La hermandad //Karmaland// Rubegetta, Wigetta, Fargetta.

Capítulo 2:

Narrador omnisciente

El híbrido de búho se encontraba volando hacia la mansión de su amigo, se había cansado de escuchar las discusiones de los otros miembros sobre si el chico era culpable o no, así que hizo emerger sus grandes alas y salir disparado de ahí antes de que le salieran canas o se le cayeran las plumas.

Se encontraba distraído aun pensando en el tema sobre la identidad de lobo nocturno cuando algo le rozó la mejilla con rapidez, haciendo que en esa zona hubiese un pequeño rasguño. Se extrañó al principio, pero luego se dio cuenta que era una de las tantas torretas de Vegetta, no era la primera vez que casi lo llenan de agujeros.

Aunque podía entrar directamente a la mansión gracias a su habilidad de vuelo, decidió descender y tocar el timbre. Espero pacientemente, hasta que vio cómo descendía el chico de morado, el cual lucía algo cansado.

Fargan lo miro extrañado, pero se le vino una pregunta a la mente ¿Esta no es una señal de que no durmió en toda la noche por salir a dar un paseo algo ilegal? Eso lo hizo preocuparse, pues eso significaba que Willy tenía razón y que él era quien al final iba a causar que los descubran.

Su mente volvió a viajar en teorías y posibles finales, hasta que un pequeño golpe en su nariz lo hizo volver a la realidad. El de pelo en punta lo miraba algo confundido, pero luego solo una carcajada.

-¿Qué pasa chaval? ¿Te deje hipnotizado? No me impresiona, si fuera tú también hubiese caído a mis pies- El falso egocentrismo del chico salió a flote haciendo que el ambiente cambiara a uno más tranquilo, pero eso no significaba que la duda dejará de atormentar a Fargan ¿Realmente era él?

-Por favor, si el que está loco por el otro eres tu- Vio los ojos algo cansados de Vegetta y sonrió –Es más, te traigo tan loco que ni siquiera puedes dormir por pensar en mi sexy persona- Luego de eso las risas estallaron entre ambos amigos.

-Tu sí que apareces en mis sueños, pero más que eso son pesadillas- Mencionó Vegetta limpiando una pequeña lágrimas que escapaba de uno de sus ojos –Pero anda ¿A qué has venido Fargana?-

-Pues...- El híbrido comenzó a ponerse nervioso ¿A que había venido? No podía decirle que a comprobar si era Lobo Nocturno, así que pensó la idea más tonta y la soltó, total Vegetta se esperaba cualquier estupidez viniendo de él –Soñé que estabas herido y que casi morías, digamos que me levante algo preocupado y quería verte para comprobar que todo estuviese bien- Luego de soltar su gran historia comenzó a sonrojarse, era la escusa más estúpida que había llegado a dar. Pero le costaba mentirle, más si la mentira podía llegar a dañarlo emocionalmente, no era lo mismo que esconder que había destruido su puerta otra vez.

Vegetta lo miro por con los ojos abiertos para luego reír y abrazar cariñosamente al castaño.

-Es lo más tierno que me has dicho en mucho tiempo compañero- Mientras decía esto el pelinegro restregaba su mejilla contra el contrario el cual se encontraba como una estatua.

Okey, el de ojos morados se había creído su cuento, cosa que no se esperaba de alguien que mayormente se comporta como el líder del grupo. Delante de los aldeanos Vegetta era un guerrero muy habilidoso, un héroe de cuento de hadas, que monta un corcel blanco y porta brillante armadura. Pero en su grupo de amigos parecía más bien una madre que se preocupa mucho por sus niños.

-Bueno chaval ya que estas aquí y que has comprobado que estoy en perfecta condición ¿No quieres subir a hacer algo juntos? ¿Tal vez comer algo?- Eso despertó al búho de su sueño y asistiendo rápidamente ambos subieron a la gran isla.

Ya en la cima Fargan pudo ver como su amigo quería volver a agrandar su queridísima construcción, eso lo hizo recordar cuando con sus queridísimos hermanos oscuros entraron ilegalmente luego de darse cuenta que Vegetta no había bajado en días, lo que los tenía preocupados. Rubius propuso ir y el búho no se sorprendió ya que esos dos eran MUY cercanos, Willy acepto porque (Según él) el oso era muy estúpido y seguramente haría que descubrieran al terrible grupo.