienes y me dices que ese lobo eres tú...- le digo mientras me rio sin una pizca de gracia- como esperas que crea eso? !Sin siquiera ponerme a pensar que estoy volviéndone loca!- mis ojos buscan los suyos. El pánico es evidente en mi voz.

-Tranquilizate, prometo que todo tendrá sentido- me dice tratando de aligerar el ambiente. Se pasa una mano por el pelo, frustrado- Esto es difícil... quiero ayudarte. Hay algo en ti... Nose que es, pero siento que es importante.

-Como que hay algo en mi? Que quieres decir?- le digo, sin dejar de mirarlo.

Se mueve hasta que está muy cerca de mi. Y lo que hace a continuación me deja helada y con el aire atascado en la garganta. El corazón se me acelera y nose por que. Su cercanía me deja estática en mi lugar.

Su nariz va directo a mi cuello, como si quisiera saber a qué huelo.

Va subiendo hasta llegar a mi mandíbula y se detiene.

-hueles extraño... como si no pudiera descifrar que eres... Es extraño, nunca me había pasado.- Dice, y sigue cerca, muy cerca. Sus ojos van a los míos- Debemos buscar ayuda, no podremos solos.

Se aparta y va directo a la puerta pero antes de que ponga un pie fuera le digo:

-A que te refieres con que hay algo extraño en mi? Pasa algo conmigo?- esta de espalda así que no puedo verle la cara, pero lentamente se da vuelta y me mira.

Lo que veo no me gusta nada. Hay algo raro en su mirada.

Entrecierra un poco los ojos antes de decir.

-No lo sé... Pero se que no eres del todo humana, pero es imposible que seas...- Se calla de pronto como si estuviese buscando respuestas en si cabeza- Olvidalo... voy a prepararme, saldremos. Hay ropa en el armario, vístete.

Y así sin más sale de la cocina y yo me quedo pensando en su respuesta.

¿Qué hay de extraño en mi? ¿Y como es eso de que no soy del todo humana ?

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Ya en la habitación me doy el lujo de inspeccionar todo más profundo.

Hay otra puerta dentro de la habitación, así que me apresuro y voy directo hacía allí.