1-La Academia

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Decir que él estaba nervioso es decir poco. Miraba cada cierto tiempo a los lados de la calle para ver si alguna fanática o psicópata lo seguía. Iba hacía la Academia de Konoha, más nervioso que universitario en días de exámen.

«Bien, ahora tienes que actuar como un emo sensible homosexual, ¡oh! No tengo que olvidar lo vengador. Si... Uhg, me quiero morir» bufó pateando una piedra. Tenía su banda en el cuello, tipo Hinata, pero no tan inútil. Traía su típica ropa que usaba desde hacía 2 años, yendo a por su nuevo equipo que por supuesto no sabía quienes iban a hacer, claro que no sabía que iban a ser Naruto Uzumaki y Sakura Haruno, noo, claro que no...

Es obvio sarcasmo. Sabía desde que pisó afuera de su casa que le iban a tocar esos dos chicos. Suspiró, cerrando sus ojos, cansado. No había dormido nada pensando en qué chucha hacer de su vida en ese momento. Estaba entrando en un pánico continuo pensando si hacer lo que iba a hacer Sasuke o él.

Hablando un poco de él, tenía 22 años realmente, no 12 como tenía ese cuerpo. Iba en el cuarto año de universidad en Santiago de Chile, tenía una hermana menor y un hermano mayor. Era el regalón de su familia, específicamente de su hermano mayor y su madre, y era un miedo enorme el que sentía estar ahí, solo.

«Virgencita de Guadalupe, si usted realmente existe, prometo que me haré cristiano de voto, te lo juro por Dieguito Maradona» pensó rezando, poniendo sus manos en señal de rezo «Por favor que nadie me chingue ni se me compliquen las cosas» besó sus dedos «Amén» en ese mismo instante cayó una rosa roja delante suyo.

Se quedó mirando la rosa, perplejo. Lo dijo por mame, no pensó que funcionaría. Miró para todos lados, en busca de algo, pero no había nadie. Abrió y cerró la boca, sin saber que decir. Miró la rosa fijamente, hasta que saltó.

-¡NO MAMES! -chilló. Se sentó en la tierra sin creerse nada. Pero claro, las cosas nunca salen como uno quiere.

-¡Para ti, Sasuke-kun! -miró arriba, estaba una chica de relleno en un balcón, con otras tres rosas rojas en sus manos. Puso una cara de culo, pero no tiró la rosa, no era mal educado.

-Oye, casi me morí del susto. Si me vas a dar flores, que no sea así -«Puta la weá, me la creí no mames» pensó con molestia. De verdad creyó que la Virgencita le había tirado la rosa, pero claro, no existía.

(...)

-Mátenme -murmuró sin que nadie lo escuche. Solo habían gritos y gritos de miles y miles (según él) de chicas que chillaban que se iban a sentar con Sasuke, sin pensar en qué quería el mismo. Frunció el ceño a más no poder, y ya hasta la madre, se paró en la mesa, llamando la atención de todos.

»¡YA CALLENSE! -las sasutards se quedaron calladas, su patrón se los había ordenado, su gran líder y la razón de su delirio -. ¡Todo el día gritando y gritando «Sasuke-kun, Sasuke-kun»! ¡No me gusta nadie, ¿ok?! ¡Si estoy sentado aquí, SOLO, es porque quiero estar SOLO! ¡No quiero que me acosen así, paren todo su, su...! ¡Su fanatismo! -todo era silencio.

-Oigan sí, nos tienen hartos con su Sasuke-kun, ¿no saben decir más de 2 palabras o qué? -le siguió Kiba, apoyando a "Sasuke". Otros chicos murmuraron entre ellos, apoyando a Sasuke y que lo dejasen en paz.

-¡Sakura-chan, yo si te quiero! -saltó Naruto inmediatamente, corriendo hacia la pelirrosa. «Asco wey» pensó Sasuke, mirando con un poco de asco el que Naruto gustase de Sakura en su estado más inútil e insoportable.

Pero lo más raro de ese momento, fue que cada sasutard se fue disculpando con Sasuke, dejándolo sin palabras. «Lo logró señor» le dijo su amigo imaginario «Lo... ¿Lo logré?» es fácil deducir que él vivía de los memes.

Al final se terminó sentando con Shikamaru, y al lado izquierdo del Nara estaba Ino, quién estaba muy avergonzada de haber actuado como una niña cuando tenía 12. Chouji estaba delante de él, y atrás suyo estaban Hinata, Kiba y Shino. Sakura y Naruto se sentaron juntos, junto a una chica de relleno.

(...)

-Equipo 7 -llegó su hora -; Naruto Uzumaki, Sakura Haruno -Naruto se emocionó, saltando, mientras que Sakura se deprimió -, y Sasuke Uchiha -Naruto no hizo ninguna cara, la nueva actitud de Sasuke le había caído bien, mientras que Sakura saltó emocionada, sacándole la lengua a Ino.

«Pendeja» pensó Sasuke. Sakura pudo haber sido mejor... Pero no. Ella había aceptado ser la fanática loca obsesiva de un chico que en su vida le haría caso. «¡Perdiste tu oportunidad bandido!» pensó, al ver que Sakura le hacía unos guiños.

Se frotó los ojos, queriendo dormir. Realmente le afectó el no dormir. «Una siestecita no te hace mal a nadie» pensó, cerrando sus ojos y apoyando su cabeza en su mano, poniendo el codo en la mesa. Al cabo de unos segundos durmió profundamente, soñando que era un zapato.

-No pues, salmón -habló dormido. Estaba, sin saberlo, a la atenta vista de Sakura y Naruto. Iruka-sensei no lo quiso despertar, ya que, después de todo, era su alumno estrella.

-Lo que dice no tiene sentido dattebayo -mencionó Naruto, poniendo sus manos detrás de la cabeza -. Ni puis silmín -imitó. Sakura lo miró mal.

-Tu cállate. Sasuke-kun está durmiendo imbécil -devolvió su mirada hacia "el amor de su vida", para ella, todo lo que decía Sasuke era arte -. Tu no entiendes que él es humano y puede hablar dormido todo lo que quiera -se cruzó de brazos, poniendo una posa de sabionda.

-No deja de ser estúpido -habló por lo bajo, pero Sakura lo escuchó. Le dirigió una mirada venenosa, haciendo salir de ella un aura maligna. Naruto temió por su vida -. ¡E-era broma ttebayo! -dijo rápidamente, pero ya era muy tarde.

-¡¿COMO DIJISTE QUE SASUKE-KUN ES ESTÚPIDO?! ¡TU ERES EL ESTÚPIDO, TOOONTOOO! -le pegó un puñetazo en la cabeza, dejándolo con un chichón enorme en la cabeza.

-Mmmhpm -murmuró Sasuke entre sueños, casi despertando. Sakura se tapó la boca, avergonzada, y se lanzó denuevo a observar a Sasuke dormir. «Que miedo...» pensó Naruto al verla así de acosadora.

«¡Voy a despertarlo! ¡Hasta dormido me roba la atención de Sakura!» apretó su puño muy enojado. Agarró un vaso de agua que había en el escritorio, y, aunque sabía que Sasuke se iba a enojar, se lo lanzó.

-¡AAA! -Sasuke se levantó de una, empapado, y molesto, claramente -. Bueno, si me quieres agarrar a puñetazos, despiertame mejor -tronó sus manos para luego saltar hacia Naruto y pegarle. No le gustaba despertar de mala manera.

Tampoco eran golpes feos. Eran manotazos en la cara y los brazos. Incluso Sasuke se rió cuando Naruto le dió un manotazo en el hombro. Era una pelea sana. No eran golpes feos. Pero para Sakura era un horror. Los agarró por los hombros, separándolos, pero al soltarlos, chocaron por la gravedad y....

-¡ASCO! -chillaron ambos. Al parecer, ese beso era inevitable.

-¿les gustó el cambio? A mi si ^^-

¡El beso sasunaru es inevitable! ¿Como será su encuentro con Kakashi? ¿Sakura dejará de ser tan obsesiva? ¡Leanlo más adelante!

En el cuerpo de Sasuke [Yaoi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora