Juguemos En El Bosque - El Lobo No Está.

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Todo lo que llega al bosque de abyss, no vuelve nunca más.
Desde siempre se ha sabido ese hecho, por ello todos en la ciudad y en los pueblos cercanos evitan entrar a ese bosque, es el miedo a lo desconocido lo que les hace no querer adentrarse por nada en el mundo en ese lugar.
Pesé a ese antecedente, también hay historias de algunos que han ido por voluntad propia y han logrado volver, con personalidades distintas, más fuertes y hasta más atractivos de lo que eran a tres de entrar a ese lugar.
Pero como se dijo, sólo eran historias, meros rumores sin bases algunas.
Lo más probable era que al entrar allí las personas fuesen tragadas por algún animal salvaje y desconocido o que se hayan perdido en el espeso e inmenso bosque y por consecuencia murieran de inanición.
No era una regla, pero por sentido común nadie debía acercarse, o al menos así debía ser.
Parados en la entra al bosque, están tres chicos, uno de ellos el más alto, sonríe de oreja a oreja, demostrando que no temía al bosque de abyss, sus amigos por otro lado, Lia y Jenm, se toman de las manos y tiemblan un poco, están espantados.
No es para menos, desde siempre les han dicho que no deben ir al bosque, pues es peligroso, y los que van no vuelven, tal cual se los dijo su madre y su padre a los dos hermanos.
-ya dejen de temblar, de Lia lo entiendo, y pero tú Jemn, eres un hombre no?
-que sea hombre no hace no tenga miedo, no idiota, todo ser humano tiene miedo a algo, sea hombre o mujer – respondió el chico medio tembloroso y alzando la voz al final.
-es cierto, Jemn. Pero omitiendo eso, que de verdad quieres entrar allí?
Interrumpió la hermana, dando la razón a Jemn, luego de sonreír un poco, trago saliva y miró a su amigo frente a ella, su hermano también volvió la mirada hacia el cuando ella preguntó con seriedad.
-así es, yo estoy en lo correcto. Mi hermano no pudo mentir, el jamás lo haría, por muy herido o muy perturbado que este, sus palabras, de su boca jamás saldrían mentiras o sin sentidos.
Con su respuesta, ambos jóvenes detrás del, mirando a su espalda, bajaron la mirada, el no los vio, pero el gesto que hicieron fue de culpa, al parecer toman a la persona de la que el habla, su hermano como un mentiroso, o un loco.
-p-pero, aún así. No hay manera de que nos adentremos ahí, tu mismo viste el estado en el que volvió tu hermano.
-eso y esto son cosas distintas. No traten de escapar a esto, prometieron ayudarme, y eso harán.
Con esas firmes palabras ambos Lia y Jemn, se abrazaron con miedo, sus rostros mostraba una sombra.
-se lo que ustedes piensan, se que creen que mi hermano Gray esta loco.
Continuó el chico, apretando sus puños.
-pero yo lo conozco mejor que nadie, y si el dice que existe otro-
Cuando se volvió y dijo esas palabras elevando su tono, una luz cayó desde un árbol a un lado de ellos, asustando a los hermanos, el solo se impresionó y su mirada mostró un brillo, seguido de una sonrisa un tanto maliciosa.
Al unísono, los hermano se preguntaron que era esa extraña luz, que ahora era tenue, se mantenía en aumento hasta irradiar por completo a los tres chicos luego se hacía tenue de nuevo.
-esto es de lo que mi hermano hablaba! Es la luz del abyss, una vez que la miras brillar ya no hay vuelta atrás.
El chico se mira alegre, y a punto de estallar de la emoción. Por otro lado, los hermanos, captaron lo último que dijo. Preguntaron, sin embargo fueron ignorados.
Corrieron tras su amigo quien se lanzó directamente a la luz cuando está se hacía más y más intensa.
-que haces?  y no te acerques a eso!
