-Joven Greek, su padre lo busca en su oficina- una mujer de tez morena y cabellera castaña abrió delicadamente la puerta encontrando a un joven de cabellera ceniza concentrado leyendo algunos papeles.
Hades alzó la vista bastante hastiado, no estaba de humor ese día, algunos papeles estaban fuera de lugar y había pasado toda la noche en vela tratando de arreglarlos
-Disculpe la interrupción, joven. Y...yo- había nerviosismo en la secretaria del magnate Cronos -Creo que...-
-¿Disculparse? ¿Por qué se disculparía por interrumpir mi trabajo? Después de todo Cronos la mandó- clavó su fría mirada en ella -¿Acaso mi padre cree que mi trabajo es menos importante? -
-No creo que se trate de eso, y...yo- la joven trataba de dar una explicación congruente a la situación
-Supongo que es tan importante que no se lo pudo decir directamente a mi secretaria- Hades se levantó de su asiento y se acercó peligrosamente a la joven -¿Cierto?- susurró cerca de sus labios y se alejó al notar el sonrojo de la secretaria -Supongo que ser la nueva trabajando debe ser un fastidio- se acomodó los anteojos mientras le dedicaba una mirada fría -Como sea, espero que vaya aprendiendo la dinámica de forma rápida. Odio la estupidez y la torpeza-
El platinado dirigió sus pasos hacia su escritorio y tomó asiento retomando su atención en los papeles que tenía
-Dígale a mi padre que iré en cuanto me desocupe. No estoy de humor para sus caprichos de CEO- respondió escueto mientras prendía un cigarro y le daba una calada -¿Sigues aquí?- alzó una ceja con confusión
-Y...yo- había incomodidad, aquel hombre de ojos esmeraldas realmente atemorizaba
-Sospecho que quieres realizar una pregunta- Hades meditó un poco la situación- seguro te estás preguntando cómo es que alguien como yo terminó con un golpe en la cara- señaló el labio partido y enrojecido debido a la frescura del golpe -Mi padre es un bastardo, ahora fuera- masculló y la secretaria salió sin decir más.
Hades dirigió su mirada al enorme ventanal mientras se sobaba las sienes, tenía que encontrar una forma de arreglar esos papeles antes de que terminara el día.
El sonido del teléfono lo sacó de su ardua concentración y de mala gana decidió tomar la llamada
-No sé quién seas, así que ¿Qué mierda quieres?- le dió otra calada al cigarro y hablaba tranquilamente
-¿Así es como le hablas a tu padre en estos días?- Cronos habló al otro lado de la línea
-¿Sigues esperando respeto de mi parte? Por mí, puedes irte al carajo- contestó con soberbia y burla
-Que sea la última vez que dices que vendrás cuando te desocupes. Te dí una orden- Cronos rugió con impaciencia- Ahora dirige tu actitud de mierda y tu persona hacia mi oficina ¡Ahora! - colgó
-Mierda- murmuró con frustración.
Se levantó de su asiento, se acomodó las mangas de la camisa azul marina y se abrochó los gemelos. Salió del oficina con el cigarro en la mano y se dirigió a la de su padre con pesadez.
Con algo de rudeza abrió la puerta y la cerró una vez que entró
-¿Tienes cosas más importantes que venir a ver a tu padre cuando te lo ordena?- Cronos no le había dirigido la mirada, pero había enojo en sus palabras
-De hecho sí ¿Qué tal unos papeles que están a punto de irse a la mierda si no hago algo? Dime... ¿Acaso no son importantes?- Hades lo miraba desafiante mientras se cruzaba de brazos
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Hades
Short Story-Ella será mía- unos ojos esmeralda brillaban peligrosamente a través de los cristales de sus anteojos. Aquel caballero de cabellos platinados observaba a una joven moverse armónicamente al sonido de la música, por primera vez sentía interés hacia a...