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Theo

Abey me miraba demandando una respuesta a mi cara sorpresiva en cuanto vi el papelito, le borraron algunas palabras, pero claramente lo reconozco. El papel decía:

"En el día en que tengo temor, yo en ti confió. En ----, en cuya palabra ----, en ----- he confiado ¡No temeré lo que me pueda hacer el hombre mortal!"

Mi sorpresa era de esperarse porque ella tenía justamente uno de mis pasajes favoritos de mi biblia. La vida da demasiadas vueltas.

⸺Este versículo... vaya⸺ dije por la sorpresa. Pero no quiero hablarle de Dios en estos momentos. Si no cuando ella quiera y esté lista para hablarlo.

⸺Si, es mi lectura favorita y estoy curiosa por saber cuáles son las palabras faltantes, para completarlo y hacer de ese texto mucho más especial ⸺dijo con ilusión, pero se calló de repente, con vergüenza ⸺Es algo tonto, lo sé.

⸺No, no es tonto que te guste leer, al contrario, te admiro. Yo soy pésimo con la lectura ⸺Me reí ¿En serio te gusta bastante leer?

Ella asintió firme y decidida. Se dé algo que le gustará.

⸺Ven ⸺Tome su mano y la guie hasta la otra habitación, en donde hacia las tareas y estudiaba.

Abrí la habitación y la guie hasta mi biblioteca personal, que era una estantería completa empieza desde la pared izquierda hasta el final de esta. En estos dos años libro que veía, libro que ya tuviera lugar en la biblioteca. Los he leído todos, pero luego llego la universidad y perdí el interés en leerlos de nuevo, salvo algunos libros que si me interesan. Sus ojos se abrieron a la par y su sorpresa no se hizo esperar, estaba ¿feliz? ¿Desde cuándo las chicas están tan felices con los libros?

⸺No puedo creerlo ⸺Balbuceo ¡Tienes una mina de oro aquí! ⸺Exclamo feliz.

Eso si no me lo esperaba. Ella siguió hablando.

⸺Siempre soñé desde niña con una habitación así, el primer lugar a donde fui cuando me escape fue en una biblioteca ⸺hablo rápidamente mientras no se daba cuenta de lo que hablaba, al final cerro la boca y su timidez surgió. Pero mi curiosidad salió a flote.

⸺ ¿De dónde te escapaste Abey?

⸺De...⸺Su voz estaba quebradiza de repente y bajo su cabeza⸺ de un prostíbulo.

Eso en verdad no me lo esperaba. Ella empezó a sollozar y la abrace. ¿Cómo llego ahí? ¿Qué habrá pasado? Por lo visto fue obligada... pero ¿Cómo?

⸺Hey, tranquila. Si quieres llorar, llora. No te juzgare por eso. Si no te sientes cómoda después hablamos de eso.

⸺No, me desahogaré si no te importa ⸺dijo dolida.

Asentí mirándola a los ojos, nos sentamos en la cama y la escuché atentamente.

⸺Desde pequeña, mi mamá siempre hacia muecas de desagrado y expresaba su odio hacia mí. Pero pensé que era porque yo hacía algo malo y trataba de agradarle siempre. Me sentía sola cada día de mi vida y me refugiaba en los libros. Ese era mi escape. Ella me maltrataba sin razón y yo nunca supe por qué.

Ella tomo un respiro, se secó las lágrimas y siguió hablando.

⸺Cuando cumplí los 10 años, ella me vendió a un prostíbulo, yo no sabía que era eso. Se excusó con la idea de que me iba a mandar para un instituto de prestigio, más nunca regreso. En ese lugar, me revendieron a un señor millonario, solo estaba reservada para él, decía. Me amarraron con esposas para que no intente escapar, lo había intentado mucho en ese entonces. Perdí mi inocencia y dignidad en ese lugar. Lo aborrecí para siempre.

Estoy sumamente impresionado con lo que acabo de escuchar ¿Cómo era posible tanta maldad en una persona? La rabia me invadió de momento, pero ella prosiguió hablando.

⸺Ese señor quería cumplir siempre sus más oscuros deseos, me usaba como títere enjaulado y hacia lo que quería conmigo. Hasta un día, en que me di cuenta que sin astucia e inteligencia no salía de ahí. Robé un cuchillo y lo maté, no solo a él, sino a todo el que se cruzó en el camino. Recurrí hasta una biblioteca para que me dieran refugio temporal, mas nadie quiso ayudarme debido a mi vestimenta. Por 5 años anduve vagabunda en estas calles frías y oscuras, eran pocas las veces en que comía, recibía un merecido baño o descanso. Pero era mucho mejor que volver al lugar donde nací.

Sus lágrimas no tardaron en salir, yo estaba en shock. Mi coraje estaba en los cielos y las ganas de ahorcar a esa señora sobraban. ¿Por qué? ¡Ella no merecía esto! La abrace fuerte mientras ella lloraba desconsolada sobre mi hombro.

⸺Estarás aquí todo el tiempo que necesites, te cuidaré como si de mí se tratase. Aquí estarás bien Abey. Con Dios trataré de sanar tus heridas.

//

Ya era la noche, había cocinado extra para mañana, siempre recalentaba para no cocinar los lunes, que eran los días más pesados para mí. Abey se durmió, está descansando de un día lleno de emociones que tuvo. Después de orar a Dios pidiendo por Abey, me acuesto en mi cama mirando al techo.

⸺Tantas personas sufriendo⸺ Murmuré⸺ Y no nos damos cuenta de nada.

Con este pensamiento, me sumergí en un profundo sueño.

//

Me levante rapidísimo, estaba tarde para la universidad, otra vez. Deje un pequeño mensaje en la mesa para Abey para cuando despierte y mi Tablet por si quiere entretenerse. Voy corriendo hasta llegar a la universidad y tomo aire al llegar a la puerta del aula.

⸺Buenos días ⸺siento la voz de mi profesor ⸺que puntual es usted, señor Rodríguez.

⸺Buenos días profesor ⸺me reí nervioso. Este será un largo día.

En cuanto me senté, el examen comenzó. Estaba un poco difícil, pero logré terminarlo a tiempo. Nos dieron el resto del día libre y por hoy, no hubo tanta tarea, por fin. Saludé a Lenis y compartí un momento con ella, pero me fui temprano, tengo una chica a la cual cuidar. Llegué rápido a la casa y encontré todo en orden.

Uff, ya me estaba preocupando.

Abey estaba comiendo el recalentado mientras estaba leyendo un libro, vaya, eso me sorprendió. Pero es...

Es mi biblia...

Ella se dio cuenta de mi presencia y me sonrió.

⸺No te preocupes, estoy bien ⸺Dijo.

7 Segundos En El CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora