4. Tristeza

4.1K 249 5
                                    

-¿Mauricio?-.

-Lucy ¿estás bien?-.

-Estoy bien ¿Qué necesitas? Tengo prisa luego platicamos-.

-Tanto te afecto lo que dijo Fernando.
Eres consciente de que tal vez seas tú quien ocupé su corazón-.

-Lo dudo mucho Mauricio-.

-Piénsalo por una vez, dijo que la persona que le gusta estudia en la misma universidad y la misma carrera, ¡puedes ser tu Lucy!-.

-Eso no prueba nada, muchas chicas de la facultad de medicina admiran a Fernando y son muy guapas-.

-Tu también eres muy hermosa Lucy, solo que tu no te valoras a ti misma. Tienes unos ojos color miel preciosos. Cualquier hombre estaría feliz de tener una dulce novia como tú-.

-Lo dices porque eres mi amigo y me aprecias-.

-Lucy, sabes que soy muy honesto, no miento, si yo tuviera una novia como tu seria sumamente feliz-.

-Me da tristeza saber que no tengo ninguna oportunidad con él-.

-Lucy, es ahora o nunca, agarra valor y dile lo que sientes o después será demasiado tarde ¿Acaso no es Fernando el gran amor de tu vida? ¿No estás dispuesta a luchar por su amor?-.

-Por amor a él estoy dispuesta a todo, pero no es fácil expresarle mis sentimientos, tengo miedo al rechazo-.

-Yo te ayudo, podemos crear la oportunidad perfecta para que puedas platicar a solas con él-.

-¿Cómo?-.

-Mira yo acabo de rentar un departamento cerca de la universidad, actualmente ya no vivo con mis padres. Puedo citar a Fernando en mi departamento y cuando tu llegues ahí, me voy para darles su espacio. En ese momento aprovecha para hablar a solas con él. Mira si hablas con él en una cafetería o en la universidad puede que alguien llegue y los interrumpa-.

-No lo sé Mauricio-.

-Animo Lucy, ya no le des más vueltas o a futuro te vas a arrepentir-.

-Tienes razón, tengo que tomar valor, esta es mi oportunidad-.

-Esa actitud me gusta, mira el sábado por la tarde voy a citar a Fernando, con el pretexto de que tengo que contarle que me paso estos tres años, casualmente vas a llegar tu y finjo que me están llamando por teléfono y voy de ahí-.

-Perfecto, dime ¿a qué hora llego?-.

-Que te parece a las 6pm-.

-Mandame tu dirección a mi teléfono-.

-Ya mismo te la envío-.

-Pues entonces te veo el sábado y muchas gracias Mauricio por apoyarme-.

-Para eso somos los amigos, verdad-.

-Gracias, tu también cuentas conmigo para lo que sea, me alegra en sigas siendo el mismo, no cambiaste en nada en todo este tiempo-.

-Ve a casa a descansar Lucy, recuerda pensar positivo y te veo pasado mañana-.

El sábado llego en un abrir y cerrar de ojos, me parece que este es el edificio donde vive Mauricio, aquí dice que vive en el cuarto piso número 407, pues yo creo que voy a tomar el elevador, soy mala subiendo escaleras, si de por sí estoy nerviosa, si subo las escaleras me voy a quedar sin aire. Aunque todavía es temprano.

Mauricio me dijo a las 6pm y falta media hora, tal vez espere afuera de su puerta y dando la hora toco. Mejor si subo por las escaleras y hago un poco más de tiempo.

Tengo que pensar muy bien lo que le voy a decir a Fernando, no quiero confusiones, tengo que ser clara.

Mientras subía lentamente los escalones me puse a pensar en las palabras de Mauricio, por un momento me ilusione imaginado que tal vez soy yo la persona de cual Fernando está enamorado. Tal vez no me ha confesado sus sentimientos por temor a arruinar nuestra amistad.

Llegue muy rápido al cuarto piso, ahora solo tengo que buscar el número 407.

(Se abre la puerta del ascensor)

Volteo y me doy cuenta que son Mauricio y Fernando. No puedo dejar que me vea Fernando, sino voy a arruinar el plan, creo que si bajo unos tres escalones ya no me alcanzan a ver.

-Ya dime la verdad Fernando, ¿es Lucy la chica que te gusta? Creo que tu y ella harían linda pareja-.

Acaso están hablando de mí. Esta conversación si me interesa.

-Pará nada Mauricio, yo quiero mucho a Lucy, la considero una de mis mejores amigas, siento un cariño muy especial por ella, la veo como a una hermana, no sé si me entiendes-.

-Me dices que para ti es como un miembro de tu familia. -

-¡Es correcto! Mejor no lo pudiste haber dicho Mauricio-.

Acaso dijo que me ve como una hermana, sentí como las lágrimas brotaban de mis ojos, no podía evitarlo, me ilusione en balde.
No tenía caso seguir con el plan, lo mejor era irme y guardar en mi corazón estos sentimientos que jamás iban a ser correspondidos.

Por Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora