INDIGO 2 (Visionarios)

Capítulo 4

Después de una charla inmensa sobre lo ocurrido Liana resumió los últimos eventos en esto: Amelia había envenenado a Sammuel, Mia no le creyó y la desterró, al ser desterrada el polvo raquín que le habían dado se había salido por completo de su sistema y pudo recordarlo todo, así que fue en búsqueda de su padre, ya tenía una idea de por donde pudiera estar ya que Sammuel tenía una teoría sobre su paradero. Encontró a Demián, su padre y le ayudó a recordarlo todo...Demián utilizaba un sombrero y parecia estar loco...pero poco a poco fue recordando y regresaron con muchisima prisa a Indigo, llegaron justo al momento de la batalla.  

Lo que jamás esperó fue que Amelia en realidad fuera Emmerett la hija del elegido cazador, Aaron había muerto lo irónico del asunto es que el mismo se provocó su muerte, aún habían cosas sin explicación como de que se trataba todo ese humo negro saliendole de los ojos a Aaron entre otras cosas, Javier el mejor amigo de Mia estaba desaparecido.

-¿entonces no hay más noticias? - dijo Naalinda.

-No, ahora sabes lo mismo que yo ¿pero ya sabías no? Sabías que esto pasaría -respondió Liana.

- debes entender Amelia, que hay cosas que deben suceder porque son obras del destino -

-¿El destino?, tu único trabajo es avisarnos, tu eres la que ve el futuro....¿de que sirve saber que va a suceder si no lo podremos evitar?-

-El futuro es incierto Amelia y te recuerdo que tengo mas de cien años de experiencia como para saber cuando es necesario intervenir y cuando no -

-¡Sammuel murió!, eso lo pudiste haber evitado -dijo Liana con voz cortada -perdimos a Sammuel -guardó silencio un momento

Melissa que no entendía nada de lo que hablaban se apartó un poco del grupo para explorar, estaba ya muy lejos de Naalinda cuando escuchó un pillido a lo lejos.

-¡Ayuda! -decía la voz. Melissa asustada corrió hacia donde escuchó el sonido.

-Estas perdida lily, te recuerdo que estas en una interdimensión, puedes gritar todo lo que quieras, nadie te escuchara-

-Déjame en paz, ¡sueltame! Cuando la reina se entere...-

-¿se entere? ¿Que me hará? ¿Lanzarme polvos mágicos?, eres una desterrada lily todo por ayudar a la persona equivocada -la chica chillo de nuevo. Melissa corrió hacia las voces, ocurrían detrás de un árbol. Al llegar miro a las criaturas que emitían los sonidos, era un hombre pequeño, como de un metro y tanto de altura un poco gordo y barbudo, la mujer era una pequeña dama delgada, muy delgada de rasgos orientales y cabello largo y era unos centímetros más pequeña que el hombre. Notó que el hombre la tenía sujetada de la espalda por unas cositas parecidas a alas y sostenía un artefacto punzocortante.

-Te cortaré las alas Lily, eres una desgracia- la mujercita chillo sin poder moverse, fue entonces cuando Melissa intervino.

-¿que está pasando aquí?- entonces el enano se detuvo y la miró.

-lárgate, esto no te incumbe -dijo con evidente molestia.

-me incumbe mucho, porque has de saber que esa pequeña mujer es mi amiga- mintió Melissa a lo que lily la miró estupefacta.

-¿verdad lily?- dijo Melisa imitando el nombre que había escuchado, la aludida simplemente se quedó con ojos muy abiertos.

-ella no tiene amigos - dijo el hombresito.

-y tu no tienes tacto, ahora suéltala - el hombre soltó a lily con molestia y dio media vuelta para encarar a Melissa con su cuchillo pero esta ya lo estaba cargando, el movimiento hizo que el cuchillo cayera al suelo. Melisa lo sostuvo frente así por un momento.

-pero vaya que tu eres un personaje chistoso- dijo mientras el hombre con altura de gnomo  se retorcía.