-que no lo haga? Estás loco! Esto es lo que busco, por esto vine, probare que mi hermano no es un mentiroso, que no está demente, por ello yo!
-No tienes que ir tan lejos por eso, tu hermano está mal herido, no sabemos si despertará algún día siquiera y tu quieres hacer lo mismo que el?!
-…
Ambos hermanos corrían tras el, Lia dijo esas palabras muy preocupada, su hermano luce un tanto inquieto, su amigo a unos pocos pasó frente a estos, se detiene, da la vuelta y los mira con emoción.
-no lo hago solo por mi hermano, lo hago por mi propio bien! Ustedes son la prueba de que una vez existía en este mundo, los traje con ese propósito, cuando me vaya solo ustedes podrán decirle al mundo que yo Selricxs Sylv, partí justo aquí y ahora al lugar que mi hermano Dos, les contó.
Ellos lo miran incrédulos, por tal motivo les pidió que lo acompañen,  ¿para verlo desaparecer sin más?
Jemn se cuestiono eso, mostrando en su cara incomodidad por ello, por el motivo oculto de su amigo.
La luz se intensificó nuevamente, sólo que está vez era distinto, ya no se limitaba al área del árbol, la luz brillaba en todo el bosque, fue la impresión que le daba a los hermanos quienes se miran entre ellos con preocupación.
-Lia, yo… entiendo lo que sucede, y soy como Sel, creo en lo que dijo Dos.
Al escuchar a su hermano, Lia al parecer ya entiende lo que quiso decir Jemn con eso, su rostro hace mueca, y mientras su hermano sujeta sus hombro y la mira a los ojos, ella se muestra cabizbaja, lágrimas descienden por sus mejillas.
-se lo que esté idiota pretende hacer, y yo voy a ayudarlo, pese a lo inútil que puedo ser en algunas situaciones (esta en particular).
En su cabeza, ella lo sabe, su hermano puede ser miedoso cuando se trata de fantasmas, de lugares oscuros, o de cosas que no conoce, pero su carácter sale a relucir cuando es necesitado, siempre supera su miedos inconscientemente en momento como estos. De nada le serviría decirle que no, eso ella lo sabe muy bien.
-…
-vamos no llores, volveré antes de lo que pienses, y traeré a ese tonto conmigo. Después de todo, Dos volvió. Logró hacerlo.
El corrió darle una sonrisa a su hermana, y la empujó un poco, aunque le dijo vete justo después de echarse a correr a donde su amigo Sel, ella no pudo evitar el correr en la misma dirección.
Allí delante de ellos estaba Sel mirándolos con un pulgar arriba, con su actitud de “haré lo que quiera, ustedes pueden irse” escrita en toda su cara, la cual se vio apagada al ver que Jemn se acerca a él a todo velocidad, tornando sus puños.
-hey, que aléjate. Debes quedarte con tu hermana, solo ve con ella y haz lo que dije!
-si, como si fuera dejarte ir así como así, que no idiota!
-HERMANO! SELRICXS!
El bosque se inundó de luz, y a su vez el grito de Lia, se escuchó haciendo eco en todo el lugar, no pudo ver nada más que luz, luz que lastimaba sus ojos por ellos, los cerró y protegió con su brazo derecho viendo por última vez a su a hermano y a su amigo.
Al volver todo a la normalidad. Solo ella estaba allí, en medio del bosque abyss, en plena oscuridad, sólo la poca luz nocturna daba en su rostro entristecido y las lágrimas que descienden de sus mejillas reflejan un poco del brillo de la poca luz que brindaba la noche.
-… esos idiotas, se atrevieron a dejarme atrás una vez más.
Sus palabras no llegaron a nadie, pero la hicieron sentir aún más triste, lo que la llevó a sentarse y abrazar sus piernas, y dejarse llevar por el llanto que se acumulaba en su corazón.

Luz en el AbismoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora