La hija de la muerte

Cap 21.

.- SAM-. Entro Tony preocupado.
.- T-tony? -. Me levanté y me abrazo .- Que sucede-.
.- Lo ví, tu sueño estás bien?-.
.- pues acabo de averiguar qué la angel esa me sigue jodiendo aún así este muerta-. Me levanté con pesadez.
.- A dónde?-. Pregunto con el seño fruncido.
.- A dónde crees William-. Pronuncie y este comenzó a caminar hacia mí.
.- No creas que te dejare ir-. Sus ojos se volvieron negros.
.- No tengo tiempo para esto, perro-. Vi como sus ojos volvían a la normalidad.

Me tomo por sorpresa cuando se lanzó sobre mi, besándome, y volviendo a ponerme sobre la.cama, patalee todo lo que pude, pero al final el perro me había encadenado (quien sabe cómo chingados) a la cabecera de la cama.

.- Tony! Suéltame maldición-. Jale las cadenas pero estás lo me hacían daño.
.- No-. Dijo en seco.

Podía ver en su rostro que nada de lo que hiciera haría que cambiará de opinión, su piel morena y sus ojos brillaban de cierta manera.

.- Porque no-. Dije sentandome.
.- Mierda no me digas que me harás explicarte algo tan sencillo-. Solo me encongi de hombros.
.- Que quieres que te diga, no leo mentes-.
.- Ahg, okey-. Se sentó a mi lado.- haz progresado mucho en los últimos años, Sócrates a crecido y ahora te necesita-.
.- Como podría necesitar de mi ayuda-.
.- No lo sé, tal vez su primera cita, o cuando te pida consejos sobre algo-. Tomo mi mentón.- eres su madre, porque no habría de necesitarte-.

Tenía razón, pero si debía arriesgarme para ver esos momentos, entonces lo haría.

.- Lamento ser tan incoherente-. Dije fingiendo lamentarme.
.- Ya no importa-.
.- Puedo pedirte algo?-.
.- Claro-.
.- Me besarias de nuevo?-.