-bájame niña insolente -

-no quiero -

-No sabes quien soy -dijo el gnomo -soy Gedran del cuartel de los gnomos, nosotros nunca olvidamos muchachita, y ojo por ojo..- pero tuvo que callarse porque Melissa comenzó a agitarlo de lado a lado a manera de juego.

-y tu no sabes quien soy -dijo mintiendo Melissa -si aprecias mi vestimenta- dijo dirigiendo su mirada a su amplio vestido rosa de xvañera, puedes ver que soy una princesa, soy la princesa del reino de Guadalajara, de la sangre de la realeza Mexicana -Melisa siempre había sido muy buena con las mentiras -y tu me has faltado al respeto pero si dejas a esta dama en paz y desapareces te perdonare la vida, pero si no, puedes estar seguro que los míos harán todo lo posible por encontrarte y terminar contigo - el gnomo tragó audiblemente pero no dijo nada. Melissa lo depositó en el suelo y este hizo plan de recoger el cuchillo.

-ah a-a - dijo Melissa y se lo quitó de las manos -yo me quedaré con esto, vamos a llamarlo el objeto que selle nuestro trato, ahora retírate - el gnomo tenía la cara roja de coraje y humillación, le apuntó a Melissa con un dedo regordete y le dijo

-lo lamentarás, ya veras -y desapareció en un simple ¡puff! Melissa se agachó y puso su mano en el césped para que la criatura hembra se subiera y ella lo hizo así.

-muchas gracias su alteza -dijo Lily -es todo un honor ser salvada por su excelentísima - a lo que Melissa respondió con una carcajada.

-no soy una princesa -dijo -le he mentido al gnomo para poder salvarte -Melissa no podía contener la risa.

-¿mentir?- dijo lily

-sí, mentir, ¿que, nunca lo has hecho? -el hada solo negó con la cabeza.

-pues yo sí, lo hago a menudo para salir me de aprietos.

-bueno de cualquier manera, muchas gracias-

- denada - respondió Melissa sonriendo -y si no te molesta que lo diga, ¿que eres? - Melissa se encontraba caminando con Lily sentada en su mano e iban de regreso a donde estaba Naalinda.

-ah yo pues, soy un hada madrina, bueno lo era- dijo en tono triste.

-¿un hada madrina?- pregunto Melissa -¿como es posible!?

-aah um bueno pues no lo se, cuando una hada mujer se enamora de un hada hombre, le regala sus polvos... -

-nono, si entiendo eso- dijo Melissa interrumpiendo a media frase - me refiero a que si sé que es un hada madrina pero yo...nunca había visto una-

-pues de donde vengo hay muchas,  hadas madrinas, hadas del hielo, hadas del bosque, las hadas del submundo, entre otras cosas-

-vaya -dijo Melissa.

-¿y tu? ¿Quien eres entonces?-

-yo me llamo Melissa y soy em humana del planeta tierra supongo - dijo la chica encogiéndose de hombros

-¿en donde estabas?-dijo Naalinda al ver que Melissa se acercaba -no puedes irte así -

-no es como que pudiera escaparme ¿o si?- dijo Melissa pero Naalinda ya estaba viendo al hada de su mano.

-Lily - dijo casi en un grito al ver sus alas lastimadas -déjame ayudarte con eso - pronto Naalinda comenzo a poner algo sobre las alas del hada y comenzó a murmurar una oración, en ese momento Liana ya había llegado al grupo, al verla, el hada tomó postura recta y se alejo de Naalinda, sus alas estaban curadas y había podido volver a volar, se sitúo frente a Liana e hizo una reverencia.

-señorita Amelia, he venido a buscarla -dijo Lily. -tengo un mensaje de parte de Demian- Liana sonrió y miró a Naalinda.

-parece ser que llego a quién esperábamos, es hora de partir -

-¿a donde? -preguntó Melissa

-a casa de mi padre- dijo Liana.