La semana en las islas había sido increíble, Harry sabia como tener equilibrio entre el trabajo y el tiempo para mi... pero por desgracia era hora de volver a casa ya todas mis cosas estaban en la gran casa de Harry así que era oficial que vivíamos juntos. Me había atrasado una semana en la universidad así que en cuanto llegara a casa me prepararía para el siguiente día y no perderme de más.
–Harry! – grite desde la puerta, él estaba descargando las maletas del auto y me miro.
–Qué? – pregunto con el ceño fruncido.
–la casa está muy limpia y ordenada– dije sorprendida. Jamás había visto la casa tan limpia.
–y que esperabas?, ¿un desastre? – rio y entro con las maletas. –siempre que me voy de viaje contrato un equipo de limpieza– se explicó. –lo que me recuerda, todas tus cosas están arregladas y acomodadas en mi habitación porque creí que... ya sabes– dijo haciendo gestos con las manos.
–es nuestra habitación ahora? – sonreí y subí las escaleras para ver la habitación.
–sí, eso exactamente– dijo y luego murmuro algo inexplicable. La habitación seguía igual pero ahora todas mis cosas parecían pertenecer al. – Maddie_– me llamo Harry desde el pasillo.
–dime– le sonreí y caminé hasta a Él. me tomo de la mano y me llevo hasta la que era una habitación fuera de uso.
–abre la puerta– dijo animándome. La abrí y en vez de la habitación vacía había un estudio: un escritorio grande, una silla de cuero blanca, una computadora, una minibiblioteca con mis libros y otros clásicos, y al frente a la ventana uno de esos largos sillones de cuero. – es solo para ti– dijo apoyado en el marco de la puerta, mientras yo exploraba.
–Harry esto es muy lindo de tu parte– lo mire sin saber que más decir.
–todo para ti– dijo y se acercó a besarme, allí en medio de mi nuevo estudio.
***
Harry se pasó la tarde viendo el futbol con Louis quien había llegado hace menos de una hora, mientras yo me ponía al día con las actividades universitarias en el estudio allí tenia de todo para estudiar y trabajar por horas.
–okey, necesito un poco de aire– me dije a mi misma, y un pote de helado me vino a la mente. La heladería no estaba tan lejos quizás podría ir caminando. Me puse unas sandalias y bajé las escaleras.
–vas a salir amor? – pregunto Harry y no me había dado cuenta de que seguía cada uno de mis movimientos con la mirada. Tome las llaves y mi billetera.
–sí, voy a comprar helado– le sonreí. – no me tardo–.
–espera, te voy a llevar– dijo levantándose del sofá.
–Harry no te preocupes, está cerca– dije abriendo la puerta. El me miro preocupado.
–estas seguras? – pregunto y en su mente había una guerra entre ir o no ir.
–bastante– le asegure, y tire un beso al aire antes de salir.
Me sentí extraña mientras caminaba, el sol se sentía diferente. Este no me quemaba la piel como en el caribe. Camine cuesta abajo hasta pasar por Barneys y una calle más abajo estaba la heladería.
–un pote de chocolate y otro de fresa– le dije a la señora que me miraba sonriente.
–aquí tiene– me dijo luego de unos minutos. Le di el dinero y caminé hasta la puerta, pero en cuanto la abrí alguien topo conmigo. – lo sient.... Ian? – pregunte sorprendida al verlo allí, frente a mí.
–Maddie_– dijo en un susurro. Se miraba muy maduro, unos meses y todo cambia. – lo siento mucho– dijo tomando mi muñeca.
–no te preocupes– le dije intentando sonar como si nada pasara. ¿hablábamos del golpe al abrir la puerta? ¿no?
–me refiero a todo, no debía actuar así aquel día– me miro a los ojos y se miraba arrepentido. Ian fue directo, como si se hubiese preparado por meses para este momento.
–creo que soy yo la que tiene que disculparse– dije y baje la mirada, el había sido tan bueno y yo solo lo arruine.
–no, no tranquila– me sonrió. – quieres ir a... caminar por un rato? – pregunto sin quitar aquella sonrisa.
–me encantaría– respondí y salimos de la heladería. Le debía esto a Ian, se que en el calor del momento todo fue muy horrible, y estaba dispuesta a responder sus preguntas.
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Casada con el señor arrogante ORIGINAL
Roman d'amourSegunda parte de: 100 días con el señor arrogante. Novelas completas disponibles en DREAME